MinCulturas pidió perdón a comunidades indígenas por explotación cauchera
Las disculpas fueron pedidas en el marco de la conmemoración de los cien años de “La Vorágine”en Mocoa, Putumayo.
El jueves 11 de abril, el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes y la Biblioteca Nacional de Colombia inauguraron en Mocoa, Putumayo, la agenda de conmemoración por los cien años de la publicación de La Vorágine, de José Eustasio Rivera, una obra de más de 300 páginas en la que expone la crueldad y esclavitud a la que son sometidos los indígenas y los pobres por la industria cauchera.
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Durante el encuentro, el ministro de Cultura, Juan David Correa, le pidió perdón a las comunidades indígenas de la región por el holocausto que vivieron a principios del siglo XX, ocasionado por la explotación cauchera. “Como delegado de este gobierno, a través del ministerio, quiero pedir perdón, quiero decirles que si no reconocemos hoy la deuda histórica que tenemos los colombianos con los pueblos amazónicos, no haremos un verdadero cambio cultural”, dijo el jefe ministerial.
De igual manera, señaló que las comunidades indígenas son un ejemplo de esperanza: “porque ustedes, hermanos, la supieron sembrar. Enséñennos, guíennos, estamos aquí para reconocer que no hemos superado la vorágine, que la estamos reviviendo una y otra vez”.
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El evento se llevó a cabo en el Centro Experimental del Amazonas, en Mocoa, y contó con la participación de representantes de los pueblos indígenas que habitan el departamento: camëntzá, inga, cofán, bora, okaina, muinane y uitoto. “Es un reconocimiento a nuestros pueblos, porque nosotros estamos aquí y no nos vamos a ir, somos hermanos”, afirmó el abuelo Braulio de la Asociación de Cabildos Indígenas de Leguízamo y Alto Predio Putumayo, un sabedor con conocimiento del genocidio cauchero. Además, asistieron el Embajador de Colombia en Brasil, Guillermo Rivera Flores; el Gobernador de Putumayo, Carlos Marroquín Luna; el gerente de Indercultura, Fredy Alexander Romo, y el Alcalde de Mocoa, Carlos Hugo Piedrahita.
En la inauguración también se entregó al Museo Suruma la exposición itinerante Gentes de Putumayo que narran, creada en alianza con el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH) y Corpoamazonía. La exposición está compuesta por un recorrido pedagógico e interactivo en el que los asistentes podrán visitar un pasado marcado por la explotación del caucho, la quina, el oro y la fauna en el departamento. Esta muestra estuvo en el Museo Nacional de Colombia y en San Agustín, Huila. Ahora vuelve al Putumayo para quedarse.
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Por su parte, la Biblioteca Nacional de Colombia presentó la Biblioteca Vorágine y anunció la donación de la primera edición a Mocoa. La colección incluye la obra cumbre de José Eustasio Rivera y otros nueve libros. Estos títulos llegarán a todas las bibliotecas públicas colombianas.
Este sábado 13 de abril, el Ministerio de las Culturas y la Embajada de Colombia en Brasil organizaron un conversatorio en el municipio, en el que se discutirá sobre los White Papers: Recomendaciones para una estrategia de Diplomacia Científica para la salvaguarda de la Amazonía, que nacen de la Red Latinoamericana y del Caribe DiploCientífica, con el propósito de generar recomendaciones de política pública para desarrollar una estrategia que permita la pervivencia de esta región.
El jueves 11 de abril, el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes y la Biblioteca Nacional de Colombia inauguraron en Mocoa, Putumayo, la agenda de conmemoración por los cien años de la publicación de La Vorágine, de José Eustasio Rivera, una obra de más de 300 páginas en la que expone la crueldad y esclavitud a la que son sometidos los indígenas y los pobres por la industria cauchera.
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Durante el encuentro, el ministro de Cultura, Juan David Correa, le pidió perdón a las comunidades indígenas de la región por el holocausto que vivieron a principios del siglo XX, ocasionado por la explotación cauchera. “Como delegado de este gobierno, a través del ministerio, quiero pedir perdón, quiero decirles que si no reconocemos hoy la deuda histórica que tenemos los colombianos con los pueblos amazónicos, no haremos un verdadero cambio cultural”, dijo el jefe ministerial.
De igual manera, señaló que las comunidades indígenas son un ejemplo de esperanza: “porque ustedes, hermanos, la supieron sembrar. Enséñennos, guíennos, estamos aquí para reconocer que no hemos superado la vorágine, que la estamos reviviendo una y otra vez”.
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