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Los nombres de Nilton Córdoba Manyoma y Astrid Sánchez Montes de Oca ya son bien conocidos dentro del Congreso y también en el departamento del Chocó. Ambos políticos ganaron ayer el derecho a tener una curul en la Cámara de Representantes al salir ganadores de la contienda electoral que se llevó a cabo el pasado domingo 11 de marzo. Sus nombres, sin embargo, son también usuales dentro de escándalos de corrupción y parapolítica.
Astrid Sánchez Montes de Oca, quien se lanzó a las elecciones bajo la bandera del Partido de la U, consiguió 17.499 votos, y llega así a repetir periodo en el Congreso. En 2012 fue posesionada como senadora, en reemplazo del destituido Eduardo Merlano, y en ese entonces se hablo de que, con su llegada al legislativo, el clan familiar de los Montes de Oca volvía a recobrar fuerza, luego de varios escándalos de corrupción y parapolítica.
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Sánchez Montes de Oca es hija de Rafael Sánchez, el patriarca del clan y quien desde los años 70 es un activo político en el Chocó. Además, la recién elegida representante es hermana de Patrocinio Sánchez, exalcalde Quibdó y exgobernador del departamento, quien fue condenado en 2010 a 18 meses de cárcel por irregularidades en contratos de salud que firmó estando en la alcaldía de la capital.
Su otro hermano, Odín Sánchez, fue encontrado culpable por la Corte Suprema de Justicia al haber participado del modelo de paramilitarismo que Freddy Rendón Herrera, alias El Alemán, construyó en el Chocó. Sánchez fue condenado a nueve años de cárcel después de que el alto tribunal logró probar que recibió dinero del exjefe del bloque Élmer Cárdenas de las AUC, quien operaba en el Urabá antioqueño y chocoano.
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Astrid Sánchez Montes de Oca, por otra parte, también fue protagonista de un episodio de corrupción en 2010. Para es año, la hoy representante era candidata al Senado y en el conteo de votos, fue acusada de cometer fraude electoral. El Consejo Nacional Electoral corroboró la denuncia y le quitó más de 4 mil votos. Las irregularidades le costaron su curul en el senado y fue así como Eduardo Merlano terminó ocupando una silla en el Congreso hasta 2012.
En cuanto a Nilton Córdoba Manyoma, representante del Partido Liberal, con los 23.650 votos que obtuvo el pasado domingo, repetirá periodo en la Cámara. Córdoba es abogado de la Universidad Tecnológica del Chocó, y especialista en Derecho Público de la Universidad Externado de Colombia. Su paso por el Congreso, hasta el año pasado, se dio, al parecer, sin ninguna irregularidad.
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Sin embargo, su nombre salió mencionado a finales de 2017 dentro del escándalo del cartel de la toga. Según información que le ha entrego el exfiscal Gustavo Moreno a la justicia, Córdoba le pagó $200 millones a lo que la Fiscalía ha denominado como una red criminal de abogados y magistrados quienes, a cambio de dinero, direccionaban procesos judiciales. Por este caso, quizás el peor que haya tocado a la justicia en el país, ya hay un condenado y varios exmagistrados con procesos judiciales.
Los millones que habría pagado el hoy representante habrían ido a parar a las manos del exmagistrado auxiliar Camilo Ruiz, quien habría evitado una orden de captura en contra del congresista. Por este caso, la Procuraduría ya abrió una investigación preliminar en contra de Nilton Córdoba. Según el órgano de control, el proceso busca “determinar la supuesta ocurrencia de los hechos, establecer si son constitutivos de falta disciplinaria e individualizar plenamente a los servidores públicos presuntamente comprometidos”.