Un viaje por las librerías independientes de Colombia

Como bien lo expresó Javier Mejía, copropietario de La Danta & la Nutria, en Jericó, Antioquia, levantar una librería independiente, especialmente en las regiones, “es una quijotada”.

Como bien lo expresó Javier Mejía, copropietario de La Danta & la Nutria, en Jericó, Antioquia, levantar una librería independiente, especialmente en las regiones, “es una quijotada”.

Se ha vuelto una frase de cajón, casi una cantaleta, señalar a la inmediatez de nuestros tiempos como la culpable: el afán por los “likes,” el número de seguidores y las métricas, que alimentan la ansiedad que provoca el círculo vicioso de las redes. Aun así, seguimos arrojándonos a esa corriente que nos arrastra cada vez más rápido. Y en ese remolino, la atención se convierte en el bien más efímero. Hoy en día, usted solo tiene tres segundos para capturar la atención de alguien con un video antes de que lo sustituyan por otro, y un minuto para condensar lo que quiere decir. Da igual si se trata de un año de investigación, el análisis de un libro o la historia de su vida.

¿Cómo no va a ser una quijotada apostar por la pausa, la reflexión y el diálogo que ofrecen los libros ante ese panorama?, cuando no solo se trata de abrir un negocio y mantenerlo a flote, sino de comenzar desde cero, como ocurrió con muchas librerías independientes en las regiones. Ellos fueron los primeros en sus municipios en hablar de literatura, crear clubes de lectura, conversatorios con escritores o en enseñar la diferencia entre una biblioteca y una librería.

Ese fue el caso de Refugios, en Itagüí, la única librería del municipio; de Tío Ratón, en Chaparral, Tolima, que lleva libros hasta las veredas cercanas, o de La Danta & La Nutria, en Jericó, donde, para tener parte del público que hoy los visita, primero tuvieron que formarlo.

Luego, hay que sumar el trabajo de convencer a las editoriales comerciales e independientes para que confíen en las librerías y apuesten por lugares lejanos al centro del país, para poder armar un catálogo curado y, además, en un sitio agradable, que se preste a sus lectores para vivir una experiencia tranquila y cómoda.

“Desde las regiones hay mucho que aportar y nos la jugamos estando en un municipio y ofreciendo cosas de calidad. No solamente evitamos que todo esté feo y quede mal decorado, sino que ofrecemos un sitio con una exposición permanente de arte contemporáneo, las mejores editoriales del país y las grandes editoriales en español en la región. Es una apuesta por ofrecer cultura de calidad”, comentó Mejía, quien además mencionó que su propuesta no se limita solo a los libros, sino que también incluye cine independiente, cineclubes y actividades culturales para niños y adultos, todo de acceso gratuito para los habitantes de Jericó. Según él, se trata de brindar a la comunidad la oportunidad de acceder a productos fuera del ciclo limitado de las tres películas que suelen repetirse en los canales nacionales o en las plataformas de streaming.

Cuando le preguntamos al librero por la oportunidad de hacer alianzas con otros establecimientos como el suyo, habló de la conexión y colaboración que tiene con otras librerías, tanto de Medellín como de municipios como El Retiro y otras localidades del oriente antioqueño. En cuanto a las relaciones con entidades como la Gobernación y la Alcaldía, dijo que el apoyo ha sido mínimo. Aunque las librerías regionales pueden enterarse de las convocatorias abiertas y participar en ellas, cree que no hay una colaboración directa ni sostenida. Sin embargo, mencionó que encontró más respaldo en el sector privado, como en el caso de Confama, que organiza eventos como el Hay Festival en Jericó.

El informe de la Biblioteca Nacional de Colombia

En su último informe de 2024, la Biblioteca Nacional de Colombia y el grupo del Libro, la Lectura y la Literatura, declararon que se ejecutaron varios proyectos para fortalecer el sector editorial y librero. Entre estos, mencionaron que la Escuela Nacional de Editores, en alianza con la Cámara Colombiana de la Edición Independiente, capacitó a 81 editoriales en todo el país, abordando temas de formulación y consolidación de proyectos editoriales. Por su parte, la Escuela Nacional de Librerías, en colaboración con la ACLI, brindó formación a libreros en aspectos como la gestión cultural y la sostenibilidad, que beneficiaron a 44 librerías.

Además, informaron que se implementó el proyecto “A mano alzada”, en asociación con la Corporación Entreviñetas, para fortalecer el sector del cómic en Colombia. En cuanto a las convocatorias, dicen que se asignaron estímulos de $10.000.000 a librerías

independientes como Ala de colibrí (Ibagué) y Babel Libros (Bogotá) para promover actividades culturales. También afirmaron que apoyaron la publicación de obras inéditas y que, de las 76 propuestas recibidas en la convocatoria, seleccionaron 10 títulos.

Finalmente, informaron que promovieron la participación de editoriales colombianas en ferias internacionales del libro, con convocatorias para asistir a eventos como la Feria del Libro Infantil de Bolonia, la Feria de Frankfurt y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, que benefició a editoriales como Cataplum Libros y Laguna Libros. Según el informe, más de 150 editoriales y librerías recibieron apoyo durante este año.

Las recomendaciones de nuestros lectores

Recientemente, desde El Espectador hablamos del significado de las librerías independientes: qué son, dónde están, cómo funcionan. Les pedimos a nuestros lectores que nos recomendaran sus favoritas. A raíz de esta convocatoria, recopilamos las recomendaciones de 30 librerías en Bogotá y 20 en diversas regiones y municipios del país.

En el Eje Cafetero, Armenia alberga lugares como la Librería Baldor, que ofrece literatura de todos los géneros, y Pensamiento Escrito, donde se puede encontrar literatura clásica, poesía y ensayo. En Pereira, las librerías El Charco y Savia presentan propuestas culturales que incluyen talleres, recitales y una selección centrada en feminismo y estudios decoloniales.

En Manizales, Leo Libros ofrece desde literatura infantil hasta textos profesionales y técnicos. Se dedica a conseguir libros solicitados por los clientes, trabaja con planes lectores de colegios y participa en ferias. Además, ofrece servicio a domicilio y atención presencial, telefónica y por WhatsApp.

Barranquilla es hogar de la librería Nido de Libros, que se enfoca en literatura infantil y juvenil, además de novelas gráficas y libros sobre arte y gastronomía. En Cartagena, Ábaco Libros y Café, ubicado en el centro histórico, ofrece literatura universal junto con el fomento de autores locales y la organización de eventos culturales.

En Cali se pueden encontrar espacios como Expresión Viva, que combina narrativa contemporánea con la dotación de bibliotecas escolares, y Café Libros y Arte, que ofrece clubes de lectura y cine literario.

En Antioquia, Medellín cuenta con librerías como Ítaca, que se especializa en editoriales independientes y organiza tours literarios; Exlibris, que pone énfasis en la literatura escrita por mujeres y en temas de ecología, y Entre Líneas, que ofrece libros de literatura infantil y autores independientes.

Otraparte, en Envigado, se enfoca en autores universales y colombianos, mientras que La Danta & la Nutria, en Jericó, complementa su oferta con cine y narración oral. En Itagüí, la Librería Refugios ofrece una amplia selección de géneros, desde literatura clásica hasta ciencia ficción, además de temas como desarrollo personal y filosofía.

En Ibagué, la librería-café Ala de Colibrí ofrece una selección de literatura infantil e ilustrada, además de una agenda cultural mensual. En Chaparral, Tolima, Tío Ratón se enfoca en literatura infantil y juvenil, y organiza actividades como el Picnic Literario del Tío Ratón, llevando libros a áreas rurales de difícil acceso.

En el sur, Pasto acoge varias propuestas literarias como Casa Páramo, ubicada en el centro de la ciudad, que ofrece narrativa colombiana, latinoamericana, universal, además de literatura infantil y novela gráfica. También organiza eventos culturales como presentaciones de libros y talleres. Amuleeto, fundado en 2021, se dedica a la promoción de la poesía y narrativa latinoamericana, con un enfoque especial en editoriales independientes colombianas, y organiza actividades culturales musicales y proyecciones. Finalmente, la Librería Camino a Casa, se especializa en libros ilustrados para niños, jóvenes y adultos.

Visite toda la lista de las librerías independientes recomendadas en Bogotá, y las demás ciudades y municipios del país en nuestra página web.