El arte como herramienta de transformación social, la apuesta de Son Batá
La corporación afrocolombiana trabaja principalmente con niños y jóvenes de la comuna 13 de Medellín. Este año esperan entregar el centro cultural My Palenque, para los habitantes de esta comunidad.
Danelys Vega Cardozo
¿Cómo se ha transformado esa comuna 13 con la que se encontraron hace dieciocho años?
Para nadie es un secreto que nuestra comuna tiene un hito histórico permeado por la guerra, las fronteras invisibles, las guerrillas y grupos al margen de la ley, y también hemos sido oprimidos por otras influencias, pero ha sido ese proceso de transformación a través del arte, la cultura, la convivencia, la solidaridad, la empatía, la visión de un cambio hacia la paz y la conexión del territorio con realidades más amables las que no hacen decir: “La comuna 13 tiene su forma en esencia, pero las personas ya sonríen, ya se miran, ya bailan, ya caminan tranquilas y ya se abren para recibir el mundo”.
¿Cómo han hecho para nivelar lo que ustedes quieren con lo que en realidad necesita la comunidad?
(…) No nivelamos, conocemos las realidades de nuestra corporación enfocadas en las necesidades de nuestros territorios y transformamos esas realidades en oportunidad y un porvenir para todos. Somos de ese territorio, allí crecimos y la experiencia de nacer y crecer en ese lugar nos da el privilegio de entender las necesidades y proponer alternativas funcionales.
Le invitamos a leer: El día que murió Fassbinder
¿De qué forma cree usted que el arte puede ayudar a la transformación social?
Nosotros hace 18 años tomamos la decisión de transformar conflictos y manifestaciones violentas en cultura viva que genera cambios, y es a través del arte donde demostramos que es posible soñar y hacer realidad los sueños, incluso en un territorio con oportunidades escasas como el nuestro. Quisiera detenerme y hablar un poco más, por ejemplo, de las inspiraciones que hacemos con Comfama (…) En las inspiraciones, llevamos a los colegios muestras de arte, danza, ritmos musicales, grafiti y la esencia Son Batá, no queriendo decir con eso que todos los niños van a inspirarse y querer ser artistas, grafiteros, músicos, profesores de danza… pero estas actividades les permiten evidenciar cómo a partir de la pasión, decisión y disciplina se encuentran proyectos de vida.
Para concluir de la mejor manera esta pregunta, nosotros como Corporación tenemos tres apuestas de ese arte transformador que me preguntas: primero, el arte para formar comunidades pacificas, resilientes y socialmente sostenibles; segundo, el arte para reconocer el ser, para explorar sus pasiones, para fortalecer el proyecto de vida personal; y, por último, el desarrollo del conocimiento, aplicado a las tecnologías de la información para la generación de riqueza en los territorios.
¿Cuál ha sido el aporte de Son Batá a la construcción de paz?
(…) Tenemos una línea de trabajo llamada “Paz y Convivencia”, donde entendemos la convivencia como los pactos sociales que permiten la construcción colectiva de la Paz en las comunidades afectadas históricamente por las guerras y las violencias, consideramos que lo contrario a la inseguridad es la convivencia, y esta es una práctica cultural. Promovemos una convivencia pacífica y de no violencia desde las artes y la cultura, en procura del respeto por la diferencia, el diálogo y el respeto por la vida como valor supremo de la humanidad. Con esta filosofía en mente, hemos promovido escenarios de diálogo entre grupos armados para el cese al fuego.
Le recomendamos leer: “La búsqueda del arte está en el arte mismo”: Elevn
Hablemos acerca de una de sus apuestas: la música como un instrumento de denuncia y rechazo…
(…) Nuestra esencia e inicio ha sido marcado por la música, donde los tres fundadores de nuestra corporación lograron darles la espalda a las armas, a la violencia, pese a estar afectados por ellas y donde pareciera que era la única salida y la mejor opción… Por eso, la música, a través de los diferentes ritmos y grupos que tenemos en la corporación, marca un inicio, y hoy sigue siendo esa voz, a partir de nuestros artistas, donde decimos: “No a la violencia, sí al arte transformador y a las oportunidades a través de él”.
Ustedes dicen que soñaban con un centro cultural y de hecho este año se materializará ese anhelo. ¿Cuál creen que será el aporte de este espacio para los habitantes de la comuna 13?
Sí, es un sueño nuestra casa...El Centro Cultural My Palenque será ese lugar donde el amor, las oportunidades, los proyectos, la danza, el baile, los ritmos, nuestro patrimonio, nuestra descendencia afro, nuestro territorio, tengan una casa. Centro cultural My Palenque es un lugar para el arte, la cultura y la educación en comuna 13.
En nuestros hogares, todos tenemos un rol y convivimos con realidades que solo se saben dentro de esa puerta… En esta casa es donde abrimos la puerta y decimos: la realidad que construimos y que vamos a vivir acá es a llevar la historia de la comuna 13 a través de nuestra oferta, a través de la libertad de ser de quienes nos visiten y tener un punto donde la historia, el sentido de pertenencia y un futuro prometedor sea esa pista de despegue para más niños, niñas y jóvenes de nuestro territorio.
Le puede interesar: La mujer detrás de la cera, Marie Tussaud
¿Cómo se ha transformado esa comuna 13 con la que se encontraron hace dieciocho años?
Para nadie es un secreto que nuestra comuna tiene un hito histórico permeado por la guerra, las fronteras invisibles, las guerrillas y grupos al margen de la ley, y también hemos sido oprimidos por otras influencias, pero ha sido ese proceso de transformación a través del arte, la cultura, la convivencia, la solidaridad, la empatía, la visión de un cambio hacia la paz y la conexión del territorio con realidades más amables las que no hacen decir: “La comuna 13 tiene su forma en esencia, pero las personas ya sonríen, ya se miran, ya bailan, ya caminan tranquilas y ya se abren para recibir el mundo”.
¿Cómo han hecho para nivelar lo que ustedes quieren con lo que en realidad necesita la comunidad?
(…) No nivelamos, conocemos las realidades de nuestra corporación enfocadas en las necesidades de nuestros territorios y transformamos esas realidades en oportunidad y un porvenir para todos. Somos de ese territorio, allí crecimos y la experiencia de nacer y crecer en ese lugar nos da el privilegio de entender las necesidades y proponer alternativas funcionales.
Le invitamos a leer: El día que murió Fassbinder
¿De qué forma cree usted que el arte puede ayudar a la transformación social?
Nosotros hace 18 años tomamos la decisión de transformar conflictos y manifestaciones violentas en cultura viva que genera cambios, y es a través del arte donde demostramos que es posible soñar y hacer realidad los sueños, incluso en un territorio con oportunidades escasas como el nuestro. Quisiera detenerme y hablar un poco más, por ejemplo, de las inspiraciones que hacemos con Comfama (…) En las inspiraciones, llevamos a los colegios muestras de arte, danza, ritmos musicales, grafiti y la esencia Son Batá, no queriendo decir con eso que todos los niños van a inspirarse y querer ser artistas, grafiteros, músicos, profesores de danza… pero estas actividades les permiten evidenciar cómo a partir de la pasión, decisión y disciplina se encuentran proyectos de vida.
Para concluir de la mejor manera esta pregunta, nosotros como Corporación tenemos tres apuestas de ese arte transformador que me preguntas: primero, el arte para formar comunidades pacificas, resilientes y socialmente sostenibles; segundo, el arte para reconocer el ser, para explorar sus pasiones, para fortalecer el proyecto de vida personal; y, por último, el desarrollo del conocimiento, aplicado a las tecnologías de la información para la generación de riqueza en los territorios.
¿Cuál ha sido el aporte de Son Batá a la construcción de paz?
(…) Tenemos una línea de trabajo llamada “Paz y Convivencia”, donde entendemos la convivencia como los pactos sociales que permiten la construcción colectiva de la Paz en las comunidades afectadas históricamente por las guerras y las violencias, consideramos que lo contrario a la inseguridad es la convivencia, y esta es una práctica cultural. Promovemos una convivencia pacífica y de no violencia desde las artes y la cultura, en procura del respeto por la diferencia, el diálogo y el respeto por la vida como valor supremo de la humanidad. Con esta filosofía en mente, hemos promovido escenarios de diálogo entre grupos armados para el cese al fuego.
Le recomendamos leer: “La búsqueda del arte está en el arte mismo”: Elevn
Hablemos acerca de una de sus apuestas: la música como un instrumento de denuncia y rechazo…
(…) Nuestra esencia e inicio ha sido marcado por la música, donde los tres fundadores de nuestra corporación lograron darles la espalda a las armas, a la violencia, pese a estar afectados por ellas y donde pareciera que era la única salida y la mejor opción… Por eso, la música, a través de los diferentes ritmos y grupos que tenemos en la corporación, marca un inicio, y hoy sigue siendo esa voz, a partir de nuestros artistas, donde decimos: “No a la violencia, sí al arte transformador y a las oportunidades a través de él”.
Ustedes dicen que soñaban con un centro cultural y de hecho este año se materializará ese anhelo. ¿Cuál creen que será el aporte de este espacio para los habitantes de la comuna 13?
Sí, es un sueño nuestra casa...El Centro Cultural My Palenque será ese lugar donde el amor, las oportunidades, los proyectos, la danza, el baile, los ritmos, nuestro patrimonio, nuestra descendencia afro, nuestro territorio, tengan una casa. Centro cultural My Palenque es un lugar para el arte, la cultura y la educación en comuna 13.
En nuestros hogares, todos tenemos un rol y convivimos con realidades que solo se saben dentro de esa puerta… En esta casa es donde abrimos la puerta y decimos: la realidad que construimos y que vamos a vivir acá es a llevar la historia de la comuna 13 a través de nuestra oferta, a través de la libertad de ser de quienes nos visiten y tener un punto donde la historia, el sentido de pertenencia y un futuro prometedor sea esa pista de despegue para más niños, niñas y jóvenes de nuestro territorio.
Le puede interesar: La mujer detrás de la cera, Marie Tussaud