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En la que es, posiblemente, la obra más conocida de Gustav Klimt, una pareja se abraza. El hombre sostiene el rostro de la mujer y besa su mejilla. Ella se cuelga se su cuello. En medio de un mar dorado, se pierden en la compañía del otro. La pintura se encuentra en Viena, en el museo Belvedere, y se considera un icóno del Art Nouveau vienés y del Modernismo europeo.
Ahora, 114 años después de su presentación inicial, diez mil personas tendrán acceso a la obra de arte en el formato NFT (tokens no fungibles). El museo Belvedere, en colaboración con artèQ, lanzará un número limitado de extractos digitales del célebre cuadro de ‘El beso’.
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“¿Qué significa poseer una obra de arte en la era digital? El auge de las NFT, que ha preocupado al mundo del arte desde 2020, ha dado un nuevo impulso a esta intrigante pregunta. La conversión de reproducciones digitales en originales virtuales abre nuevas formas de participación que, en términos financieros, deben tomarse en serio, pero también pueden verse de manera lúdica”, dice la directora general de Belvedere, Stella Rollig.
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El museo austriaco, que posee la colección más grande del mundo de pinturas de Klimt, espera un alto nivel de interés por parte de los coleccionistas de NFT: “El número limitado de acciones para el mercado mundial y el hecho de que cada pieza es única es lo que hace que estos tokens sean tan valiosos”, dice Wolfgang Bergmann, director general del Belvedere, sobre los 10.000 segmentos de la obra que podrán ser adquiridos a un precio estimado de 1.850 euros cada uno.