Vista panorámica del recién restaurado Auditorio León de Greiff. / Dirección de Patrimonio Cultural Unal
La forma de diamante del recinto, la madera de cedro Caquetá que lo recubre, su altura de cinco pisos y las paredes de argamasa con trigo y otros vegetales que aportan a su acústica le han dado al Auditorio León de Greiff, en la Universidad Nacional, varios títulos a lo largo de las cinco décadas que ha estado en pie. El escenario que se convirtió en la casa de la Orquesta Filarmónica de Bogotá en 1982 reabre sus puertas luego de haber atravesado un período de restauración, cuya primera fase se completó en 2020.
Por Andrea Jaramillo Caro
Periodista y gestora editorial de la Pontificia Universidad Javeriana, con énfasis en temas de artes visuales e historia del arte. Se vinculó como practicante en septiembre de 2021 y en enero de 2022 fue contratada como periodista de la sección de Cultura.@Andreajc1406ajaramillo@elespectador.com