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Noam Chomsky construyó todo un modelo para estudiar y comprender el lenguaje. Transformó el paradigma que solo lo comprendía como un instrumento de comunicación y lo presentó como un elemento innato de la mente humana. El lenguaje dejó de ser visto como algo estrictamente social y empezó a pensarse como parte del mundo natural.
Para él, el cerebro humano nace programado con las reglas de una gramática que pertenece a todas las lenguas, por lo que asegura que el lenguaje no se aprende imitando, sino que ya está en nosotros. “Algunos se extrañan de que Chomksy ponga en el centro de su mira las capacidades cognitivas de los seres humanos, en lugar del conjunto de factores sociales y culturales que condicionan su existencia. Yo diría que es precisamente en eso en lo que radica la profunda originalidad de su pensamiento y el extraordinario alcance de sus contribuciones”, aseguró Ignacio Bosque, miembro de la Real Academia Española.
Pero Chomsky no solo ha defendido lo que aprendió sobre la lengua, también se ahínca a sus ideas y sus convicciones sobre el mundo que lo rodea. Ha combinado su gusto por la lingüística con la política y, por eso, se hizo ensayista. Escribió textos en lo que criticó el capitalismo, las injusticias que llegan con la distribución de la riqueza, el autoritarismo y la represión, la que, sin temor, ha cuestionado del país que lo vio nacer. Tanto así que cuando ocurrió la guerra en Vietnam se opuso a la intervención de Estados Unidos, por lo que fue arrestado.
Trabajó como catedrático emérito del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y catedrático (laureate profesor) de la Universidad de Arizona. Es autor de publicaciones seminales como Estructura lógica de la teoría lingüística, Estructuras sintácticas, Aspectos de la teoría de la sintaxis y El lenguaje y el entendimiento. Además de ser miembro de la Academia Americana de las Artes y las Ciencias y de la Academia Nacional de las Ciencias.
Sus ideas lo han consagrado y lo han hecho merecedor de recordación, aquí presentamos algunas que han quedado grabadas gracias a sus letras:
- “No deberíamos estar buscando héroes, deberíamos estar buscando buenas ideas”.
- “La propaganda es a la democracia, lo que la violencia es a la dictadura”.
- “Si asumes que no existe esperanza, entonces garantizas que no habrá esperanza. Si asumes que existe un instinto hacia la libertad, entonces existen oportunidades de cambiar las cosas”.
- “Si no creemos en la libertad de expresión para la gente que despreciamos, no creemos en ella para nada”.
- “Los derechos no se conceden, se conquistan”.
- “Caso tras caso, vemos que el conformismo es el camino fácil, y la vía al privilegio y el prestigio; la disidencia, sin embargo, trae costos personales”.
- “¿Quiénes son los guardianes de la historia? Los historiadores, naturalmente. Las clases educadas, en general. Parte de su trabajo es la de conformar nuestra visión del pasado de manera que sostenga los intereses del poder presente. Si no lo hacen así, serán probablemente marginados de una manera o de otra”.
- “En los problemas comunes de la vida humana, la ciencia nos dice muy poco, y los científicos, como personas, sin duda no son ninguna guía. De hecho, son a menudo la peor de guía, ya que a menudo tienden a concentrarse, como un láser, en sus propios intereses profesionales, y saben muy poco sobre el mundo”.
- “La gente paga por su propia subordinación”.
- “Lo que quiere básicamente el capital financiero es moneda estable, no crecimiento”.