Fecode anuncia paro virtual en protesta por el modelo de alternancia para regresar a clases

A finales de septiembre, el Ministerio de Salud aprobó las normas de bioseguridad que colegios, jardines, universidad y cualquier institución educativa tendrá que aplicar para la reapertura física luego de varios meses de virtualidad. Dentro de los primeros lineamientos de adecuación a las instalaciones físicas, el Ministerio de Salud ordena suministrar alcohol glicerinado permanentemente. Las aulas deberán tener un flujo de ventilación adecuado, abriendo puertas y ventadas en la medida de lo posible. De igual forma, todos los espacios deberán estar correctamente señalizados para respetar los dos metros de distancia entre personas.

Por otro lado, las instituciones deberán asegurar el uso obligatorio de tapabocas de manera permanente durante la estadía en las instalaciones y tendrán que programar un horario de lavado de manos mínimo cada tres horas.

Pero de acuerdo con Fecode, el modelo de alternancia es inconveniente y regresar a clases presenciales podría poner en riesgo a las y los estudiantes del país. De acuerdo con un comunicado emitido por el sindicato, el 11 de septiembre hubo una reunión entre el Comité Ejecutivo de FECODE y la Junta Directiva de la ADE, con la señora Alcaldesa de Bogotá, Claudia López y la Secretaria de Educación Edna Bonilla, para discutir el modelo de alternancia en Bogotá.

“Hay inconveniencia del regreso a clases presenciales sin condiciones y en medio del contagio, sumado a la congestión del precario sistema hospitalario dentro de las condiciones caóticas de la salud pública. También planteamos los argumentos legales y la deficiencia de las condiciones en la infraestructura y las dotaciones de las Instituciones escolares de la ciudad”. (Minsalud: Las pautas para volver al salón)

El regreso a clases está planteado en Bogotá para el 13 de octubre, pero Fecode alega que no se están teniendo en cuenta los “efectos morales” del regreso a las aulas. “Rechazamos su posición displicente y arrogante que expresa claramente desprecio, desinterés y desdén por la opinión de la comunidad educativa e incluso desconoce la Constitución Política de Colombia, la cual establece que prima el derecho a la vida y el bien colectivo, ante el bien individual”.

De esa reunión no salió un consenso. Según Fecode, la Mesa Distrital de Padres, Madres de familia y Cuidadores y 21 concejales de Bogotá solicitaron a la Alcaldesa “replantear la decisión de volver a las aulas escolares”. Incluso se ignora la reciente encuesta de la Secretaria de Educación de Bogotá a las familias, en la que el 80% de los padres y madres de familia, respondieron que no enviarían sus hijos al colegio".

En rechazo al modelo de alternancia, anunciaron una nueva jornada de “paro virtual” los días 20 y 21 de octubre en contra del modelo de alternancia para el regreso a clase propuesto por el Gobierno Nacional.

Según Nelson Alarcón, presidente de Fecode, a El Tiempo, de los 92.000 millones de pesos del Fondo Solidario para la Educación que se destinaron para que los colegios oficiales pudieran hacer las adecuaciones necesarias, solo se hizo entrega de $ 88.000 millones.

A finales de septiembre, el Ministerio de Salud aprobó las normas de bioseguridad que colegios, jardines, universidad y cualquier institución educativa tendrá que aplicar para la reapertura física luego de varios meses de virtualidad. Dentro de los primeros lineamientos de adecuación a las instalaciones físicas, el Ministerio de Salud ordena suministrar alcohol glicerinado permanentemente. Las aulas deberán tener un flujo de ventilación adecuado, abriendo puertas y ventadas en la medida de lo posible. De igual forma, todos los espacios deberán estar correctamente señalizados para respetar los dos metros de distancia entre personas.

Por otro lado, las instituciones deberán asegurar el uso obligatorio de tapabocas de manera permanente durante la estadía en las instalaciones y tendrán que programar un horario de lavado de manos mínimo cada tres horas.

Pero de acuerdo con Fecode, el modelo de alternancia es inconveniente y regresar a clases presenciales podría poner en riesgo a las y los estudiantes del país. De acuerdo con un comunicado emitido por el sindicato, el 11 de septiembre hubo una reunión entre el Comité Ejecutivo de FECODE y la Junta Directiva de la ADE, con la señora Alcaldesa de Bogotá, Claudia López y la Secretaria de Educación Edna Bonilla, para discutir el modelo de alternancia en Bogotá.

“Hay inconveniencia del regreso a clases presenciales sin condiciones y en medio del contagio, sumado a la congestión del precario sistema hospitalario dentro de las condiciones caóticas de la salud pública. También planteamos los argumentos legales y la deficiencia de las condiciones en la infraestructura y las dotaciones de las Instituciones escolares de la ciudad”. (Minsalud: Las pautas para volver al salón)

El regreso a clases está planteado en Bogotá para el 13 de octubre, pero Fecode alega que no se están teniendo en cuenta los “efectos morales” del regreso a las aulas. “Rechazamos su posición displicente y arrogante que expresa claramente desprecio, desinterés y desdén por la opinión de la comunidad educativa e incluso desconoce la Constitución Política de Colombia, la cual establece que prima el derecho a la vida y el bien colectivo, ante el bien individual”.

De esa reunión no salió un consenso. Según Fecode, la Mesa Distrital de Padres, Madres de familia y Cuidadores y 21 concejales de Bogotá solicitaron a la Alcaldesa “replantear la decisión de volver a las aulas escolares”. Incluso se ignora la reciente encuesta de la Secretaria de Educación de Bogotá a las familias, en la que el 80% de los padres y madres de familia, respondieron que no enviarían sus hijos al colegio".

En rechazo al modelo de alternancia, anunciaron una nueva jornada de “paro virtual” los días 20 y 21 de octubre en contra del modelo de alternancia para el regreso a clase propuesto por el Gobierno Nacional.

Según Nelson Alarcón, presidente de Fecode, a El Tiempo, de los 92.000 millones de pesos del Fondo Solidario para la Educación que se destinaron para que los colegios oficiales pudieran hacer las adecuaciones necesarias, solo se hizo entrega de $ 88.000 millones.