Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
“El mundo está siendo privado de un gran recurso sin explotar”. Con esta frase Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, resumió los hallazgos del Índice Global de Brecha de Género de 2017, que fue presentado este mes.
El informe reconoce que existe un constante progreso realizado en la igualdad de género en la última década aunque 2017 no resultó particularmente un gran año. Tanto así que la brecha entre hombres y mujeres en la salud, la educación, la política y la economía, las cuatro principales categorías evaluadas, se amplió por primera vez desde que comenzaron los registros en 2006.
Tanto Ruanda como Nicaragua se encuentran en el top 10, por ejemplo, mostrando cómo estos países distribuyen sus recursos y oportunidades relativamente bien.
Colombia ocupó el puesto 36 entre los 144 evaluados. Al país le va bien en educación y salud. La puntuación en igualdad económica es regular. Y los resultados en participación política bastante deficientes.
Como lo señalaron los voceros de la organización a través de un comunicado de prensa, “hay una notable ausencia de cualquiera de las principales naciones industrializadas del mundo, el llamado G20, dentro del top 10, que muestra que el poder económico no es necesariamente una receta para una mejor igualdad entre los sexos”.
Islandia ha sido el país con mayor igualdad de género en el mundo durante nueve años, formando parte de una tendencia de los países nórdicos. En promedio, los 144 países en el informe casi han cerrado la brecha en los resultados de salud y logro educativo.
“Los países deben prestar atención a la brecha de género no solo porque esa desigualdad es intrínsecamente injusta; también porque numerosos estudios sugieren que una mayor igualdad de género conduce a un mejor desempeño económico”, concluyeron los autores de la evaluación.
El informe cita estimaciones recientes que sugieren que la paridad económica de género podría agregar $ 250 mil millones adicionales al PIB del Reino Unido, $ 1,750 mil millones al de Estados Unidos y $ 2,5 billones al PIB de China.
Con la tasa de progreso actual, la brecha global de género global tardará cien años en cerrarse, mientras que la brecha en el lugar de trabajo no se cerrará en 217 años.