Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
A un día de que entre en operación el nuevo modelo de salud de los maestros del magisterio en Colombia, existen algunas dudas e inquietudes sobre cómo funcionará así como los retos que tendrá que enfrentar el sistema con este cambio. Para resolver estos interrogantes desde El Espectador, le proponemos este ABC para comprender la situación.
Para empezar es importante entender qué cambio en el sistema de salud de los maestros. En el sistema que funciona hasta hoy (30 de abril) existen tres actores principales: el Fondo del Magisterio (Fomag), la gran bolsa de recursos que reúne la plata de la pensión, cesantías y cotizaciones de los docentes, Fidruprevisora, que maneja ese dinero y abre licitaciones para contratar los servicios de salud con los operadores, el tercer y último actor. Estos últimos forman uniones temporales (asociaciones de empresas en torno a un proyecto) que funcionaban como una suerte de EPS que recibían el dinero de la salud del magisterio para contratar a centros de salud.
En contexto: Llegó la hora cero para el nuevo sistema de salud de Fecode.
Este modelo, no obstante, había generado varias dudas por parte de los maestros que aseguraban que los operadores no contrataban de manera adecuada los servicios, lo que se traducían en un mal servicio. Por esta razón, se eliminaron los operadores, y se le asignó esta responsabilidad directamente a la Fiduprevisora.
Según la circular 03 del 1° de abril de 2024 que modifica el sistema, esta entidad será la encargada, como “vocera y administradora de los recursos del Fomag”, de adelantar las acciones y contrataciones para garantizar el acceso a la salud a través de una “expansión de la oferta” de hospitales y clínicas a las que puedan ir los maestros en Colombia (específicamente, en ocho regiones en las que se divide el país en el nuevo modelo). Es decir, esta entidad pasa de tener que hacer contratos con operadores (que podían ser entre 9 y 13 para todo el país), a hacer contratos con miles de clínicas y hospitales.
El nuevo modelo plantea que la Fiduprevisora haga esos contratos después de abrir una invitación pública para que todas las IPS que quieran (y que cumplan con ciertas condiciones) se inscriban a una “Red Nacional de Prestadores”. La intención de Fecode es que en esa red puedan estar todas las IPS que existen en Colombia que, según el Registro Especial de Prestadores de Servicios de Salud (REPS), son más de 11.000, entre públicas y privadas. De esta manera, el nuevo modelo promete que los maestros tengan un mayor acceso a la salud.
El nuevo sistema contará con tres niveles: un componente de prestador primario, un nodo regional de servicios, y centros de excelencia o altamente especializados para acceso nacional a cualquier maestro o beneficiario del magisterio. Irá además acompañado de un gestor farmacéutico a lo largo de los tres y de un sistema de transporte especializado
Dado el corto tiempo, Fecode reconoce que la Red Nacional de Prestadores que propone el nuevo modelo no está lista. Debido a eso, y buscando que a partir del próximo 1° de mayo los maestros no se queden sin servicios médicos, la Fiduprevisora tomó dos decisiones, con el aval del Fomag: hacer contratos de entre tres y seis meses con las clínicas y hospitales que ya contrataban antes los operadores, y con la red pública que hay en las regiones.
Daniela Andrade, vicepresidenta encargada del Fomag explica como este modelo tendrá dos líneas de acceso para los maestros. La primera, señaló, es la Red Primaria, que es la atención básica y, en este momento, cuentan con 511 prestadores de servicio que quieren ser parte de esta red.
“Estos prestadores estarán al servicio del magisterio. El maestro, en principio, será adscrito a una red cerca a la su lugar de su domicilio. Sin embargo, durante el desarrollo de esta red, que será cambiante y estará condicionada al Consejo Directivo en la medida que se vaya nutriendo por los diferentes proveedores, el maestro tendrá exclusividad a través del sistema único Fomag de acceder a una solicitud de cambio a su atención primaria”, añadió Andrade. La atención primaria, además, tendrá unas sedes exclusivas que se podrán identificar como Sedes Fomag.
Esta será la puerta de entrada al servicio de salud. La segunda línea es una red complementaria. Por el momento, hay 1.591 prestadores de salud, de los cuales hay 31 entidades acreditadas. La referencia y contrareferencia de cada uno de los afiliados del magisterio, añadió, estará a cargo de la Fiduprevisora.
Los cambios en Fiduprevisora
El Ministerio de Salud (asesor en la construcción de este modelo) ha dejado claro que, dada estas nuevas responsabilidades, la Fiduprevisora necesitaba cambiar. Ese proceso de reestructuración interna ya comenzó, aunque aún hay algunas cosas por resolver.
Por ejemplo, el director de Fiduprevisora, Mauricio Marín, aceptó, en declaraciones a medios de comunicación, que aún no se tiene una auditoría contratada para verificar la prestación del servicio.
“Igual que en el modelo anterior, y como hace más de 30 años, esto va a contar con una auditoría de concurrencia, de calidad y de cuentas médicas, eso no cambió. Lo tienen que hacer empresas seleccionadas por convocatoria. El consejo directivo tiene sesiones permanentemente, estamos hablando de convocatoria para cuentas médicas, las cuales no se reciben el primer día”, indicó Marín a W Radio.
Podría interesarle: Sistema de salud Fecode: “será financiado directa y exclusivamente por los maestros”.
Por su parte, según Hernando Bayona, docente de la facultad de Educación de los Andes, “la Fiduprevisora no tiene un esquema y estructura fuerte que permita, por ejemplo, identificar los costos de las enfermedades o los tratamientos. Puede ocurrir lo que ha pasado en otros sistemas, y es que sea más probable la corrupción. Si yo no tengo claro eso, es posible que comience a girar recursos a las IPS de manera indiscriminada, sin tener en cuenta los costos reales de esos tratamientos”.
De manera general, los días previos al inicio del modelo han estado rodeados de críticas y temores frente a lo que sucederá a partir de esa fecha. Entidades como la Procuraduría General están preocupadas. “La salud de aproximadamente un millón de maestros está en riesgo a partir del 1° de mayo, por el cambio del modelo de atención”, dijo la procuradora Margarita Cabello. Para la funcionaria, se podría presentar una “enorme improvisación”.
Políticos como Catherine Juvinao, representante del partido verde, o María Fernanda Cabal, congresista del Centro Democrático, se han hecho preguntas similares frente a la capacidad y organización del Gobierno y de Fecode (el principal sindicato de los maestros), para liderar esta transición.
Mientras eso ocurre por el lado de Fecode, cursan varias acciones judiciales respecto a este tema. Una tutela radicada por la Red de Veedurías Ciudadanas de Colombia ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca busca que, ante la caducidad de los contratos con los antiguos operadores, se declare la “grave e inminente amenaza” a la salud de los maestros y se ordene implementar un “régimen de transición para darle continuidad en todo el país a la prestación del servicio de salud de los maestros”.
Además, piden que se ordene establecer una comisión de seguimiento compuesta por delegados de la Procuraduría, la Defensoría y la Superintendencia de Salud, y, por supuesto, de por la misma red de veedurías “para informar sobre el cumplimiento de las medidas preventivas”. El Espectador contactó a la Fiduprevisora para esta nota, pero, al cierre de la edición, no fue posible obtener una respuesta.
👩🏫📄 ¿Quieres conocer las últimas noticias sobre educación? Te invitamos a verlas en El Espectador. ✏📚