España comienza a dar forma a su Centro Cultural en Bogotá en un claustro del siglo XVII
El claustro de San Nicolás de Tolentino se está transformando en un Centro Cultural de España, donde el pasado colonial se entrelazará con el presente y futuro de las relaciones entre Colombia y el país europeo.
EFE
El futuro Centro Cultural de España en Bogotá comenzó a tomar forma este martes con la selección del consorcio que se encargará de la restauración y rehabilitación del claustro de San Nicolás de Tolentino, una edificación colonial del siglo XVII que hace parte del Convento de Nuestra Señora de la Candelaria.
La obra estará a cargo del Consorcio Seminario La Candelaria, que fue seleccionado para desarrollar los estudios y diseño final del proyecto, informó a la prensa el prior provincial de la Orden de los Agustinos Recoletos, José David Niño.
Esta orden es la propietaria del claustro, situado en el centro histórico de Bogotá, que fue cedido en comodato por un periodo de 20 años renovables a la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), que se encargará de restaurarlo para que funcione como Centro Cultural.
El embajador de España en Colombia, Joaquín de Arístegui, señaló que la firma del acuerdo entre los Agustinos Recoletos y el Consorcio Seminario La Candelaria tiene "mucho significado para España" porque era un compromiso pendiente por las buenas relaciones entre los dos países.
"Tener un Centro Cultural de España en Colombia era efectivamente un compromiso de larga data (...) es uno de los asuntos pendientes que teníamos, una de las grandes prioridades, y hoy ya uno de los grandes avances en nuestra agenda bilateral cultural", manifestó.
El embajador subrayó que el futuro Centro Cultural "será un espacio moderno y de vanguardia, que reflejará la actual Colombia y la actual España, permitiendo articular un diálogo con la sociedad civil, con las instituciones públicas y con el sector cultural de los dos países".
Patrimonio histórico y cultural
El convento de La Candelaria ocupa una superficie de 7.000 metros cuadrados distribuidos en dos claustros comunicados entre sí, el de San Nicolás de Tolentino, que es el principal, y otro menor, llamado de las balconadas, más la iglesia de Nuestra Señora de La Candelaria.
"La iglesia permanecerá bajo control de los Agustinos Recoletos", dijo el embajador, quien agregó que "lo que es la administración y gestión del espacio no religioso estará lógicamente bajo el gobierno y la autoridad de la Agencia Española de Cooperación a través de la Consejería Cultural y Científica de la Embajada de España".
Por su parte, el prior provincial de los Agustinos Recoletos señaló que le produce “una gran satisfacción el poder dar otro paso significativo hacia la meta de poder restaurar este emblemático claustro”, un proyecto que, según dijo, “fortalecerá la cultura de los colombianos afianzando aún más los lazos que nos unen con España”.
Los Agustinos recoletos comenzaron la construcción del claustro en 1635, pero en 1653, aun sin terminar, la obra fue clausurada porque no tenía el permiso de la Cédula Real española, que obtuvieron 20 años más tarde, explicó el padre Juan Francisco Tinjacá.
"Regresamos aquí en 1670 y en 1686 se abrió el templo públicamente; esto estaba levantado en bruto, no como hoy está", dijo el monje mientras señala los arcos de piedra de la construcción.
Según el sacerdote, “en 1706 vino el arzobispo e inauguró el templo que es el que le da el nombre al barrio más antiguo de Bogotá” y poco a poco fue terminado el convento que después fue transformado en el Colegio San Nicolás, “que funcionó 80 años, hasta el año 2005″ y que en aproximadamente tres años será el Centro Cultural de España.
El futuro Centro Cultural de España en Bogotá comenzó a tomar forma este martes con la selección del consorcio que se encargará de la restauración y rehabilitación del claustro de San Nicolás de Tolentino, una edificación colonial del siglo XVII que hace parte del Convento de Nuestra Señora de la Candelaria.
La obra estará a cargo del Consorcio Seminario La Candelaria, que fue seleccionado para desarrollar los estudios y diseño final del proyecto, informó a la prensa el prior provincial de la Orden de los Agustinos Recoletos, José David Niño.
Esta orden es la propietaria del claustro, situado en el centro histórico de Bogotá, que fue cedido en comodato por un periodo de 20 años renovables a la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), que se encargará de restaurarlo para que funcione como Centro Cultural.
El embajador de España en Colombia, Joaquín de Arístegui, señaló que la firma del acuerdo entre los Agustinos Recoletos y el Consorcio Seminario La Candelaria tiene "mucho significado para España" porque era un compromiso pendiente por las buenas relaciones entre los dos países.
"Tener un Centro Cultural de España en Colombia era efectivamente un compromiso de larga data (...) es uno de los asuntos pendientes que teníamos, una de las grandes prioridades, y hoy ya uno de los grandes avances en nuestra agenda bilateral cultural", manifestó.
El embajador subrayó que el futuro Centro Cultural "será un espacio moderno y de vanguardia, que reflejará la actual Colombia y la actual España, permitiendo articular un diálogo con la sociedad civil, con las instituciones públicas y con el sector cultural de los dos países".
Patrimonio histórico y cultural
El convento de La Candelaria ocupa una superficie de 7.000 metros cuadrados distribuidos en dos claustros comunicados entre sí, el de San Nicolás de Tolentino, que es el principal, y otro menor, llamado de las balconadas, más la iglesia de Nuestra Señora de La Candelaria.
"La iglesia permanecerá bajo control de los Agustinos Recoletos", dijo el embajador, quien agregó que "lo que es la administración y gestión del espacio no religioso estará lógicamente bajo el gobierno y la autoridad de la Agencia Española de Cooperación a través de la Consejería Cultural y Científica de la Embajada de España".
Por su parte, el prior provincial de los Agustinos Recoletos señaló que le produce “una gran satisfacción el poder dar otro paso significativo hacia la meta de poder restaurar este emblemático claustro”, un proyecto que, según dijo, “fortalecerá la cultura de los colombianos afianzando aún más los lazos que nos unen con España”.
Los Agustinos recoletos comenzaron la construcción del claustro en 1635, pero en 1653, aun sin terminar, la obra fue clausurada porque no tenía el permiso de la Cédula Real española, que obtuvieron 20 años más tarde, explicó el padre Juan Francisco Tinjacá.
"Regresamos aquí en 1670 y en 1686 se abrió el templo públicamente; esto estaba levantado en bruto, no como hoy está", dijo el monje mientras señala los arcos de piedra de la construcción.
Según el sacerdote, “en 1706 vino el arzobispo e inauguró el templo que es el que le da el nombre al barrio más antiguo de Bogotá” y poco a poco fue terminado el convento que después fue transformado en el Colegio San Nicolás, “que funcionó 80 años, hasta el año 2005″ y que en aproximadamente tres años será el Centro Cultural de España.