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Rick Grimes es el personaje que mantiene en pie "The Walking Dead". El policía interpretado por el británico Andrew Lincoln (Londres, 1973) es el que marca los tiempos y a través del cual el espectador absorbe los sentimientos que acompañan a esta serie sobre un apocalipsis zombi. A través de Rick el espectador ha sentido la sensatez ante un mundo lleno de monstruos (sobrenaturales y humanos), el desprecio por la maldad, el instinto de supervivencia, la apatía ante lo inevitable, las ganas de luchar, la locura y en esta última temporada, la paranoia y la radicalización ante las amenazas.
"The Walking Dead" acaba de cerrar su quinta temporada manteniendo los excelentes números de audiencia (15,8 millones de espectadores vieron en EE.UU. el último capítulo) y con cada vez más adeptos a esta mezcla de drama humano y serie fantástica, donde los zombis hace tiempo que perdieron protagonismo ante los peligros creados por los humanos.
¿Hasta cuándo aguantará cuerdo este personaje? “No puedo creer que siga vivo, si siguen empujando a mi personaje a sitios tan diferentes, estaré más que contento de seguir haciendo esto hasta que me muerdan”, dice Andrew Lincoln en conversación telefónica desde Londres.
Lincoln, conocido anteriormente por su romántico papel en "Love Actually", lleva cinco años interpretando al personaje principal de la serie. Un hombre que trata de hacer lo correcto, incluso matar a personas, si es por el bien del resto. “Rick es el mayor núcleo de la historia, pero no creo que sea imprescindible”, comenta el actor. “Carol, Glenn, Daryl, tenemos todos estos personajes maravillosos que sostienen la historia a su forma y que podrían tomar las riendas. Esa ha sido siempre la idea que se me vendió, que era un reparto conjunto, que siempre sería una reunión de actores”. Pero esta ha sido la gran temporada de su personaje, con unos capítulos y una escena final en la que se ha podido lucir: “Siempre es genial estar cubierto de sangre, dar un gran discurso y reunirte con un personaje del pasado”.
La quinta temporada de la serie ha sido frenética —al menos, en algunos tramos— y ha enfrentado a sus personajes a situaciones cada vez más extremas. Desde la amenaza caníbal del inicio hasta la supuesta tranquilidad de un pueblo en el que tratan de montar una sociedad desde cero. El personaje de Rick ha llegado varias veces al límite: “No creo que se haya vuelto loco, creo que está maltrecho y que ha estado en control del destino de mucha gente durante mucho tiempo. Eso provoca paranoia y asusta”.
“Me gusta cómo mi personaje ha estado involucrado este año más que nunca. Me encanta el hecho de que hayamos llegado al punto más bajo posible. Ah, y la barba más larga que he tenido nunca en mi carrera”, dice Lincoln. Se refiere con esto último a la escena en la que su personaje se afeita, algo que el actor no hacía al completo desde hacía un par de años y que rodaron en una sola toma. “Fue como hacer un proyecto de película artística. Lo hicimos de verdad, fue todo muy raro, incómodo, extraño y perfecto para la historia. Pero la que más se alegró fue mi esposa”, bromea al final.
Sobre la barba de Rick y lo que representaba también habla Greg Nicotero, director de varios capítulos esta temporada: “Llevaba un par de años sin verse totalmente afeitado, así que su reacción fue muy auténtica, el ver a una persona diferente devolviéndole la mirada. Esa era la emoción que queríamos capturar”.
Nicotero también responde sobre el pelo de otro de los personajes, Daryl, toda una marca de la serie: 'Creo que si alguna vez se tiene que cortar el pelo, Norman Reedus [el actor que interpreta al personaje] querría que se hiciera en pantalla. Siempre está en plan, 'déjame un buen cuchillo de montaña y me lo quito yo mismo'. Daryl siempre ha querido eso, ah, y siempre ha querido un perro. Norman está presionando para eso'.
La sexta temporada no llegará hasta el próximo otoño. “Me encanta la sensación de que nos estamos moviendo hacia un capítulo de la historia, en el pueblo de Alexandria, que va a ser más complicado psicológicamente para los personajes y en el que hay que ver cómo vamos a convivir con esta gente y cómo vamos a reconstruir y empezar de nuevo una sociedad”. Pero de momento poco sabe de qué está por venir. “Dentro de dos semanas volaré a Los Ángeles y entraré en una habitación con Scott Gimple [productor y guionista], que cerrará la puerta y me dirá si estoy a punto de morir. Siempre es un poco enervante, la verdad”.
Tras el final de la quinta entrega, Lincoln lo único que se aventura a prever es que “se aproxima una tormenta”. Pero los más acérrimos seguidores no tendrán que esperar demasiado. A finales de verano, el canal AMC España estrenará la nueva serie ambientada en el mismo universo, "Fear The Walking Dead". Lincoln se muestra intrigado con esta serie, que transcurrirá en el tiempo en el que su personaje está en coma. “Estuve en LA hace seis semanas con los productores, Robert Kirkman y David Alpert, que estaban a medio camino del rodaje del episodio piloto, y les noté muy entusiasmados”. (Ver Primer avance del 'spin off' de "The Walking Dead").
Zombis de toda la vida
El experto en maquillaje y efectos especiales Greg Nicotero lleva media vida ideando zombis (y otros monstruos) para películas. En "The Walking Dead", además de haber ganado varios premios Emmy por su trabajo, también dirige capítulos trascendentales como el que anoche cerró la quinta temporada. Su dedicación a los zombis en la serie es total. Incluso ha montado una especie de escuela zombi para hacer en Atlanta —donde se rueda la serie— el casting de los muertos vivientes.
“Leo el guión y las imágenes vienen a mí, como por ejemplo la muerte del personaje en el episodio 14 en la puerta giratoria”, dice en conversación telefónica. Nicotero se esfuerza en que el trabajo que le afecta más directamente esté hecho lo mejor posible. Y en dar a los seguidores la sangre, la casquería y las muertes espectaculares que se espera de una historia de zombis: “Siento que es mi responsabilidad hacia la serie dedicar mucho trabajo en asegurarnos que ninguno de los efectos especiales o de las escenas con zombis no parezcan auténticos. Y que no dé la impresión de que son siempre los mismos monstruos”.
Nicotero ya piensa en la próxima temporada, una basada en una “idea mórbida” en la que los personajes se encontrarán con una nueva amenaza: “Un grupo de hombres que han puesto trampas por todas partes y tienen una completa indiferencia por la humanidad”. Los hombres son la amenaza, pero Nicotero seguro que no descuidará a los zombis, a esos que aprendió a caracterizar en 1985 con el maestro del género, George A. Romero en El día de los muertos. Los zombis de toda la vida.