Detenida una activista por pegar un cartel sobre un cuadro de Monet en París
En un reciente acto de protesta, una integrante de la ONG Respuesta Alimentaria atentó contra el cuadro Las amapolas del pintor Claude Monet. La activista exhibía una camiseta con el mensaje “Más 4º, el infierno” una referencia al aumento de temperatura previsto en un escenario contemplado por el Gobierno francés en su Plan de Adaptación al Cambio Climático.
Una activista ecologista fue detenida este sábado primero de junio por haber llevado a cabo una acción propagandística en el Museo de Orsay de París sirviéndose de un famoso cuadro de Monet, “Las amapolas”, sobre el que pegó un póster, indicaron fuentes policiales.
Esa acción es visible en un vídeo colgado en la cuenta de X de la ONG Respuesta Alimentaria, en la que la militante llegó junto a la obra de Monet y pega encima una imagen con tonos rojos mientras pone a la vista la camiseta que llevaba en la que se puede leer “+4º, el infierno”.
Una alusión al aumento de temperatura de 4 grados centígrados que se espera en un escenario pesimista contemplado por el Gobierno francés en un Plan de Adaptación al Cambio Climático.
La mujer advierte de que “este cuadro de pesadilla es lo que nos espera si no se pone ninguna alternativa. Con cuatro grados más, lo que nos espera es el infierno”.
Las amapolas es un lienzo que Claude Monet pintó en 1873 para el que tomó como motivo a unos paesantes un campo con muchas de estas flores a las afueras de Argenteuil, una localidad a las afueras de París.
Este cuadro fue realizado durante una etapa en la que Monet precisamente vivió en Argenteuil en 1871, una ciudad cercana a la capital francesa. Los paisajes cercanos sirvieron de inspiración para esta y otras obras durante los siete años que el pintor estuvo recorriendo los escenarios en busca de la luz para sus composiciones.
Respuesta Alimentaria, una ONG que defiende una alimentación sostenible, ya ha organizado en los últimos meses acciones utilizando como reclamo obras de arte.
Lo hizo en enero en el Museo del Louvre de París, al verter una sopa contra la vitrina que protege la Gioconda y el 8 de mayo al pegar unos cartelitos en torno al cuadro de Eugène Delacroix “La libertad guiando al pueblo”, también en el Museo del Louvre.
Casos similares
No es la primera vez que activistas generan este tipo de acciones con cuadros de Monet: en 2022, ecologistas alemanes lanzaron puré de papas contra una pintura en el Museo Barberini de Potsdam, al sur de Berlín.
En 2023, en el Museo Nacional de Estocolmo, se presentaron hechos donde los implicados mancharon con pintura roja una obra del pintor. Ambos casos tienen que ver con organizaciones ecologistas.
Una activista ecologista fue detenida este sábado primero de junio por haber llevado a cabo una acción propagandística en el Museo de Orsay de París sirviéndose de un famoso cuadro de Monet, “Las amapolas”, sobre el que pegó un póster, indicaron fuentes policiales.
Esa acción es visible en un vídeo colgado en la cuenta de X de la ONG Respuesta Alimentaria, en la que la militante llegó junto a la obra de Monet y pega encima una imagen con tonos rojos mientras pone a la vista la camiseta que llevaba en la que se puede leer “+4º, el infierno”.
Una alusión al aumento de temperatura de 4 grados centígrados que se espera en un escenario pesimista contemplado por el Gobierno francés en un Plan de Adaptación al Cambio Climático.
La mujer advierte de que “este cuadro de pesadilla es lo que nos espera si no se pone ninguna alternativa. Con cuatro grados más, lo que nos espera es el infierno”.
Las amapolas es un lienzo que Claude Monet pintó en 1873 para el que tomó como motivo a unos paesantes un campo con muchas de estas flores a las afueras de Argenteuil, una localidad a las afueras de París.
Este cuadro fue realizado durante una etapa en la que Monet precisamente vivió en Argenteuil en 1871, una ciudad cercana a la capital francesa. Los paisajes cercanos sirvieron de inspiración para esta y otras obras durante los siete años que el pintor estuvo recorriendo los escenarios en busca de la luz para sus composiciones.
Respuesta Alimentaria, una ONG que defiende una alimentación sostenible, ya ha organizado en los últimos meses acciones utilizando como reclamo obras de arte.
Lo hizo en enero en el Museo del Louvre de París, al verter una sopa contra la vitrina que protege la Gioconda y el 8 de mayo al pegar unos cartelitos en torno al cuadro de Eugène Delacroix “La libertad guiando al pueblo”, también en el Museo del Louvre.
Casos similares
No es la primera vez que activistas generan este tipo de acciones con cuadros de Monet: en 2022, ecologistas alemanes lanzaron puré de papas contra una pintura en el Museo Barberini de Potsdam, al sur de Berlín.
En 2023, en el Museo Nacional de Estocolmo, se presentaron hechos donde los implicados mancharon con pintura roja una obra del pintor. Ambos casos tienen que ver con organizaciones ecologistas.