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¿Cómo nació Yaquut? ¿De dónde viene el nombre?
Yaquut era el nombre de nuestra bisabuela. Ella era libanesa, y significa “rubí” en árabe. La empresa nació en 2019. Mis hermanas Ana María, María Yeutt y yo nos unimos por un gusto en común: nuestra pasión por las joyas y los negocios. En ese momento nos dimos cuenta de que no había joyas modernas en el mercado que se pudieran usar todos los días, como con una camiseta y unos jeans. Así empezamos a diseñar para nosotras mismas: queríamos piezas que tuvieran sentido. Diseñamos anillos con piedras de nacimiento, piezas personalizadas con iniciales o nombres, y rescatamos joyería antigua, como los anillos que tenían nuestras abuelas y mamás hace años, una tradición que muchas colombianas hemos heredado. También fabricamos piezas hechas a mano con diseños antiguos, pero les dimos un nuevo sentido: recordar a nuestras madres, abuelas y bisabuelas. Queremos que la joyería sea algo que se use todos los días, no solo para ocasiones especiales.
Habla de un gusto por las joyas y una pasión por los negocios. Comencemos por el primero: ¿por qué le gustan las joyas? ¿Qué encanto encuentra ahí?
En nuestra casa siempre vimos que mi abuelo le regalaba joyas a mi abuela. Ella era una mujer de avanzada, siempre combinaba accesorios, y nosotras decíamos: “Quiero quedarme con esto cuando herede”. Desde pequeñas ese gusto por las joyas estuvo presente. Por otro lado, los negocios también siempre nos apasionaron. Desde el colegio vendíamos de todo: ropa, dulces... Una de mis hermanas y yo incluso tuvimos un negocio de zapatos. Llegué a tener un sex shop virtual, y mi hermana mayor tuvo un negocio de comida árabe. En nuestra familia siempre hemos sido emprendedores. Mi mamá era independiente y tenía una inmobiliaria, y mi papá tiene un restaurante de comida árabe. Esa pasión por los negocios la llevamos en las venas.
¿Cómo describiría esa conexión entre el emprendimiento y los valores familiares?
Es algo que nos une como hermanas. Desde pequeñas aprendimos a trabajar y a conseguir nuestras propias cosas. Ahora, poder unirnos en este proyecto, cada una desde su experiencia, es muy especial.
Hablemos del diseño de las joyas. Mencionó que buscan que las piezas sean para el día a día. ¿Cómo logran ese balance entre diseño y funcionalidad?
Nosotras definimos los diseños. Aunque somos administradoras de empresas, siempre hemos tenido un gusto por lo visual. Creamos categorías como joyas personalizables con iniciales o piedras de nacimiento. También innovamos permitiendo que las clientas compren un solo arete, para combinarlo con otros, en lugar del par tradicional. Buscamos que las personas puedan mezclar colores, tamaños y estilos, como oro con piedras preciosas, para que las joyas sean únicas y versátiles.
¿Tiene algún recuerdo especial sobre cómo sus abuelas o su mamá usaban las joyas?
Mi abuela las usaba para eventos especiales, pero mi mamá ya las incorporó en su día a día. Recuerdo que mezclaba pulseras y anillos de diferentes colores de oro. Hoy en día muchas personas todavía guardan sus joyas para ocasiones especiales, pero les digo: “Úsenlas, denles vida”.
¿Cree que esa costumbre de guardar las joyas se debe a temas de seguridad o a no valorar la cotidianidad?
Ambas. La seguridad influye, pero también es no ver el encanto en la vida diaria. Por eso insistimos en que la vida ya es especial, y cualquier día es bueno para usar joyas.
Es administradora de empresas, pero sus “hobbies” incluyen pintar, tocar piano… ¿Cree que en la creación de joyas también hay un componente artístico?
Sí, definitivamente. Crear diseños no solo es algo visual, sino también emocional. Detrás de cada joya hay una historia, una experiencia.
¿Cómo le ha ido emprendiendo?
Queremos seguir creciendo en Colombia y llegar a más mujeres con nuestras joyas. El camino no es fácil, pero es importante apoyarnos entre emprendedores: si tú tienes una idea de negocio, un proyecto en el que crees, apuéstale. Estoy segura de que el sol va a brillar. Entre nosotras tenemos un dicho: si quieres ir lejos, ve acompañado. He tenido la suerte de trabajar con mis hermanas, como te decía, cada una aportando desde su experiencia o con sus ideas, y por el camino nos hemos encontrado a otros emprendedores, otros empresarios con los que hemos podido compartir. Creo que hay que ser generoso con el conocimiento.
¿Y cuál ha sido la enseñanza que más compartiría para que más jóvenes no cometan errores de los que usted ya aprendió…?
Pienso que es importante saber crecer de forma organizada, rodearse de las personas adecuadas o preguntar. Nosotros nos hemos unido con otras marcas para viajar por todo el país a hablar, conocer y vender; emprender ya es lo suficientemente difícil, pero qué bueno si uno lo puede hacer de la mano de otros emprendedores.