La obra “Bachué” de Rómulo Rozo que llegará al Malba de Argentina
El Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba) realizó la adquisición de la escultura “Bachué”, una obra del escultor colombiano Rómulo Rozo, originario de Boyacá. Esta escultura fue creada en 1925 y representa a la diosa madre de la mitología chibcha, que emerge de las aguas para dar origen a la humanidad.
La escultura se trasladará a Argentina debido a la compra realizada por Eduardo Costantini, un conocido coleccionista y fundador del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba). A pesar de su valor histórico y artístico, “Bachué” no tuvo mayor impacto para las instituciones culturales colombianas en su momento, lo que llevó a que se mantuviera fuera del radar artístico durante décadas.
Costantini, al descubrir la obra, le causó impacto y decidió adquirirla, reconociendo quizás su importancia en la historia del arte latinoamericano. La escultura se exhibirá en el Malba a partir de noviembre, después de su participación en la Bienal de Venecia, donde compartirá espacio con otras obras.
“Bachué” tiene una altura de 1.70 metros y es una escultura tallada en granito negro. La pieza refleja un simbolismo, que mezcla elementos de las raíces indígenas de Colombia con influencias europeas. Esta amalgama de texturas es un testimonio de la búsqueda de identidad cultural que caracterizó a muchos artistas latinoamericanos de la época.
La obra fue presentada por primera vez en la Exposición Iberoamericana de Sevilla en 1929, donde sorprendió al público por su enfoque en la representación del mestizaje cultural. Sin embargo, con el paso de los años, “Bachué” cayó en el olvido y su paradero se convirtió en un misterio tras sufrir un accidente que la fracturó. Fue redescubierta en 1997 en Barranquilla, lo que la situó de nuevo en el mapa.
Rómulo Rozo
Rómulo Rozo, nacido en 1899, fue un artista colombiano que se formó en diversas instituciones, incluyendo la Escuela Nacional de Bellas Artes en Bogotá y la Academia Colarossi en París, donde fue expuesto a las corrientes artísticas de vanguardia de la época. Su experiencia en Europa lo llevó a volver a explorar las culturas ancestrales de América Latina, lo que culminó en la creación de obras que reflejan una exploración entre la modernidad y las tradiciones indígenas.
A lo largo de su vida, Rozo también desempeñó roles como director artístico y profesor en Colombia y México. Su legado ha vuelto a ser nombrado en los últimos años, destacando su influencia en la creación del primer movimiento de vanguardia en Colombia. Murió en México en 1964.
La escultura se trasladará a Argentina debido a la compra realizada por Eduardo Costantini, un conocido coleccionista y fundador del Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba). A pesar de su valor histórico y artístico, “Bachué” no tuvo mayor impacto para las instituciones culturales colombianas en su momento, lo que llevó a que se mantuviera fuera del radar artístico durante décadas.
Costantini, al descubrir la obra, le causó impacto y decidió adquirirla, reconociendo quizás su importancia en la historia del arte latinoamericano. La escultura se exhibirá en el Malba a partir de noviembre, después de su participación en la Bienal de Venecia, donde compartirá espacio con otras obras.
“Bachué” tiene una altura de 1.70 metros y es una escultura tallada en granito negro. La pieza refleja un simbolismo, que mezcla elementos de las raíces indígenas de Colombia con influencias europeas. Esta amalgama de texturas es un testimonio de la búsqueda de identidad cultural que caracterizó a muchos artistas latinoamericanos de la época.
La obra fue presentada por primera vez en la Exposición Iberoamericana de Sevilla en 1929, donde sorprendió al público por su enfoque en la representación del mestizaje cultural. Sin embargo, con el paso de los años, “Bachué” cayó en el olvido y su paradero se convirtió en un misterio tras sufrir un accidente que la fracturó. Fue redescubierta en 1997 en Barranquilla, lo que la situó de nuevo en el mapa.
Rómulo Rozo
Rómulo Rozo, nacido en 1899, fue un artista colombiano que se formó en diversas instituciones, incluyendo la Escuela Nacional de Bellas Artes en Bogotá y la Academia Colarossi en París, donde fue expuesto a las corrientes artísticas de vanguardia de la época. Su experiencia en Europa lo llevó a volver a explorar las culturas ancestrales de América Latina, lo que culminó en la creación de obras que reflejan una exploración entre la modernidad y las tradiciones indígenas.
A lo largo de su vida, Rozo también desempeñó roles como director artístico y profesor en Colombia y México. Su legado ha vuelto a ser nombrado en los últimos años, destacando su influencia en la creación del primer movimiento de vanguardia en Colombia. Murió en México en 1964.