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Durante el primer Día Internacional del Juego, conmemorado el pasado martes 11 de junio, Unicef publicó un nuevo informe con datos de abuso infantil en todo el mundo. De manera más específica, esa entidad calculó que son casi 400 millones de niños y niñas, menores de cinco años, víctimas de violencia verbal y física al interior de sus hogares. De hecho, se especificó que 300 millones son castigados por medios físicos.
Catherine Russel, directora ejecutiva de Unicef, dijo que, cuando los menores de edad son víctimas de ese tipo de tratos en sus ambientes domésticos, se puede “socavar su sentido de la autoestima y desarrollo”, sobre todo porque se ven privados de la atención social y emocional de sus seres queridos, a veces proporcionada a través del juego, la estimulación e interacción con sus madres, padres y cuidadores.
La organización destacó los esfuerzos de algunos países en todo el mundo por prohibir el castigo físico de los niños en el hogar. Sin embargo, y según cifras de Unicef, “casi medio billón de menores de cinco años sigue sin contar con una protección jurídica adecuada (....). Las normas sociales nocivas refuerzan las prácticas violentas en la crianza de los menores”. Como prueba, el informe expone datos en los que una de cada 4 madres y cuidadores primarios afirmaron necesitar del castigo físico para criar a los niños. De hecho, y como lo contamos anteriormente en estas páginas, en Colombia el 85 % de las violencias que sufren los niños en Colombia se dan en “entornos domésticos”; mientras la impunidad, ya sea por silencio o demoras en la atención estatal, deja el 97 % de los casos sin justicia.
Además, 4 de cada 10 menores entre los dos y los cuatro años de edad no reciben los suficientes estímulos en casa, como atención y juegos. Esto puede traer consecuencias en el desarrollo de su personalidad adulta, como desapego, inseguridad y problemas de comportamiento. De igual manera, uno de cada 10 no realiza con sus cuidadores actividades fundamentales para su desarrollo, como leer, contar cuentos, cantar y dibujar.
Por último, Unicef hizo un llamado a los gobiernos de todo el mundo para que refuercen los marcos jurídicos contra el maltrato infantil, y se invierta más en programas de crianza con espacios seguros en los que niños y niñas puedan desarrollarse.
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