La escena de "Deadpool 2" que decidieron eliminar
El equipo de la película de acción decidió eliminar una escena que iba a emitirse en los créditos, en la que el peculiar superhéroe viajaba en el tiempo para estrangular a Adolf Hitler en su cuna.
BANG Showbiz
El éxito de la primera entrega de 'Deadpool' se basó en el humor negro y, en algunos casos, hasta desagradable de su protagonista, algo inédito en las superproducciones de superhéroes que hasta ese momento huían del lenguaje demasiado explícito y la violencia gratuita para enfocarse en un público lo más amplio posible, que garantizara su rentabilidad en taquilla. (Le puede interesar: Ryan Reynolds dice que Deadpool "nunca será el tipo que trata de salvar el mundo")
En vista de la buena acogida que recibió la arriesgada apuesta, pese a sus referencias cruzadas a distintos universos como Marvel o D.C. y las rupturas de la cuarta pared, cabía esperar que la secuela mostrara a un Ryan Reynolds más irreverente que nunca... pero incluso él tiene sus límites.
Ahora que la película ya llegó a las salas de cine, los guionistas Rhett Reese y Paul Wernick confesaron que optaron por eliminar en el último momento una escena que debía emitirse tras los créditos, al considerar que podía herir sensibilidades al mostrar a Deadpool viajando al pasado para asesinar a Adolf Hitler en su infancia. (Le puede interesar: "Deadpool 2" estrena tráiler final)
"Llegamos incluso a rodarla", explica Paul al portal Uproxx. "El último momento era Deadpool diciendo: '¡Máximo esfuerzo!' antes del golpearle en la garganta. La verdad es que era desagradable".
"La probamos frente a una audiencia. Él aparece en una habitación infantil en Alemania, frente a la cuna. Y cuando se inclinaba para ver al bebé, todo el mundo exclamó: 'Oohhhh', ¡y esa no es la reacción que queríamos! Así que acabamos por quitarla", añade Rhett.
Antes de tirar la toalla y renunciar a la broma, el equipo trató de suavizarla sustituyendo el asesinato por una de las bromas típicas del antihéroe que tampoco funcionaba como esperaron.
"Había otra opción en la que miraba a Hitler y decía: 'Vaya, ese es un chico duro'. Y entonces sacaba un esfero y le dibujaba un bigote", reconoce.
Finalmente, la película cuenta con cinco cortos en los títulos de crédito, que contribuyen a dar una nueva vuelta a una de las tramas principales de la historia, cambiar varios de sus giros más sorprendentes y, cómo no, burlarse de las cada vez más confusas líneas temporales de los 'X-Men'. (Le puede interesar: "Deadpool 2" presenta al grupo que conforma la "Fuerza X")
El éxito de la primera entrega de 'Deadpool' se basó en el humor negro y, en algunos casos, hasta desagradable de su protagonista, algo inédito en las superproducciones de superhéroes que hasta ese momento huían del lenguaje demasiado explícito y la violencia gratuita para enfocarse en un público lo más amplio posible, que garantizara su rentabilidad en taquilla. (Le puede interesar: Ryan Reynolds dice que Deadpool "nunca será el tipo que trata de salvar el mundo")
En vista de la buena acogida que recibió la arriesgada apuesta, pese a sus referencias cruzadas a distintos universos como Marvel o D.C. y las rupturas de la cuarta pared, cabía esperar que la secuela mostrara a un Ryan Reynolds más irreverente que nunca... pero incluso él tiene sus límites.
Ahora que la película ya llegó a las salas de cine, los guionistas Rhett Reese y Paul Wernick confesaron que optaron por eliminar en el último momento una escena que debía emitirse tras los créditos, al considerar que podía herir sensibilidades al mostrar a Deadpool viajando al pasado para asesinar a Adolf Hitler en su infancia. (Le puede interesar: "Deadpool 2" estrena tráiler final)
"Llegamos incluso a rodarla", explica Paul al portal Uproxx. "El último momento era Deadpool diciendo: '¡Máximo esfuerzo!' antes del golpearle en la garganta. La verdad es que era desagradable".
"La probamos frente a una audiencia. Él aparece en una habitación infantil en Alemania, frente a la cuna. Y cuando se inclinaba para ver al bebé, todo el mundo exclamó: 'Oohhhh', ¡y esa no es la reacción que queríamos! Así que acabamos por quitarla", añade Rhett.
Antes de tirar la toalla y renunciar a la broma, el equipo trató de suavizarla sustituyendo el asesinato por una de las bromas típicas del antihéroe que tampoco funcionaba como esperaron.
"Había otra opción en la que miraba a Hitler y decía: 'Vaya, ese es un chico duro'. Y entonces sacaba un esfero y le dibujaba un bigote", reconoce.
Finalmente, la película cuenta con cinco cortos en los títulos de crédito, que contribuyen a dar una nueva vuelta a una de las tramas principales de la historia, cambiar varios de sus giros más sorprendentes y, cómo no, burlarse de las cada vez más confusas líneas temporales de los 'X-Men'. (Le puede interesar: "Deadpool 2" presenta al grupo que conforma la "Fuerza X")