Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Es imposible entender al Sheldon Cooper adulto sin conocer a su extravagante y adorable versión joven, que debió esperar que el mundo se adaptara a sus particularidades en lugar de ubicarse en un sitio más recomendable a su edad.
Y aunque posee un coeficiente intelectual muy superior a quienes lo rodean, niños y adultos incluidos, Sheldon no es más que un niño sencillo, inocente e incapaz de entender que es él quien no encaja en este mundo, en vez de cuestionarse el actuar carente de lógica, principios e higiene del resto de las personas.
Iain Armitage, el jovencito de diez años que le da vida al joven Sheldon, le contó a El Espectador acerca de su experiencia interpretando el papel. “En el rodaje de la serie hubo momentos en los que, sencillamente, no podía parar de reír. El guion es muy divertido y hacer todo este proyecto fue algo increíble, porque Sheldon es un freak en muchísimas cosas y hacerlas era un reto, pero a la vez pasé un muy buen rato”, comentó.
En este particular camino de crecimiento, Sheldon viaja acompañado de su abnegada y religiosa madre Mary, quien se atormenta ante la posibilidad de que su hijo sufra rechazo y bullying por parte de sus compañeros. Todo lo contrario de su papá, George, quien poco lo entiende, pero que sabe que al final del día podrá resolver sus cosas como un niño normal.
Lance Barber, quien interpreta el papel de George Cooper en la serie, admitió que su personaje es el “típico papá vieja escuela” que sabe que debe responsabilizarse por el comportamiento de sus hijos, y más aun teniendo uno como Sheldon, que es demasiado brillante para su edad.
Georgie, Missy y sus padres tratarán de salir a flote para no ser seres anónimos, eclipsados por la brillantez del menor de la familia, pero sobresaldrán perfectamente gracias a sus diferencias y virtudes. Un brillo similar a la encantadora y mordaz Meemaw, abuela de Sheldon, la persona que mejor entiende y más disfruta de este pequeño genio.
La carrera actoral de Iain es bastante corta por su edad, pero eso no le ha impedido desempeñarse en este rol como todo un profesional, dando el ciento por ciento de su corta experiencia para llegar a ser el Sheldon perfecto. “He estado actuando desde hace tres años, pero Young Sheldon ha sido el proyecto más largo que he hecho, porque llevo ya un año en esto. Ahora estoy viviendo en California, antes vivía en Virginia, pero solo podía ir dos semanas en el año. Muchas cosas han cambiado desde que estoy haciendo esto, pero amo vivir en Los Ángeles y haber sido parte de esta serie, que ha cambiado mi vida en muchos aspectos”, afirmó.
El acercamiento que tuvo Iain con Jim Parsons fue muy íntimo, pues lo estuvo entrenando para que lograra una similitud perfecta al Sheldon adulto, y todo parece indicar que funcionó.
“Jimmy es increíble, lo aprecio muchísimo. Es muy divertido y tuvo toda la disposición de enseñarme a hacer el papel de Sheldon, que no fue nada fácil de sacar, estuvo ahí con nosotros en todo el proceso, hablamos mucho y realmente aprendí”, confesó Iain.
Esta serie, creada por Chuck Lorre y Steven Molaro, deja claro que, aunque es una precuela de una de las comedias más famosas del mundo, la trama es completamente distinta debido a sus personajes y la manera en la que se desarrolla la historia.
“Nuestro show es muy distinto al de The Big Bang Theory en el sentido de que Sheldon es muchísimo más joven y vulnerable; además esta es una serie familiar, la otra no lo era tanto”, comenta Lance Barber, hablando desde su punto de vista.
Finalmente, recrear a un personaje como Sheldon Cooper no es tarea fácil; sin embargo la serie mostrará una faceta nunca antes vista de la infancia de uno de los personajes más icónicos de la comedia norteamericana, que sin duda hizo historia en la pantalla chica alrededor del mundo.
La segunda temporada empezará a partir de este lunes por Warner Channel.