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Lupita Nyong'o y Jared Leto recibieron los primeros trofeos de actuación el domingo a los premios Óscar, en una carrera dominada por la odisea espacial "Gravedad", del mexicano Alfonso Cuarón, que sumaba cinco estatuillas en rubros técnicos en la mayor gala en Hollywood.
Al recibir el premio por la fotografía, el mexicano Emmanuel Lubezki agradeció a Cuarón, al estudio Warners Brothers, a la protagonista Sandra Bullock, a su familia y terminó diciendo: "A mis profesores, aunque no todos. A algunos de ellos".
El suyo es el quinto Óscar para "Gravedad", después de ganar efectos visuales, edición de sonido, mezcla de sonido y edición, este último recibido por el propio Cuarón.
En tanto Nyong'o, deslumbrante como ya es su costumbre con un vestido largo celeste de Prada con un escote hasta el ombligo, recogió su premio a mejor actriz de reparto por el drama histórico "12 años de esclavitud" con un emotivo discurso.
"No se me escapa ni por un momento que tanta alegría en mi vida es consecuencia de tanto dolor de otros", dijo la actriz de 31 años, rindiendo tributo a los esclavos en cuyo calvario se basó el film de Steve McQueen.
El primer trofeo de la noche fue para el músico y actor Jared Leto por su papel de reparto en la femenina transexual Rayon en la cinta sobre la pandemia del sida "Dallas Buyers Club".
Músico, actor y activista, Leto recordó en su discurso de aceptación a "todos los soñadores del mundo en lugares como Ucrania y Venezuela", en momentos en que ambos países sufren las consecuencias de violentas protestas.
Poco después, la cinta animada "Frozen" le dio a Disney el primer Óscar desde la creación de la categoría en 2001 y la italiana "La grande bellezza" de Paolo Sorrentino, una oda cinéfila a una Roma decadente, venció como mejor película extranjera.
Pero en un revés para los españoles, el madrileño Esteban Crespo perdió su Óscar al mejor cortometraje de ficción ante el film francés "Helium".
Ellen DeGeneres, muy elogiada en las redes sociales por su conducción descontracturada, dio el puntapié inicial de la 86a entrega de los Premios Óscar con burlas a los presentes, en particular hacia Jennifer Lawrence, quien se tropezó en la alfombra roja tras bajarse del coche al llegar a la gala.
La joven actriz ya se había caído el año pasado cuando fue a recoger su Óscar por "Silver Linings Playbook" (El lado luminoso de la vida). "Si ganas esta noche, creo que deberíamos llevarte nosotros el Óscar", bromeó DeGeneres.
Luego, la comediante bajó del escenario y acorraló a un grupo de estrellas, entre ellos Brad Pitt, Meryl Streep y Lawrence, y se tomó una foto con ellos que subió a Twitter, donde menos de una hora después ya suma más de un millón de 'retuits'.
- Aún en carrera -
"12 años de esclavitud", que llegó a la fiesta con nueve candidaturas, era una de las favoritas para llevarse el premio a mejor película, si bien se esperaba que "Gravedad" arrasara en las categorías técnicas gracias a la proeza visual que llevó a las pantallas de cine.
A mitad de la ceremonia, la gran perdedora de la noche era la comedia "Escándalo americano", de David O. Russell, que aspiraba a 10 estatuillas y aún tenía las manos vacías.
La favorita a mejor actriz, Cate Blanchett ("Blue Jasmine"), llegó a la gala impactando con un espectacular vestido de Giorgio Armani transparente y cubierto de pedrería, mientras su competidora Amy Adams, nominada por "Escándalo americano", llegó ataviada con un sobrio 'strapless' azul marino de Gucci.
También sigue en carrera Matthew McConaughey, favorito a mejor actor por por su texano hómofobo y enfermo de sida en "Dallas Buyers Club".
Si Cuarón vence, como se espera, el Óscar mejor director, se convertirá en el primer latinoamericano y primer hispanoparlante en llevarse este trofeo. El mexicano sin embargo tendrá que vérselas con McQueen, Russell, Martin Scorsese ("El lobo de Wall Street") y Alexander Payne ("Nebraska").
También Lupita Nyong'o marcó un hito al convertirse en la primera actriz mexicana y primera keniata en llevarse un Óscar.
Si bien vivió de hecho en México menos de un año -su familia regresó a Kenia poco después de que ella naciera- la actriz de 31 años ha dicho que le "encanta" ser mexicana y habla un fluido español, aprendido durante su adolescencia.
"Tengo en mi corazón un lugar tibio para México, así como para mi otro país, Kenia. Es una experiencia gratificante que tantas personas te apoyen y se identifiquen contigo", dijo a los periodistas recientemente.