Los números y la pelota de Arturo
“Cuenta conmigo” (Caballito de Acero) narra la historia de Arturo, un niño con autismo. Mediante la matemática y el fútbol, se plantea una reflexión sobre esta condición y nuestra relación con ella.
Andrés Osorio Guillott
Sumas. Sumas. Sumas. Cálculos. Cálculos. El tiempo transcurre mientras la mente se ocupa de las matemáticas de la cotidianidad. Cuántos pasos se dan. Cuántos pases. Cuánto se tarda un jugador en entregar el balón. Desde el prejuicio, muchos le dicen “raro” al que observa y observa y analiza. Pero luego, por esa misma virtud de llevar en su cabeza cifras exactas, por una inteligencia difícil de detectar para los ojos ordinarios de los demás, uno de los que no se cansa de señalar al que parece ser “diferente”, termina siendo salvado. Y entonces, compartiendo con aquel al que rechazaba, se da cuenta de que esa habilidad le podía servir para planear tácticas y estrategias, y así ganarle por fin en un partido de fútbol al equipo del curso contrario.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
Sumas. Sumas. Sumas. Cálculos. Cálculos. El tiempo transcurre mientras la mente se ocupa de las matemáticas de la cotidianidad. Cuántos pasos se dan. Cuántos pases. Cuánto se tarda un jugador en entregar el balón. Desde el prejuicio, muchos le dicen “raro” al que observa y observa y analiza. Pero luego, por esa misma virtud de llevar en su cabeza cifras exactas, por una inteligencia difícil de detectar para los ojos ordinarios de los demás, uno de los que no se cansa de señalar al que parece ser “diferente”, termina siendo salvado. Y entonces, compartiendo con aquel al que rechazaba, se da cuenta de que esa habilidad le podía servir para planear tácticas y estrategias, y así ganarle por fin en un partido de fútbol al equipo del curso contrario.
Nancy Bravo —quien realizó Cuenta conmigo con su hija Elsa y el ilustrador Paco Baca— narra cómo pensaron en la creación de este libro, que estará en la Feria Internacional del Libro de Bogotá con la editorial Caballito de Acero: “La historia nació gracias a una tarea de Elsa, la hermana de Arturo. Elsa es hoy una joven de 15 años a quien la vida le dio un hermano con autismo. Por años lo acompañó a innumerables sesiones de terapia, en donde conoció a otros niños como él y creció junto a ellos. Desde muy pequeña ha sumado su voz a la concientización sobre esta condición de vida, porque, como a muchos hermanos, le ha tocado enfrentar las barreras que viven las personas con autismo. Una vez, cuando tenía casi nueve años, su maestra del colegio le dejó la tarea de escribir una historia sobre la importancia de los números. Inspirándose en algunas características y peculiaridades de su hermano y de niños como él, escribió esta historia, un breve relato que narra cómo un niño con la condición y el nombre de su hermano cuenta cosas para poder entender mejor el mundo. El relato no tuvo mucho éxito como tarea escolar, pero con mi ayuda se convirtió en un cuento que visibiliza y sensibiliza a las personas sobre una condición que, aunque no se note a simple vista, requiere empatía y comprensión”.
“Para mí, fue un gusto personal; siempre dibujar y escribir son un placer. Y más cuando este va poder llegar a muchas personas. En este caso particular, ilustrar esta historia fue la posibilidad de colaborar con un granito de arena en una problemática que debe de ser atendida. Muchas familias viven esto todos los días, y el ilustrar este cuento me permitió poder aportar una posibilidad de que, con mi trabajo, pueda llegar a muchos niños y a sus padres para que sepan que hay caminos en el aprendizaje de cada persona que no siempre son sencillos de resolver”, aseguró Paco Baca, ilustrador de Cuenta conmigo.
La historia de Arturo, el personaje principal, está atravesada por el color azul. En las páginas, la ropa y los objetos del pequeño predomina este color que no fue elegido gratuitamente, sino que tiene una razón de fondo. “Desde hace algunos años, el color azul se suele asociar a las acciones de concienciación sobre el autismo en algunas campañas globales, y es además el color favorito del protagonista de esta historia. Muchas personas con autismo suelen tener una preferencia muy marcada por un cierto color y en el caso de este cuento su personaje principal la tiene”, dijo Nancy. Por su parte, Baca contó que “al entender que el azul puede ser una posibilidad como color de presentar cierto tipo de emociones, pensé que ilustrarlo en varios tonos de azul, además de ser un reto artístico, permitiría jugar con tonalidades que nos llevaran a un desarrollo de intención dentro del arte de cada viñeta. Me permitía jugar con tonalidades y variaciones del color y manejar luces y sombras. Además de entender que el azul en sí lleva un significado para el mundo sobre este espectro neurodivergente”.
Las matemáticas y el fútbol. La infancia de Arturo y la muestra de que su alegría está en los números y en la pelota. Una moraleja entre estos dos mundos que resultan democráticos y dejan la reflexión de que no importa la disparidad entre una cosa y otra, pues será siempre posible, gracias a la diversidad de la condición humana, que estos se unan para demostrar que en medio de la multiplicidad y las diferencias hay semejanzas y maneras de entrelazarnos.
“La literatura en cualquiera de sus expresiones es un altavoz. La literatura infantil también nos puede permitir hacer un llamado a la justicia social y un mundo más equitativo y respetuoso de lo diferente. Las personas con autismo significan en cualquier país una población altamente marginada, discriminada, cuyos derechos más elementales suelen ser vulnerados. Hacer un libro que hable sobre autismo es una oportunidad para explicarle a su lector cómo son y qué necesitan las personas que viven dentro de su espectro y la posibilidad de sembrar empatía y abrir una puerta a la inclusión”, concluyó Nancy Bravo.
“Hay pocos adultos que pueden ver el mundo con la curiosidad de un niño o con el desparpajo de un adolescente. Yo pienso que esas dos experiencias viven dentro de nosotros y debemos recurrir a ellas todos los días, porque el mundo de los adultos es muy aburrido. Por eso no me gusta estar ahí. Y regreso a dibujar y a escribir para los que aún se sorprenden de lo simple, como los niños y los adolescentes. La parte adulta la dejo para las negociaciones cotidianas. Y en este caso, entender la personalidad inexpresiva de un niño con autismo, como el personaje de este cuento, me llevó a recordar que, en un punto, hasta el seguir la trayectoria del vuelo de una mosca, ver en los lugares que aterriza, para un niño es muy interesante —para mí lo es también— y debe tomarse en serio”, afirmó Paco Baca.
Si le interesa seguir leyendo sobre El Magazín Cultural, puede ingresar aquí 🎭🎨🎻📚📖