Liv Ullmann, de 85 años, se ha consagrado a lo largo de su carrera como una de las figuras más importantes del cine europeo, trabajando con directores de la talla de Ingmar Berman, el afamado director sueco, con el que protagonizó nueve de sus largometrajes.
En una charla con periodistas, recordó sus inicios en el teatro y en el cine noruego y que, cuando era niña, leía cuentos del escritor Hans Christian Andersen en cumpleaños y fiestas familiares solo para ser escuchada. La también directora reconoció que a lo largo de su carrera “ha tenido que decir que no” incluso a directores de talla mundial como Hitchcock o Brian De Palma, porque “eran diferentes”.
Para ella, "era más fácil trabajar como actriz con gente que conociera", reconoció.
También destacó la "suerte" que ha tenido a lo largo de su carrera por "no haber estado nunca sola y por haber estado siempre rodeada de gente con la que trabajar" y recalcó que "el arte es importantísimo que sea una llamada a recordar qué somos y quiénes somos".
Ullmann quiso aclarar que no asistió el pasado año al Atlàntida porque estaba de huelga junto con el Sindicato de Actores de Hollywood, "luchando contra el sistema y la inteligencia artificial".
A su edad, reconoció que comparte muchas cosas con otras personas de su generación "sobre los problemas de la brecha digital" que se presentan en nuestro mundo.
Y en referencia al proceso de digitalización, manifestó que "aún hay mucho que no sabemos sobre cómo afectan las pantallas a nuestro cerebro" y recalcó que el cerebro "no es lo mejor que tenemos, sino el alma", pero "cuanto más dañado está el cerebro, peor es la retroalimentación de éste con el alma".
Liv Ullmann recibirá la noche de este sábado el galardón Masters of Cinema 2023, otorgado por el Atlàntida Mallorca Film Festival con ocasión de la gala inaugural que tendrá lugar en Palma.