La Nobel de Literatura Annie Ernaux encabeza carta en apoyo a Palestina
La página oficial del Festival Palestino de Literatura publicó una carta en la que más de mil artistas, entre los que se encuentran la escritora Sally Rooney y la nobel Annie Ernaux, rechazan trabajar con entidades israelíes.
“No se puede negar la abrumadora injusticia a la que se enfrentan los palestinos. La guerra actual ha entrado en nuestros hogares y ha traspasado nuestros corazones”. Más de mil autores han firmado esta carta, publicada por el Festival Palestino de Literatura el pasado 28 de octubre, quienes la han llamado como “el mayor boicot cultural contra instituciones israelíes de la historia”.
“La cultura ha desempeñado un papel integral en la normalización de estas injusticias. Las instituciones culturales israelíes, que a menudo trabajan directamente con el Estado, han sido cruciales para ofuscar, disfrazar y blanquear con arte (artwashing) el desposeimiento y la opresión de millones de palestinos durante décadas”, aseveró la misiva, que ha reunido a autores, editores y demás trabajadores de la industria del libro.
El documento, que sigue recolectando firmas aún hoy 30 de octubre, cuenta con la presencia de autores como Sally Rooney, la nobel Annie Ernaux, Rupi Kaur y Judith Butler, entre muchos otros, notifica que “no trabajaremos con instituciones culturales israelíes que sean cómplices o hayan permanecido como observadores silenciosos de la abrumadora opresión de los palestinos. No cooperaremos con instituciones israelíes, incluidas editoriales, festivales, agencias literarias y publicaciones que sean cómplices de la violación de los derechos de los palestinos o nunca han reconocido públicamente los derechos inalienables del pueblo palestino consagrados en el derecho internacional”.
Afirman, además, que lo acontecido en Palestina desde el 7 de octubre de 2023 es “un genocidio, como llevan meses afirmando destacados expertos e instituciones” e invitan a sus colegas escritores, editores y redactores a “que se unan a nosotros para adoptar una postura, reconocer nuestra propia implicación, nuestra propia responsabilidad moral y dejar de colaborar con el Estado israelí y con instituciones israelíes cómplices”.
“No se puede negar la abrumadora injusticia a la que se enfrentan los palestinos. La guerra actual ha entrado en nuestros hogares y ha traspasado nuestros corazones”. Más de mil autores han firmado esta carta, publicada por el Festival Palestino de Literatura el pasado 28 de octubre, quienes la han llamado como “el mayor boicot cultural contra instituciones israelíes de la historia”.
“La cultura ha desempeñado un papel integral en la normalización de estas injusticias. Las instituciones culturales israelíes, que a menudo trabajan directamente con el Estado, han sido cruciales para ofuscar, disfrazar y blanquear con arte (artwashing) el desposeimiento y la opresión de millones de palestinos durante décadas”, aseveró la misiva, que ha reunido a autores, editores y demás trabajadores de la industria del libro.
El documento, que sigue recolectando firmas aún hoy 30 de octubre, cuenta con la presencia de autores como Sally Rooney, la nobel Annie Ernaux, Rupi Kaur y Judith Butler, entre muchos otros, notifica que “no trabajaremos con instituciones culturales israelíes que sean cómplices o hayan permanecido como observadores silenciosos de la abrumadora opresión de los palestinos. No cooperaremos con instituciones israelíes, incluidas editoriales, festivales, agencias literarias y publicaciones que sean cómplices de la violación de los derechos de los palestinos o nunca han reconocido públicamente los derechos inalienables del pueblo palestino consagrados en el derecho internacional”.
Afirman, además, que lo acontecido en Palestina desde el 7 de octubre de 2023 es “un genocidio, como llevan meses afirmando destacados expertos e instituciones” e invitan a sus colegas escritores, editores y redactores a “que se unan a nosotros para adoptar una postura, reconocer nuestra propia implicación, nuestra propia responsabilidad moral y dejar de colaborar con el Estado israelí y con instituciones israelíes cómplices”.