¿Con qué imagen nos quedamos de Simón Bolívar? ¿Con la del valeroso hombrecillo (medía 1 metro con 68 cm) que recorrió a caballo 150.000 kilómetros de América para liberarla y que en su camino derrotó hasta el frío de los Andes? o ¿con del hombre melómano, seductor y bailarín que antes de salir a cabalgar se aplicaba agua de colonia sobre los pómulos? ¿O con ambas? ¿O con ninguna? La historia puede ser así de caprichosa.
Por Joseph Casañas Angulo
Comunicador social y periodista egresado de la Universidad Los Libertadores con diez años de experiencia en medios de comunicación.@joseph_casanasjcasanas@elespectador.com