Beatriz González posa con su obra "Los suicidas del Sisga", el 20 de agosto de 1965. Así narró Traba los inicios de González, en 1974: “En el XVII salón de artistas colombianos, celebrado en 1966, una joven artista de provincia que acababa de terminar sus estudios de maestra en artes, presentó una obra a la cual se le concedió el premio especial del salón. La obra se llamaba Los suicidas del Sisga y determinaría nuestro modo de ver en el arte colombiano. Marcaba, además, el comienzo de una extraordinaria carrera artística, cuya originalidad más relevante sería la de expresar la idiosincrasia de una sociedad con agudeza, inteligencia y chispa inventiva”.
Foto: Archivo El Espectador