Esto pedirán universidades de A. Latina en la conferencia mundial de educación
La Conferencia Mundial de Educación Superior 2022, de la UNESCO, se realizará del 18 al 20 de mayo en Barcelona y busca definir una hoja de ruta para la educación superior mundial. Dolly Montoya, rectora de la Universidad Nacional y presidenta de la UDUAL, presentará algunas de las propuestas de la región como la educación como política de estado, la autonomía universitaria o la equidad en el acceso a la educación.
Ya sabemos que una de las medidas que implementaron varios países para detener la propagación del coronavirus fue cerrar los negocios, los colegios, las universidades y los demás establecimientos que aglomeraran a las personas. También es conocido que estos cierres que fueron prolongados, sobre todo en Colombia que tardaron hasta dos años en reabrir los planteles educativos, trajo consecuencias desastrosas para la educación. De hecho, el 90% de los niños, niñas y adolescentes en edad escolar del mundo han visto interrumpida su educación por la pandemia, según la UNESCO. (Lea: Informe de 200 organizaciones revela la inquietante situación de la niñez en Colombia)
Sin embargo, no se ha entendido el impacto que tuvo el coronavirus en la educación superior o en el financiamiento de las instituciones. Para definir y preparar una hoja de ruta para la educación superior en el mundo, la UNESCO reunirá en Barcelona, España, a los gobiernos y los actores del sector educativo en la Conferencia Mundial de Educación Superior 2022, que se realizará del 18 al 20 de mayo. Uno de esos invitados será la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL), que reúne a más de 200 universidades de la región.
La UDUAL presentó el documento que será socializado por Dolly Montoya, rectora de la Universidad Nacional de Colombia, en la conferencia y que recopila una serie de metas planteadas por las principales universidades de la región. La primera, aprovechando los modelos pedagógicos derivados del aprendizaje en línea, es impulsar la construcción de una comunidad cibernética del aprendizaje, Pero, dicen, “no necesariamente estas tecnologías bastan para cumplir los propósitos que tiene planteados las instituciones, particularmente en los países con mayores rezagos”.
Por eso, para la UDUAL esta propuesta debe adecuarse a los contextos y necesidades de cada país, pues los cambios en la implementación de las tecnologías reflejan problemas estructurales que aún no se han superado, como las inequidades, los atrasos, la baja calidad de la educación básica, una cobertura reducida de la educación superior o los elevados niveles de deserción. “Debemos incorporar la noción de que los problemas de la educación superior están estrechamente ligados a dificultades sociales de carácter estructural”, advierte.
Para conseguirlo, proponen, se construya una política de estado que garantice una adecuada financiación y autonomía de la universidad. La inclusión de los jóvenes y de apostarle a nuevos modelos de aprendizaje orientados a promover el diálogo intercultural es la tercera meta. “Buscamos reforzar la creación de universidades indígenas e interculturales y, al mismo tiempo, lograr que nuestras universidades se conviertan en universidades interculturales, plurales e incluyentes y, por supuesto, diversas”, dice la UDUAL.
Otra de las metas es conseguir que la producción de conocimiento esté asociada a la construcción de valores sociales y que sus resultados se compartan con todos los grupos sociales. Es decir, “que queremos equidad y avanzar en la superación de todo tipo de discriminación e incluir en el sistema a las poblaciones que históricamente han sido excluidas”, apuntan. Por último, buscan lograr una completa autonomía de las universidades para poder ejercer la libertad de cátedra y de investigación. (Puede leer: “Juntos Aprendemos”, la apuesta para fortalecer la educación en Colombia)
“Los ejemplos son múltiples y crecientes, sobre todo en los recortes en el presupuesto; el condicionamiento para la entrega de recursos; la imposición de rectores y funcionarios de alto nivel; el allanamiento de instalaciones, legislaciones locales aprobadas de espalda a las comunidades universitarias; las auditorías y ejercicios de fiscalización recurrentes y frecuentemente fuera del marco normativo, e imposición de modelos educativos”, advierten. Para poder cumplir estas metas, la UDUAL le hace 10 propuestas a los gobiernos de la región y 14 a las instituciones.
Propuestas a los gobiernos:
1. Los gobiernos deberán garantizar la posibilidad de acceso y la gratuidad de la conectividad de todos/as los/as estudiantes y docentes de las universidades.
2. La política de educación superior debe ser una política de estado que asegure a las universidades las fuentes permanentes de financiación que requieren, evitando depender de la voluntad de los gobiernos.
3. Se debe proponer a los gobiernos el aseguramiento de presupuestos plurianuales que den certidumbre en el mediano plazo a las IES.
4. Se deben ofrecer incentivos financieros a las IES en función de sus avances en calidad académica, cobertura, equidad y acciones de impacto social, que incluyan el financiamiento a la investigación relacionada con los ODS.
5. Se requiere impulsar iniciativas para que los Estados destinen recursos a la investigación que se desarrolla en las IES.
6. Es indispensable el fomento a la Cooperación Internacional intralatinoamericana y caribeña y con otras regiones del mundo, para fortalecer sinergias que permitan alcanzar mejores resultados en el campo de la tecnología y la innovación.
7. Es necesario crear iniciativas intergubernamentales a favor de la mejora de la calidad de la educación superior.
8. Es importante estimular la producción de información y conocimiento de alta calidad que sea acorde a las necesidades de las regiones menos desarrolladas, que ofrezca respuestas a los ingentes problemas sociales como la pobreza y la desigualdad y que sea útiles para el avance de las sociedades en las que se produce, contribuyendo a su bienestar.
9. Se requiere generar programas nacionales y regionales de investigación en el marco de redes que sostengan la producción de conocimiento en áreas críticas para el bienestar presente y futuro de nuestras sociedades.
10. En el marco de organismos de integración y cooperación que existen en la región, crear una Agencia para el desarrollo de la Educación Superior y su vinculación con la sociedad. Esta agencia estaría financiada por los gobiernos de la región y gobernada tripartitamente por los gobiernos, las IES y organismos sociales. (Le puede interesar: Sistema Maestro: Ministerio de Educación abre 71 vacantes para profesores)
Propuestas a las instituciones:
1. Las universidades deben impulsar que la tecnología para el aprendizaje y el conocimiento se conciba como un aliado del proceso formativo, evitando la imposición de modelos gobernados por plataformas electrónicas, sin perder de vista los aspectos sociales de la formación.
2. La ES en ALC debe integrar contenidos relacionados con los ODS en el currículo universitario e incentivar que las propias IES desarrollen acciones vinculadas a los ODS.
3. Se debe fomentar a la investigación universitaria en temas relacionados con los ODS.
4. Es importante crear estrategias sólidas e inclusivas que favorezcan la movilidad académica intrarregional y entre regiones.
5. Los conocimientos aportados por la tecnología y la innovación deben ser empleados para ampliar la colaboración y la cooperación internacional.
6. Se requiere crear mecanismos para incrementar la matrícula de personas con necesidades educativas especiales, que garanticen una adecuada inserción de estas personas en todas las dimensiones de la educación superior.
7. Es importante apoyar a las regiones con mayores necesidades para la incorporación a la educación superior de más mujeres, indígenas, afrodescendientes y otros grupos vulnerados, de modo tal que nadie se quede atrás y que ninguna región resulte discriminada o excluida.
8. Es necesario actualizar el concepto de calidad en la ES para ponderar adecuadamente el impacto social de las universidades y los nuevos desarrollos generados por la educación no presencial.
9. Es urgente elaborar esquemas de trabajo interuniversitario que evalúen avances bianuales e impulsen el cierre de brechas entre programas, instituciones, naciones y regiones.
10. Es importante defender la Autonomía Universitaria desde órganos internacionales.
11. Se debe priorizar la generación de conocimiento socialmente útil, que atienda problemas como la pobreza, la atención en salud, la discriminación y la desigualdad.
12. Junto a un aprendizaje de vanguardia, desde el punto de vista científico y tecnológico, es clave impulsar una formación para el futuro, que incluya los valores universales de empatía, de respeto por la diferencia, de solidaridad y cooperación, que eduque en el cuidado de sí, del otro y del medio ambiente y que refuerce los postulados de la educación para la ciudadanía mundial.
13. Es importante valorar y ampliar los trabajos en redes y entre redes de IES y de investigación para avanzar en la cooperación internacional. (Lea también: Acoso sexual: ¿Por qué no sabemos enfrentarlo en los colegios?)
14. Se deben incentivar las acciones que posibiliten oportunidades de acceso a la educación superior de los migrantes y refugiados.
Ya sabemos que una de las medidas que implementaron varios países para detener la propagación del coronavirus fue cerrar los negocios, los colegios, las universidades y los demás establecimientos que aglomeraran a las personas. También es conocido que estos cierres que fueron prolongados, sobre todo en Colombia que tardaron hasta dos años en reabrir los planteles educativos, trajo consecuencias desastrosas para la educación. De hecho, el 90% de los niños, niñas y adolescentes en edad escolar del mundo han visto interrumpida su educación por la pandemia, según la UNESCO. (Lea: Informe de 200 organizaciones revela la inquietante situación de la niñez en Colombia)
Sin embargo, no se ha entendido el impacto que tuvo el coronavirus en la educación superior o en el financiamiento de las instituciones. Para definir y preparar una hoja de ruta para la educación superior en el mundo, la UNESCO reunirá en Barcelona, España, a los gobiernos y los actores del sector educativo en la Conferencia Mundial de Educación Superior 2022, que se realizará del 18 al 20 de mayo. Uno de esos invitados será la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUAL), que reúne a más de 200 universidades de la región.
La UDUAL presentó el documento que será socializado por Dolly Montoya, rectora de la Universidad Nacional de Colombia, en la conferencia y que recopila una serie de metas planteadas por las principales universidades de la región. La primera, aprovechando los modelos pedagógicos derivados del aprendizaje en línea, es impulsar la construcción de una comunidad cibernética del aprendizaje, Pero, dicen, “no necesariamente estas tecnologías bastan para cumplir los propósitos que tiene planteados las instituciones, particularmente en los países con mayores rezagos”.
Por eso, para la UDUAL esta propuesta debe adecuarse a los contextos y necesidades de cada país, pues los cambios en la implementación de las tecnologías reflejan problemas estructurales que aún no se han superado, como las inequidades, los atrasos, la baja calidad de la educación básica, una cobertura reducida de la educación superior o los elevados niveles de deserción. “Debemos incorporar la noción de que los problemas de la educación superior están estrechamente ligados a dificultades sociales de carácter estructural”, advierte.
Para conseguirlo, proponen, se construya una política de estado que garantice una adecuada financiación y autonomía de la universidad. La inclusión de los jóvenes y de apostarle a nuevos modelos de aprendizaje orientados a promover el diálogo intercultural es la tercera meta. “Buscamos reforzar la creación de universidades indígenas e interculturales y, al mismo tiempo, lograr que nuestras universidades se conviertan en universidades interculturales, plurales e incluyentes y, por supuesto, diversas”, dice la UDUAL.
Otra de las metas es conseguir que la producción de conocimiento esté asociada a la construcción de valores sociales y que sus resultados se compartan con todos los grupos sociales. Es decir, “que queremos equidad y avanzar en la superación de todo tipo de discriminación e incluir en el sistema a las poblaciones que históricamente han sido excluidas”, apuntan. Por último, buscan lograr una completa autonomía de las universidades para poder ejercer la libertad de cátedra y de investigación. (Puede leer: “Juntos Aprendemos”, la apuesta para fortalecer la educación en Colombia)
“Los ejemplos son múltiples y crecientes, sobre todo en los recortes en el presupuesto; el condicionamiento para la entrega de recursos; la imposición de rectores y funcionarios de alto nivel; el allanamiento de instalaciones, legislaciones locales aprobadas de espalda a las comunidades universitarias; las auditorías y ejercicios de fiscalización recurrentes y frecuentemente fuera del marco normativo, e imposición de modelos educativos”, advierten. Para poder cumplir estas metas, la UDUAL le hace 10 propuestas a los gobiernos de la región y 14 a las instituciones.
Propuestas a los gobiernos:
1. Los gobiernos deberán garantizar la posibilidad de acceso y la gratuidad de la conectividad de todos/as los/as estudiantes y docentes de las universidades.
2. La política de educación superior debe ser una política de estado que asegure a las universidades las fuentes permanentes de financiación que requieren, evitando depender de la voluntad de los gobiernos.
3. Se debe proponer a los gobiernos el aseguramiento de presupuestos plurianuales que den certidumbre en el mediano plazo a las IES.
4. Se deben ofrecer incentivos financieros a las IES en función de sus avances en calidad académica, cobertura, equidad y acciones de impacto social, que incluyan el financiamiento a la investigación relacionada con los ODS.
5. Se requiere impulsar iniciativas para que los Estados destinen recursos a la investigación que se desarrolla en las IES.
6. Es indispensable el fomento a la Cooperación Internacional intralatinoamericana y caribeña y con otras regiones del mundo, para fortalecer sinergias que permitan alcanzar mejores resultados en el campo de la tecnología y la innovación.
7. Es necesario crear iniciativas intergubernamentales a favor de la mejora de la calidad de la educación superior.
8. Es importante estimular la producción de información y conocimiento de alta calidad que sea acorde a las necesidades de las regiones menos desarrolladas, que ofrezca respuestas a los ingentes problemas sociales como la pobreza y la desigualdad y que sea útiles para el avance de las sociedades en las que se produce, contribuyendo a su bienestar.
9. Se requiere generar programas nacionales y regionales de investigación en el marco de redes que sostengan la producción de conocimiento en áreas críticas para el bienestar presente y futuro de nuestras sociedades.
10. En el marco de organismos de integración y cooperación que existen en la región, crear una Agencia para el desarrollo de la Educación Superior y su vinculación con la sociedad. Esta agencia estaría financiada por los gobiernos de la región y gobernada tripartitamente por los gobiernos, las IES y organismos sociales. (Le puede interesar: Sistema Maestro: Ministerio de Educación abre 71 vacantes para profesores)
Propuestas a las instituciones:
1. Las universidades deben impulsar que la tecnología para el aprendizaje y el conocimiento se conciba como un aliado del proceso formativo, evitando la imposición de modelos gobernados por plataformas electrónicas, sin perder de vista los aspectos sociales de la formación.
2. La ES en ALC debe integrar contenidos relacionados con los ODS en el currículo universitario e incentivar que las propias IES desarrollen acciones vinculadas a los ODS.
3. Se debe fomentar a la investigación universitaria en temas relacionados con los ODS.
4. Es importante crear estrategias sólidas e inclusivas que favorezcan la movilidad académica intrarregional y entre regiones.
5. Los conocimientos aportados por la tecnología y la innovación deben ser empleados para ampliar la colaboración y la cooperación internacional.
6. Se requiere crear mecanismos para incrementar la matrícula de personas con necesidades educativas especiales, que garanticen una adecuada inserción de estas personas en todas las dimensiones de la educación superior.
7. Es importante apoyar a las regiones con mayores necesidades para la incorporación a la educación superior de más mujeres, indígenas, afrodescendientes y otros grupos vulnerados, de modo tal que nadie se quede atrás y que ninguna región resulte discriminada o excluida.
8. Es necesario actualizar el concepto de calidad en la ES para ponderar adecuadamente el impacto social de las universidades y los nuevos desarrollos generados por la educación no presencial.
9. Es urgente elaborar esquemas de trabajo interuniversitario que evalúen avances bianuales e impulsen el cierre de brechas entre programas, instituciones, naciones y regiones.
10. Es importante defender la Autonomía Universitaria desde órganos internacionales.
11. Se debe priorizar la generación de conocimiento socialmente útil, que atienda problemas como la pobreza, la atención en salud, la discriminación y la desigualdad.
12. Junto a un aprendizaje de vanguardia, desde el punto de vista científico y tecnológico, es clave impulsar una formación para el futuro, que incluya los valores universales de empatía, de respeto por la diferencia, de solidaridad y cooperación, que eduque en el cuidado de sí, del otro y del medio ambiente y que refuerce los postulados de la educación para la ciudadanía mundial.
13. Es importante valorar y ampliar los trabajos en redes y entre redes de IES y de investigación para avanzar en la cooperación internacional. (Lea también: Acoso sexual: ¿Por qué no sabemos enfrentarlo en los colegios?)
14. Se deben incentivar las acciones que posibiliten oportunidades de acceso a la educación superior de los migrantes y refugiados.