Banksy elige a un rinoceronte para comenzar la segunda semana del “zoo de Londres”
El artista británico Banksy desveló este lunes 12 de agosto su octava obra de la serie ya bautizada como ‘zoo de Londres’, que ya encara su segunda semana en activo, con la silueta de un rinoceronte dibujada en una pared que parece que escala un carro estacionado en el andén.
Una de sus series más recientes, conocida como “el zoo de Londres”, Banksy continúa explorando nuevos temas a través de sus obras. En esta serie, el artista ha transformado diversos espacios urbanos en escenarios que presentan animales pintados con su característica estética gráfica.
Estas creaciones han provocado reflexiones y suposiciones sobre su posible significado y la relación entre la humanidad y el mundo natural. Cada pieza suele estar cargada de simbolismo y crítica, a menudo cuestionando el impacto del comportamiento humano en el medio ambiente o la sociedad.
Esta semana, el misterioso grafitero confirmó la autoría en su Instagram hacia la 1:00 p. m. hora británica (12:00 GMT), tal y como ha venido haciendo cada día desde el pasado lunes 5 de agosto con las creaciones que han aparecido en distintos puntos de la capital del Reino Unido, todas ellas con protagonismo animal.
Al octavo día, Banksy pintó un rinoceronte en la calle Westmoor del barrio de Charlton, al sureste de Londres, al que precede una cabra, dos elefantes, tres monos, pelícanos, pirañas, un gato y un lobo.
No descansó ni el domingo, cuando aprovechó una garita acristalada de la Policía para convertirla en una pecera improvisada de pirañas, en pleno corazón del Londres más antiguo.
Por suerte, casi todas las obras de la serie animal han sobrevivido, excepto la del lobo aullando en una antena parabólica sobre un tejado del barrio de Peckham, que no duró ni una hora en pie antes de que la robasen el pasado jueves.
Un portavoz del popular artista callejero comunicó a la agencia de noticias británica Press Association que Banksy no está relacionado ni respalda el robo del diseño del lobo y que “no tiene conocimiento sobre el paradero actual de la parabólica”.
A lo largo de su carrera, Banksy ha mantenido una postura crítica hacia el mercado del arte, a menudo actuando al margen de las normas y expectativas del mismo. Sus obras, que incluyen murales, estatuas e instalaciones temporales, son valoradas considerablemente en subastas, a pesar de que él mismo ha cuestionado el comercialismo del arte.
Una de sus series más recientes, conocida como “el zoo de Londres”, Banksy continúa explorando nuevos temas a través de sus obras. En esta serie, el artista ha transformado diversos espacios urbanos en escenarios que presentan animales pintados con su característica estética gráfica.
Estas creaciones han provocado reflexiones y suposiciones sobre su posible significado y la relación entre la humanidad y el mundo natural. Cada pieza suele estar cargada de simbolismo y crítica, a menudo cuestionando el impacto del comportamiento humano en el medio ambiente o la sociedad.
Esta semana, el misterioso grafitero confirmó la autoría en su Instagram hacia la 1:00 p. m. hora británica (12:00 GMT), tal y como ha venido haciendo cada día desde el pasado lunes 5 de agosto con las creaciones que han aparecido en distintos puntos de la capital del Reino Unido, todas ellas con protagonismo animal.
Al octavo día, Banksy pintó un rinoceronte en la calle Westmoor del barrio de Charlton, al sureste de Londres, al que precede una cabra, dos elefantes, tres monos, pelícanos, pirañas, un gato y un lobo.
No descansó ni el domingo, cuando aprovechó una garita acristalada de la Policía para convertirla en una pecera improvisada de pirañas, en pleno corazón del Londres más antiguo.
Por suerte, casi todas las obras de la serie animal han sobrevivido, excepto la del lobo aullando en una antena parabólica sobre un tejado del barrio de Peckham, que no duró ni una hora en pie antes de que la robasen el pasado jueves.
Un portavoz del popular artista callejero comunicó a la agencia de noticias británica Press Association que Banksy no está relacionado ni respalda el robo del diseño del lobo y que “no tiene conocimiento sobre el paradero actual de la parabólica”.
A lo largo de su carrera, Banksy ha mantenido una postura crítica hacia el mercado del arte, a menudo actuando al margen de las normas y expectativas del mismo. Sus obras, que incluyen murales, estatuas e instalaciones temporales, son valoradas considerablemente en subastas, a pesar de que él mismo ha cuestionado el comercialismo del arte.