“Las tres reinas”, una novela de suspenso recreada en el Caribe
El realizador audiovisual Miguel J. Vélez lanzó su primera novela sobre una familia que vive en una ciudad ficticia del caribe colombiano. El carnaval, la rivalidad entre hermanas, las ratas y la muerte, son algunas de las temáticas del libro. El autor habló acerca de su paso del guion de cine a la literatura.
Mateo Medina Escobar
En una Polonia confinada, el director de cine colombiano Miguel J. Vélez decidió crear una historia. La diferencia fue que esta vez no la pensó para el cine, sino para su primera novela. El libro, que título Las tres reinas, es un thriller recreado en el caribe de su país.
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En una Polonia confinada, el director de cine colombiano Miguel J. Vélez decidió crear una historia. La diferencia fue que esta vez no la pensó para el cine, sino para su primera novela. El libro, que título Las tres reinas, es un thriller recreado en el caribe de su país.
Vélez, quien nació y se crio en Medellín, ha escrito diversos guiones, además de dirigir cortometrajes y videoclips. El cineasta ha trabajado en Colombia, México y Polonia, país europeo donde reside desde hace seis años. Allí fue donde realizó su primer largometraje en polaco. Su primera novela fue escrita en español.
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El autor habló para El Espectador sobre su proceso de creación, su inspiración para escribir Las tres reinas y las diferencias entre los distintos medios en los que ha incursionado. La inspiración para su novela surgió hace 10 años, cuando Vélez visitó Barranquilla durante el carnaval.
Un colega del autor le sugirió visitar la ciudad y asistir al evento: “Me recomendó que estudiara el carnaval porque creía que había una historia. A mí me daba mucha pereza (…) algo pasó cuando fui: descubrí esas fiestas folklóricas, ese carnaval, pero no como un turista”, recordó Vélez sobre aquella experiencia.
El escritor, que en ese momento era solo un realizador audiovisual, se quedó en la casa de personas cuya cultura del carnaval estaba impregnada en todos los aspectos de su vida. “Me quedé en la casa de una persona dedicada al Carnaval, específicamente a un baile del cual él era promotor y organizador. A mí eso me pareció una locura, una cosa muy absurda. Que su vida vaya en función de un baile”.
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La experiencia que obtuvo y las historias que escuchó durante su estadía en Barranquilla no se convirtieron en ningún proyecto audiovisual, pero quedaron rondando en su cabeza. “Yo me quedé con muchas ganas de contar una historia de eso que viví, de esa gente que conocí”, recordó Vélez, que agregó que llegaron otros proyectos y su intención de contar historias relacionadas con el carnaval quedó pospuesta indefinidamente.
El realizador continuó con su carrera en el cine y el audiovisual, principalmente en México. A finales de 2016 su vida se trasladó al viejo continente: su esposa, originaria de Polonia, quedó embarazada y realizaba estudios de posgrado en su país natal. Vélez se mudó con ella y vio la oportunidad de hacer cine allí.
“Kolej na milosc”, que significa “tiempo para el amor”, se convirtió en su primer largometraje. La cinta es hablada completamente en polaco y tuvo su estreno en 2020, mismo año en el que comenzó el confinamiento en todo el mundo a causa de la pandemia por covid-19. Después de su paso por festivales europeos, el filme ganó un premio a mejor película en Albania. Tras el encierro obligatorio, Vélez decidió que para su próximo proyecto no escribiría un guion cinematográfico.
Antes del papel, la novela Las tres reinas ya vivía dentro de la mente del autor. “De alguna manera yo estuve contando esta historia durante diez años, estuve dándole vueltas a los personajes, preguntándome qué pasaba con esta familia, de dónde venía, cuál era el origen”. Vélez afirmó que la inspiración vino de Barranquilla, pero la historia y los personajes fueron completamente ficticios.
Para escribir, ya sea para cine o para literatura, el colombiano sintió la necesidad de encontrar un título en las primeras fases. “Para mí el título da un piso, una base con la que trabajar”, recordó el autor, que agregó que fue conociendo y descubriendo a sus personajes.
Lila es la protagonista y narradora de la novela, es la hermana menor de la familia Montpar. “Cuando descubrí que Lila tenía dos hermanas y que las dos eran también muy lindas y querían ser reinas, yo dije claro, son las tres reinas”. Los demás elementos siguieron desarrollándose en la cabeza del autor, que para él surgieron de una forma más sencilla que las veces en las que escribió guiones.
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“Escribiendo el libro descubrí que tenía mucha libertad. Yo venía del mundo rígido del guion. Cuando me pasé a la novela fue como si la historia saliera sola”, dijo Vélez sobre las diferencias entre escribir un guion cinematográfico y una novela.
También recordó la emoción que sintió al encontrar su narradora. “En el cine siempre cuentas la historia desde afuera. Cuando yo me personifico, me meto en el corazón y en la cabeza de Lila, empecé a mirar desde sus ojos”.
Carneseca es la ciudad ficticia donde el autor decidió enmarcar su historia. “Quería crear una atmósfera que fuera única para esta historia. El nombre de Carneseca me encanta porque representa muy bien lo que es la ciudad, una especie de mundo carnal y de mucho calor”, concluyó Vélez, que ya se encuentra trabajando en su segunda novela y continúa desarrollando guiones cinematográficos.