Con el sonido del ‘Deja vu’
Gustavo Cerati está en Colombia para presentar su nuevo trabajo discográfico, Fuerza natural’.
Inés María Zabaraín / Especial de ‘El Radar’
El artista argentino acaba de presentar su más reciente disco, ‘Fuerza natural’, en el que mezcla el folk y el rock. Además de la versión digital, el ex integrante de Soda Stereo produjo una versión alterna en formato vinilo.
El más reciente disco de Gustavo Cerati, Fuerza natural, acaba de ser lanzado al mercado discográfico. El Radar, del Canal Caracol, lo entrevistó.
El Espectador ofrece un fragmento de la entrevista.
Gustavo Cerati está presentando en Colombia su quinto trabajo musical como solista llamado ’Fuerza natural’ y su canción ’Deja vu’. ¿Cómo es este tema?
Es una especie de canción autorreferencial de la misma canción y es un tema que se escribe solo. Es la forma genérica de escribir canciones. Hay algo en el aire, uno lo captura y sale naturalmente. Sin embargo, al mismo tiempo tiene algo de misterioso, como un Deja vu, hasta que un mínimo detalle cambia las cosas y se transforma en un paso adelante.
En este álbum hay algo de pop, de rock y de sonidos acústicos… ¿cómo lo define usted?
No me gusta mucho encasillarme. Trato de ser lo más abierto posible a todos mis gustos musicales y a las cosas que me parecen que pueden funcionar como paisajes. Veo el disco como un viaje o un trayecto que me desplaza por diferentes lugares. Por eso es que por momentos es rockero y en otras oportunidades es folk. Además, hay campo, hay cosmos, hay psicodelia, así como algunas cosas infantiles. También hay amor y en este trabajo no hay mucho odio.
En este disco las canciones de la uno a la trece se entrelazan y cuenta una historia… ¿cierto?
Más que contar una misma historia, lo que pasa es que tenía la idea original del disco y todas esas estaciones del trayecto que menciono adquirieron su propia vida de manera natural y tienen relación entre sí, porque están concebidas como un trabajo completo.
Llama la atención que este disco usted no solamente lo saca en formato digital, sino también en vinilo… ¿por qué?
El vinilo es una tecnología que al llegar a su máximo nivel de evolución nos da la posibilidad de escuchar la música muy bien. En generaciones nuevas ha crecido, pero no en Latinoamérica, porque aquí no queda ni una sola fábrica. Mi propuesta es que existe ese formato y no todo tiene que ser degradado digitalmente, entonces aquellos que tienen la oportunidad lo deben hacer y así salvamos al mundo de la sordera anticipada.
Pero eso de irse con un vinilo y un tocadiscos sí es como experimentar un ‘Deja vu’, ¿o no?
Es un rito para el que parece no haber mucho tiempo, pero siento que hay gente que está entendiendo que la propuesta está buena como formato.
Vemos en la carátula del disco a un caballero con antifaz… ¿qué mensaje quiere entregar?
No sé si hay un mensaje, lo que sí está claro es que hay una serie de elementos con una iconografía consecuente con el disco, que tiene varias posibles tapas si uno recorre el librito sin prisa. Sin embargo, ganó esta imagen que les hace honor a las tapas de principios de los años 70.
Cada artista maneja el proceso de composición de diferente manera… ¿cuál es su método de inspiración?
Hago una gimnasia musical habitual. Voy a mi estudio, escucho discos, grabo cosas y hago posibles melodías y armonías. No obstante, descanso mucho, porque la única manera en la que puedo renovarme es tomando cierta distancia. Tengo épocas en las que no haga nada o hago cualquier cosa que no tenga que ver con la música y eso me renueva.
Hay otro Cerati en los créditos de este disco, su hijo Benito Cerati… ¿él también escribe música?
Él escribe canciones. Tiene 15 años y en el disco anterior, Ahí vamos, colaboró con algunas líneas, pero en este su participación fue más intensa.
¿Cuando usted hace música piensa en que sus canciones van dirigidas a esos seguidores de Soda Stereo de toda la vida o para oídos nuevos?
Definitivamente no pienso en nada, porque cuando estoy haciendo un disco estoy como en una nave espacial.
Son 12 años sin Soda Stereo, una gira muy exitosa en 2007, pero la gente sigue añorando a esa banda…
¿Y qué puedo hacer al respecto? Simplemente hicimos algo que fue muy bueno. Lo cerramos de una manera acertada, pero ya no hay más Soda Stereo, por lo menos desde el punto de vista de una banda viva haciendo música, aunque quedan los discos. Muchas veces me encuentro con taxistas que me dicen: “Qué buena esa música que hacían, yo me quedé ahí”. Pienso que cada uno toma esa decisión, y yo no me puedo quedar ahí.
El artista argentino acaba de presentar su más reciente disco, ‘Fuerza natural’, en el que mezcla el folk y el rock. Además de la versión digital, el ex integrante de Soda Stereo produjo una versión alterna en formato vinilo.
El más reciente disco de Gustavo Cerati, Fuerza natural, acaba de ser lanzado al mercado discográfico. El Radar, del Canal Caracol, lo entrevistó.
El Espectador ofrece un fragmento de la entrevista.
Gustavo Cerati está presentando en Colombia su quinto trabajo musical como solista llamado ’Fuerza natural’ y su canción ’Deja vu’. ¿Cómo es este tema?
Es una especie de canción autorreferencial de la misma canción y es un tema que se escribe solo. Es la forma genérica de escribir canciones. Hay algo en el aire, uno lo captura y sale naturalmente. Sin embargo, al mismo tiempo tiene algo de misterioso, como un Deja vu, hasta que un mínimo detalle cambia las cosas y se transforma en un paso adelante.
En este álbum hay algo de pop, de rock y de sonidos acústicos… ¿cómo lo define usted?
No me gusta mucho encasillarme. Trato de ser lo más abierto posible a todos mis gustos musicales y a las cosas que me parecen que pueden funcionar como paisajes. Veo el disco como un viaje o un trayecto que me desplaza por diferentes lugares. Por eso es que por momentos es rockero y en otras oportunidades es folk. Además, hay campo, hay cosmos, hay psicodelia, así como algunas cosas infantiles. También hay amor y en este trabajo no hay mucho odio.
En este disco las canciones de la uno a la trece se entrelazan y cuenta una historia… ¿cierto?
Más que contar una misma historia, lo que pasa es que tenía la idea original del disco y todas esas estaciones del trayecto que menciono adquirieron su propia vida de manera natural y tienen relación entre sí, porque están concebidas como un trabajo completo.
Llama la atención que este disco usted no solamente lo saca en formato digital, sino también en vinilo… ¿por qué?
El vinilo es una tecnología que al llegar a su máximo nivel de evolución nos da la posibilidad de escuchar la música muy bien. En generaciones nuevas ha crecido, pero no en Latinoamérica, porque aquí no queda ni una sola fábrica. Mi propuesta es que existe ese formato y no todo tiene que ser degradado digitalmente, entonces aquellos que tienen la oportunidad lo deben hacer y así salvamos al mundo de la sordera anticipada.
Pero eso de irse con un vinilo y un tocadiscos sí es como experimentar un ‘Deja vu’, ¿o no?
Es un rito para el que parece no haber mucho tiempo, pero siento que hay gente que está entendiendo que la propuesta está buena como formato.
Vemos en la carátula del disco a un caballero con antifaz… ¿qué mensaje quiere entregar?
No sé si hay un mensaje, lo que sí está claro es que hay una serie de elementos con una iconografía consecuente con el disco, que tiene varias posibles tapas si uno recorre el librito sin prisa. Sin embargo, ganó esta imagen que les hace honor a las tapas de principios de los años 70.
Cada artista maneja el proceso de composición de diferente manera… ¿cuál es su método de inspiración?
Hago una gimnasia musical habitual. Voy a mi estudio, escucho discos, grabo cosas y hago posibles melodías y armonías. No obstante, descanso mucho, porque la única manera en la que puedo renovarme es tomando cierta distancia. Tengo épocas en las que no haga nada o hago cualquier cosa que no tenga que ver con la música y eso me renueva.
Hay otro Cerati en los créditos de este disco, su hijo Benito Cerati… ¿él también escribe música?
Él escribe canciones. Tiene 15 años y en el disco anterior, Ahí vamos, colaboró con algunas líneas, pero en este su participación fue más intensa.
¿Cuando usted hace música piensa en que sus canciones van dirigidas a esos seguidores de Soda Stereo de toda la vida o para oídos nuevos?
Definitivamente no pienso en nada, porque cuando estoy haciendo un disco estoy como en una nave espacial.
Son 12 años sin Soda Stereo, una gira muy exitosa en 2007, pero la gente sigue añorando a esa banda…
¿Y qué puedo hacer al respecto? Simplemente hicimos algo que fue muy bueno. Lo cerramos de una manera acertada, pero ya no hay más Soda Stereo, por lo menos desde el punto de vista de una banda viva haciendo música, aunque quedan los discos. Muchas veces me encuentro con taxistas que me dicen: “Qué buena esa música que hacían, yo me quedé ahí”. Pienso que cada uno toma esa decisión, y yo no me puedo quedar ahí.