"La montaña mágica" de Thomas Mann se convirtió en un clásico de la literatura alemana.
Foto: Archivo Particular
Una de las preguntas más manidas, repetida una y otra vez durante los años, es: ¿si estuviese en una isla desierta, qué libro desearía tener como compañía? La respuesta varía de boca en boca, de época en época; la mía —aunque nadie me ha preguntado— es unánime: La montaña mágica, publicada hace cien años, hacia noviembre de 1924.