Imagen de Amadeo Raúl Carrizo, quien fue el portero titular de River Plate durante 21 años.
Él iba al arco, por supuesto, porque lo esencial era jugar, y jugaba de portero hasta entrada la noche y todas las noches, a la luz de un farol, hiciera frío o fuera verano o lloviera a cántaros y los truenos de los rayos retumbaran por todo Rufino y Santa Fe y por toda Argentina. Él iba al arco, y mientras los grandotes se gastaban entre gambetas, tiros, patadas y pisadas casi siempre con sabor a lodo y a tierra, él los veía e imaginaba un fútbol distinto. Otro fútbol.
Por Fernando Araújo Vélez
De su paso por los diarios “La Prensa” y “El Tiempo”, El Espectador, del cual fue editor de Cultura y de El Magazín, y las revistas “Cromos” y “Calle 22”, aprendió a observar y a comprender lo que significan las letras para una sociedad y a inventar una forma distinta de difundirlas.Faraujo@elespectador.com