Ochenta años dando “fuete”
“El Fuete”, uno de los primeros periódicos en apostarle al periodismo de humor político colombiano celebra ochenta años de existencia.
Danelys Vega Cardozo
Era el 3 de enero de 1942 cuando en las calles pereiranas un grito se escuchó. ¡El Fuete! ¡El Fuete! ¡El Fuete!, repetía la voz. No eran lamentos ni nada por el estilo. Aquella voz anunciaba la llegada de un nuevo periódico. Uno diferente; lleno de humor. Humor político que a más de uno no le gustó, pero que nadie calló. Todos los sábados se repartió y hasta con ediciones especiales contó. Agosto y diciembre fueron dos meses llenos de “fuete”.
La apuesta había sido de Néstor Cardona Arcila, más conocido como CAN. Una apuesta bastante arriesgada, pues cargaba con todo el peso encima. “Su medio de comunicación era su único medio de vida y de trabajo. Él sostuvo una familia de ocho hijos, y a una esposa, a punta de “Fuete” (…)”, comenta Fabio Cardona Gutiérrez, hijo de Néstor Cardona y actual director del periódico.
“El Fuete” repartió apodos sin parar. Un tal “Caballo Gaviria” se hizo popular. El nuevo nombre que adoptó un presidente. La gente comenzó a asociar a las figuras políticas por los apodos que realizaba el periódico. Más de uno quiso darle “fuete” a “El Fuete”. Desde presidentes hasta alcaldes buscaron censurarlo. Pero siguió ahí: firme como un roble. “El humor tiene una licencia que no tiene otro tipo de periodismo, y mientras lo haga de una manera inteligente, para hacer pensar, pues yo creo que estamos haciendo bien la tarea”, afirma Cardona.
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La vida, llena de sucesos inesperados, obligó a Néstor Cardona a hacerse al otro lado del camino. De director pasó a espectador. Una enfermedad fue la causante de sus cambios de planes. Entonces un llamado fue necesario. El llamado a continuar un legado. Al menor, al más pequeño de la familia, le tocó asumir tremenda responsabilidad. “Eres el único que no tiene familia, ni responsabilidades. Por favor, a trabajar”, le dijeron sus hermanos a Fabio Cardona. Fue así como a partir de 1984, Cardona asumió una gran labor: seguir brindando “sonrisas” a los pereiranos. “El Fuete es un látigo, pero al final tiene un sonajero porque es para causar risa, es para llamar la atención de una forma diferente”.
Pero Cardona se sentía perdido ante esa nueva realidad. Él creía que su padre hablaba un lenguaje distinto al que él conocía. Néstor Cardona conocía las calles de Pereira y los ciudadanos que las recorrían. A fin de cuentas, “el sentimiento y la emotividad de los pereiranos”. Sin embargo, todo eso era distante para su hijo. Entonces, tomó una decisión: ponerle a “El Fuete” su sello propio. De a poco su círculo de amistades se fue expandiendo. Caricaturistas y humoristas gráficos terminaron colaborándole. “Yayo”, “Gova”, “Mheo”, “Mico”, “Osuna”, “Caballero”, “Matador”, son algunos de los que le han ayudado en el camino.
Con el paso del tiempo “El Fuete” tuvo que adaptarse a las nuevas dinámicas sociales. En 2017 el impreso pasó al olvido. Pero ahí no llegó su final. Simplemente se trasladó al espacio digital. Aunque en el camino ha sufrido varias transformaciones. Ahora las caricaturas y los memes son los protagonistas. “Oye Fabio, ¿y el periódico de antes y los personajes?”, le preguntaban los pereiranos al actual director de “El Fuete”.
Aunque los cambios son inevitables, conservar lo esencial es fundamental. Eso es lo que ha logrado “El Fuete”: preservar la sonrisa. “Aún con ochenta años se sigue manteniendo, desde su primera edición hasta la última, el humor. Es lo que tenemos como tarea: llevar el humor hasta los confines (…)”.
“El Fuete” está libre de espacios publicitarios. A “El fuete” nadie lo patrocina. “El Fuete” depende de una sola persona: Fabio Cardona”. A “El Fuete” lo quieren y por eso se mantiene. A nadie se le paga por colaborar en “El Fuete”. A “El Fuete” le apuestan aquellos que se la juegan por el humor. “Lo único que no queremos es dejar de salir”.
Todo en esta vida es incierto. Quién sabe hasta cuando “El Fuete” seguirá dando latigazos con su humor. Pero Cardona está convencido de una cosa: “Lo único que podría salvar el mundo es el humor”.
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Era el 3 de enero de 1942 cuando en las calles pereiranas un grito se escuchó. ¡El Fuete! ¡El Fuete! ¡El Fuete!, repetía la voz. No eran lamentos ni nada por el estilo. Aquella voz anunciaba la llegada de un nuevo periódico. Uno diferente; lleno de humor. Humor político que a más de uno no le gustó, pero que nadie calló. Todos los sábados se repartió y hasta con ediciones especiales contó. Agosto y diciembre fueron dos meses llenos de “fuete”.
La apuesta había sido de Néstor Cardona Arcila, más conocido como CAN. Una apuesta bastante arriesgada, pues cargaba con todo el peso encima. “Su medio de comunicación era su único medio de vida y de trabajo. Él sostuvo una familia de ocho hijos, y a una esposa, a punta de “Fuete” (…)”, comenta Fabio Cardona Gutiérrez, hijo de Néstor Cardona y actual director del periódico.
“El Fuete” repartió apodos sin parar. Un tal “Caballo Gaviria” se hizo popular. El nuevo nombre que adoptó un presidente. La gente comenzó a asociar a las figuras políticas por los apodos que realizaba el periódico. Más de uno quiso darle “fuete” a “El Fuete”. Desde presidentes hasta alcaldes buscaron censurarlo. Pero siguió ahí: firme como un roble. “El humor tiene una licencia que no tiene otro tipo de periodismo, y mientras lo haga de una manera inteligente, para hacer pensar, pues yo creo que estamos haciendo bien la tarea”, afirma Cardona.
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La vida, llena de sucesos inesperados, obligó a Néstor Cardona a hacerse al otro lado del camino. De director pasó a espectador. Una enfermedad fue la causante de sus cambios de planes. Entonces un llamado fue necesario. El llamado a continuar un legado. Al menor, al más pequeño de la familia, le tocó asumir tremenda responsabilidad. “Eres el único que no tiene familia, ni responsabilidades. Por favor, a trabajar”, le dijeron sus hermanos a Fabio Cardona. Fue así como a partir de 1984, Cardona asumió una gran labor: seguir brindando “sonrisas” a los pereiranos. “El Fuete es un látigo, pero al final tiene un sonajero porque es para causar risa, es para llamar la atención de una forma diferente”.
Pero Cardona se sentía perdido ante esa nueva realidad. Él creía que su padre hablaba un lenguaje distinto al que él conocía. Néstor Cardona conocía las calles de Pereira y los ciudadanos que las recorrían. A fin de cuentas, “el sentimiento y la emotividad de los pereiranos”. Sin embargo, todo eso era distante para su hijo. Entonces, tomó una decisión: ponerle a “El Fuete” su sello propio. De a poco su círculo de amistades se fue expandiendo. Caricaturistas y humoristas gráficos terminaron colaborándole. “Yayo”, “Gova”, “Mheo”, “Mico”, “Osuna”, “Caballero”, “Matador”, son algunos de los que le han ayudado en el camino.
Con el paso del tiempo “El Fuete” tuvo que adaptarse a las nuevas dinámicas sociales. En 2017 el impreso pasó al olvido. Pero ahí no llegó su final. Simplemente se trasladó al espacio digital. Aunque en el camino ha sufrido varias transformaciones. Ahora las caricaturas y los memes son los protagonistas. “Oye Fabio, ¿y el periódico de antes y los personajes?”, le preguntaban los pereiranos al actual director de “El Fuete”.
Aunque los cambios son inevitables, conservar lo esencial es fundamental. Eso es lo que ha logrado “El Fuete”: preservar la sonrisa. “Aún con ochenta años se sigue manteniendo, desde su primera edición hasta la última, el humor. Es lo que tenemos como tarea: llevar el humor hasta los confines (…)”.
“El Fuete” está libre de espacios publicitarios. A “El fuete” nadie lo patrocina. “El Fuete” depende de una sola persona: Fabio Cardona”. A “El Fuete” lo quieren y por eso se mantiene. A nadie se le paga por colaborar en “El Fuete”. A “El Fuete” le apuestan aquellos que se la juegan por el humor. “Lo único que no queremos es dejar de salir”.
Todo en esta vida es incierto. Quién sabe hasta cuando “El Fuete” seguirá dando latigazos con su humor. Pero Cardona está convencido de una cosa: “Lo único que podría salvar el mundo es el humor”.
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