En los planes de gobierno de los siete candidatos presidenciales sobresale la educación como uno de los pilares de la transformación de la sociedad. Sin embargo, para ocho observatorios de educación del país, estas propuestas carecen de una ruta específica para ejecutar sus objetivos. (Le puede interesar: En zonas fronterizas colombianas hay más barreras para que niñas migrantes estudien)
Por eso, estos observatorios se unieron para pedirle a los siete candidatos, por medio de una carta, claridad antes de la primera vuelta sobre qué van a hacer para mejorar la educación, cuáles son las estrategias que van a emplear y con qué recursos piensan financiar.
Lo primero que explican los observatorios es el panorama actual que enfrenta la educación en el país: primero, que en Colombia la mitad de los estudiantes que entran a primero de primaria no logran terminar su bachillerato, es decir, de cien solo cincuenta logran graduarse. Además, en los colegios públicos, principalmente por los paros, se pierden más de 70 días al año. (Lea también: La travesía de un grupo de ucranianas para llegar al Mundial de Física en Colombia)
En cuanto a las brechas en educación, señala el documento, también existe una grieta abismal entre sectores, regiones y poblaciones de especial protección (mujeres, migrantes, comunidades étnicas y discapacitados). Por ejemplo, Colombia está dentro de los países con una de las brechas de género más amplia en matemáticas en contra de las mujeres, en las últimas pruebas PISA; y se presentan rezagos significativos (de hasta medio año de educación) en relación con el mejor país en Latinoamérica y hasta de 2 años con relación al promedio de la OCDE, según las pruebas estandarizadas PISA 2018.
A este panorama, dicen los observatorios, hay que sumarle una necesidad que la pandemia hizo visible: la atención a la salud mental de niños, niñas y adolescentes. “El 42% de los colegios oficiales y 61% de los rurales no cuentan con profesionales para dar acompañamiento psicosocial. Además, sólo el 20% de los colegios prestan servicios para identificación, derivación y atención a problemas de salud mental”.
Y para los docentes, no existe un sistema de desarrollo profesional con oferta de formación diferenciada que ayude a mejorar los aprendizajes de los estudiantes. “Solamente 17 de 96 Entidades Territoriales Certificadas tienen Planes Territoriales de Formación Docente (PTFD)”, añaden los observatorios. (Lea también: Fecode se une a la campaña presidencial de Petro y Francia Márquez)
Ante esta situación, los ocho observatorios invitan a los siete candidatos a que se comprometan con la inmensa responsabilidad que tienen como líderes y constructores del futuro en las bases de la política educativa, pues “la educación es sin duda una herramienta transformadora de la vida, el trabajo, la convivencia de las personas y de la sociedad. Por tanto, requiere estar en el primer lugar de la agenda política”.
La carta fue firmada por el Observatorio a la Gestión Educativa ExE de la Fundación Empresarios por la Educación, el Laboratorio de Economía de la Educación (LEE) de la Universidad Javeriana, el Observatorio de Educación del Caribe Colombiano de la Universidad del Norte, el Observatorio de Realidades Educativas (ORE) de la Universidad ICESI en el Valle del Cauca, la Sociedad en Movimiento de Risaralda, el Observatorio de la Red Universitaria de Risaralda (RUN), la Fundación Saldarriaga Concha y el Observatorio de Interpretación de las Realidades Educativas de Norte de Santander (OIRE).
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