“Me iré ahora, Cloud. Volveré cuando todo termine”
De entre los más de diez videojuegos a los que Square Enix pudo hacerles un remake, comenzaron con Final Fantasy VII, cuya segunda parte salió el 29 de febrero. Lo más seguro es que no haya sido una decisión o porque era el más fácil de modernizar. Seguramente fue porque la compañía quería revivir la sensación de revisitar una historia una y otra vez. Quería volver a sentir que las narrativas no tienen por qué ser lineales. Todo lo contrario, deberían arriesgarse a abrazar la complejidad del mundo.