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Esta es la edición 22 del festival. ¿Cómo surgió esta cooperación audiovisual entre Francia y Colombia?
El primer derrotero, en cuanto a lo que se ha venido tejiendo durante los años, es la parte de promoción del cine francés. Ese es nuestro punto de partida en cuanto a la parte cinematográfica. Sin embargo, no dejan de ser importantes todas estas conexiones que tenemos entre los dos países y estos intercambios. Por eso también la idea es vincular y hacer estas relaciones entre los dos países para hacer intercambios en los dos sentidos, tanto en los festivales que se hacen en Francia como en los que se hacen en Colombia. Para nosotros es importante porque eso también contribuye al enriquecimiento de la cultura, de contar historias diferentes a través del cine.
¿Qué lecciones han sacado de los diálogos entre Francia y Colombia en el área audiovisual en los 22 años de historia del festival?
El objetivo del Festival de Cine Francés es mostrar o ser una vitrina, una plataforma para mostrar la actualidad del cine francés en Colombia. En un inicio había una especie de estigmatización del cine francés, que estaba muy enfocado hacia directores clásicos, hacia la nueva ola. Para nosotros es importante, no deja de serlo, por supuesto. Es muy importante mostrar todos estos directores que han hecho parte de la historia del cine, no solo de Francia, sino a nivel mundial, y que han marcado tendencias, como es el caso de la nueva ola. Eso fue en una primera fase de lo que era el Festival de Cine Francés. Después, para nosotros fue importante tratar de llegar a todos los públicos, no solamente a un público cinéfilo especializado. Existe un cine contemporáneo que está abierto a explorar nuevos públicos. Es un cine francés que va más allá, que tiene comedias, que tiene películas de thriller, películas de animación, películas de drama. Esa ha sido nuestra gran lección y nuestro gran sentimiento para estos últimos años: que existe una diversidad en el cine francés.
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En esta edición, ¿cuáles son esos directores que se enmarcan en el objetivo de ir más allá de lo de la nueva ola y lo clásico?
Este año le estamos rindiendo un homenaje a Jean-Luc Godard, que falleció hace un año, y para nosotros es muy importante poderle rendir un homenaje. Vamos a tener algunas de sus películas de la primera fase de él, como El desprecio, Sin aliento, Alphaville y Pierrot, el loco. En cuanto a la parte de cine contemporáneo, de cine actual, son películas que han recorrido varios festivales. Una de ellas fue Anatomía de una caída, de la directora Justine Triet, ganadora de la Palma de Oro en el Festival de Cannes, con la cual inauguramos. Es traer todo esto que está sucediendo en este momento, que es lo que estamos viviendo, que es lo que se está mostrando en los grandes festivales, y traerlo para nosotros en este momento. Presentamos también Ese crimen es mío, de François Ozon; de Alice Diop, estará Saint Omer, película ganadora de varios premios en el Festival de Venecia, y muchas más.
El festival está presente en varias ciudades colombianas. ¿Qué han aprendido de tener cine francés en tantas partes de Colombia?
Con el Festival de Cine Francés, al comienzo lo teníamos en las principales ciudades, y nos hemos dado cuenta de que debemos dar un paso hacia la diversidad también en los territorios y regiones. No podemos quedarnos en los mismos espacios, porque debemos ir más allá en esa parte de mostrar el cine independiente, que el cine independiente no se quede aislado y solamente en ciertos círculos o circuitos. Todos tenemos la posibilidad y la oportunidad de poder ver este tipo de películas. Para nosotros es importante que en la búsqueda de la formación de público, que debe ser un derrotero, todos debemos colaborar para que desde los niños y jóvenes exista esta intención, esta parte de querer ir a ver cine y conocer otras historias que están pasando en otras partes del mundo.
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¿Cómo fue el proceso de realizar la curaduría para esta edición?
Tenemos varios planos para la curaduría. Un primer plano es trabajar con los distribuidores colombianos. En ese sentido, con ellos existe una comunicación muy estrecha en la que con ellos nos sentamos a conversar sobre cuáles son las películas que van a distribuir. Cuáles son las películas de Colombia y sus fechas de estreno. Todo ese tipo de cosas lo conversamos con ellos y de acuerdo a eso incluimos estas producciones francesas en nuestra programación. Un segundo plano es que estamos mirando cuáles son las películas que están circulando en los grandes festivales como el Festival de Cannes y si existe una conexión con lo que está sucediendo en Colombia. Lo que hacemos es que compramos los derechos de estas películas en Francia con los agentes de venta o los distribuidores. Ellos hacen una adquisición de derechos de películas, de jóvenes directores de películas de animación. Hay un catálogo, tomamos las últimas producciones y tratamos de incluirlas en nuestra programación.
¿Qué es lo más valioso que le aporta el cine francés a la sociedad?
La diversidad y no solo la diversidad en las formas de mostrar el cine, sino la diversidad en las temáticas. Pensar que en el cine no hay una sola forma de mostrar y contar una historia, sino que existen miles de posibilidades y que al final las historias y la humanidad son solo una. Siempre vamos a estar conectados por las mismas historias y emociones. Todos lloramos, reímos, tenemos una forma de sentir, de experimentar cosas que es universal. Creo que eso es lo que aporta el cine francés. Francia es muy cosmopolita y también yo creo que Colombia puede pensarlo de esa manera, puede ser un espejo también.
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