Vivir para contarla, los libros y librerías a dos años del inicio de la pandemia
Después de casi dos años de pandemia las librerías y el sector editorial continúan dando la batalla para recuperar y crecer los números que les dejó el 2020 y 2021.
Andrea Jaramillo Caro
Decía la escritora estadounidense, Louisa May Alcott, que “los libros siempre serán una buena compañía, si se tiene el tipo correcto”. En este momento, que aún enfrentamos una pandemia, muchos acudieron a la lectura como forma de cambiar el diario vivir de una cuarentena y encontraron su tipo correcto de lectura. Sin embargo, esto no evitó o redujo el impacto que el COVID-19 tuvo sobre la industria editorial y literaria.
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Decía la escritora estadounidense, Louisa May Alcott, que “los libros siempre serán una buena compañía, si se tiene el tipo correcto”. En este momento, que aún enfrentamos una pandemia, muchos acudieron a la lectura como forma de cambiar el diario vivir de una cuarentena y encontraron su tipo correcto de lectura. Sin embargo, esto no evitó o redujo el impacto que el COVID-19 tuvo sobre la industria editorial y literaria.
A pesar de que durante el 2020 la industria cayó un 15% con respecto al 2019, el presidente de la Cámara Colombiana del Libro (CCL), Enrique Gonzáles Villa, aseguró a Bloomberg Línea en agosto que si el sector continuaba con el crecimiento que tuvo durante los primeros dos tercios del año se podrían ver cifras similares a las obtenidas en 2019.
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Según estadísticas de esta institución del 2018 al 2019 las ventas de libros en el país subieron un 4.7% y entre 2019 y 2020 cayeron un 16.1%. Sin embargo, la oferta literaria creció un 3.7%, con más títulos ofrecidos en el 2020 que en el 2019. “Mantendremos este crecimiento que hemos tenido ya en los últimos meses y este año igualaremos la cifra de 2019, pero quedamos listos para que el próximo año crezcamos firmemente en el sector editorial” le dijo González a Bloomberg Línea.
Otro aspecto a tener en cuenta es el crecimiento del formato digital, pues según la entidad la cantidad de libros impresos disminuyó con respecto al 2019 y se nota este cambio a lo digital al hablar de los canales de venta. Mientras que las ventas directas o por distribuidoras disminuyeron, la compra a través de librerías virtuales vio un aumento porcentual grande.
De acuerdo con un artículo del diario La República, en 2017 había 604 librerías afiliadas a la Cámara Colombiana del Libro. Estas son la otra cara de la historia. Tanto las grandes librerías como las librerías independientes continúan en la lucha y reactivación del sector participando en ferias y actividades que impulsen el negocio. La CCL anunció a principios de mes que contaron con más de 2′800.000 asistentes a las 16 ferias del libro regionales que se realizaron durante el año de forma virtual e híbrida. “desde el Ministerio celebramos cada una de las ferias con la convicción de que son espacios fundamentales para el fortalecimiento de la lectura y la escritura en el país, así como para impulsar al sector editorial y literario, abrir espacios de diálogo en torno a las ideas y la creación, impulsar procesos de patrimonio y memoria, y llevar contenidos culturales a todos los rincones de Colombia. Por eso nos sumamos con una programación diversa, cultural, charlas, eventos de promoción de lectura y con oferta institucional. En 2022 continuaremos participando activamente en la programación de las ferias y en el fortalecimiento de su Red” dijo en un comunicado de prensa de la entidad, la ministra de cultura, Angélica Mayolo.
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Desde Medellín Patricia Melo, propietaria de la librería Exlibris, comenta que este fue un año muy bueno para ellos con sus cambios y desafíos. “2020 fue un año distópico y muy raro, pero la pandemia reactivó muchísimo la lectura en la gente. Ya no podíamos recibir a la gente con la misma tranquilidad. Este año fue más normal, nosotros somos café-librería entonces con este otro matiz tuvimos que reorganizar todo y eso hizo que nos volviéramos más librería porque con las mesas afuera se añadieron más estantes de libros”, dijo Melo. Para Exlibris ha sido un año muy movido y mucho más gracias a la caja de compensación Comfama a quien Melo cita como un salvador debido a los bonos de lectura que implementó para sus afiliados y otras alianzas.
A pesar de notar un crecimiento en cuanto a sus ventas, Melo cuenta que ha sido difícil ver que le mundo editorial está teniendo más problemas como la falta de papel que, a la larga, retrasa las entregas y aunque no ha afectado directamente a Exlibris, si puede tener un impacto en el sector. La propietaria de la librería afirma que algunos distribuidores hicieron pedidos hace tres meses para el mes de diciembre y aún no los reciben. Otra artista de esta situación incluye el encarecimiento de los libros, especialmente los importados, y la popularidad de plataformas como Busca Libre y la inminente llegada de Amazon.
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En abril de este año se lanzó una iniciativa llamada ‘Colombia Lee’ desde el Ministerio de Cultura y la Cámara Colombiana del Libro, esta tiene el propósito de facilitar la comercialización de la oferta editorial del país al mismo tiempo que reactivar y modernizar el sector. “El sector editorial aporta más o menos el 1% del Producto Interno Bruto Colombiano, solo en ventas. El sector genera unos 15.000 empleos, en toda la cadena, incluyendo escritores, traductores, diseñadores, diagramadores, correctores, y hasta a los productores de papel y comercializadores”, le dijo Enrique Gonzáles Villa a Portafolio en el marco de la Feria del Libro de Bogotá de 2021.
Para el 2022 Melo ve estas nuevas plataformas como un desafío a superar en cuanto a la competencia que crean en cuanto a los precios y los descuentos que unas librerías pueden permitirse, pero otras no y quisiera ver una regulación en los precios de los libros para crear una competencia leal entre los grandes y pequeños actores de la industria.