“Nación vacunada”, el ejemplo de Israel
Este domingo, Smithsonian Channel estrena el documental que muestra cómo ese país, a pesar de sus divisiones y conflictos internos, logró convertirse en el líder mundial en vacunación contra el COVID-19.
Daniela Suárez Zuluaga
Más de cuatro millones de personas han muerto a causa de la pandemia provocada por el COVID-19, un poco más de un año y medio ha pasado desde que empezó esta emergencia sanitaria y cada país ha lidiado con sus consecuencias de manera diferente. La vacuna, que al principio se veía como una solución lejana, terminó siendo la luz al final del túnel para todo el planeta, y ahora, gracias a ella, el número de fallecidos al día por esta enfermedad ha disminuido de manera significativa.
Desde el primer brote hasta el inicio del período de confinamiento, Israel quiso enfocarse en la reducción rápida de la curva de contagios, inspirando al resto del mundo a seguir su ejemplo. Nación vacunada, el documental original de Smithsonian Channel, presenta una mirada cercana y profunda sobre cómo Israel, a pesar de sus conflictos sociales y económicos, además de su fuerte división interna, se convirtió en líder mundial en vacunación contra el COVID-19.
En entrevista con El Espectador, el productor del documental, Tim Evans, habló sobre cómo llegó a formar parte de este proyecto y manifestó que la propuesta lo tomó por sorpresa. “La idea nos la presentó una productora israelí, Ananey Studios. Tenían conocimiento de primera mano de la situación, por supuesto, pero su enfoque era que Israel fue la primera nación en vacunar a toda su población adulta. Fue una sorpresa para mí, y parecía que este documental podría darle al resto del mundo un vistazo a cómo sería la vida después del COVID-19”, comentó.
En el caso específico de Israel, el país protagonizó uno de los primeros, más rápidos y exitosos lanzamientos de la vacuna en el mundo, lo que brindó a otras naciones un modelo de plan a seguir y una visión optimista del futuro. Y es que en un artículo publicado por la BBC en febrero de este año, Israel estaba dando comienzo a una flexibilización importante a las medidas del confinamiento, después de que la efectividad de la vacuna Pfizer llegara a un 95,8 %. “Israel tiene la tasa de vacunación más alta del mundo. Más del 49 % de la población ya ha recibido al menos una dosis. El país había iniciado su tercer confinamiento el 27 de diciembre, después de que aumentara el número de contagios”, sentencia el artículo.
Evans al principio pensó que los problemas internos del país afectarían de manera directa el manejo de la pandemia, pero no fue así. “Israel tiene mucha división interna, pero hay algunas razones por las que el país se convirtió en el líder mundial en vacunas. Es una nación pequeña, tanto en población como en tamaño físico, por lo que esto facilitó los esfuerzos de vacunación”, señaló.
El productor también habló sobre el programa, según él, centralizado y coordinado que creó el gobierno israelí para combatir el virus. “Cerraron todos los negocios y exigieron legalmente que las personas se pusieran en cuarentena en sus hogares. También instituyeron un sistema de “Tarjeta Verde”, que permitía a las personas vacunadas viajar y reanudar sus actividades normales. Todo el gobierno fue riguroso en el esfuerzo, y funcionó”, agregó Evans.
Con acceso privilegiado, las cámaras de Smithsonian Channel revelan los dramáticos acontecimientos que estremecieron al país el año pasado, desde la primera ola de la pandemia a los confinamientos y restricciones que siguieron hasta la agresiva campaña de vacunación que hizo posible la reapertura de la economía y el estallido de violencia entre palestinos y fuerzas israelíes que vino después.
“Producir durante una pandemia no es fácil, incluso en un país que ha vacunado a la mayoría de sus ciudadanos. Comenzaron a aparecer nuevas variantes mientras el equipo estaba filmando, lo que puso a todos nerviosos. Y casi inmediatamente después de que el programa de vacunación tuvo éxito, estalló una guerra entre Hamás e Israel. El equipo se enfrentaba a ataques con cohetes y a cuarentenas. Afortunadamente el conflicto terminó rápido, pero pudimos capturar este drama en el programa y ver cómo la gente enfrentaba los problemas de un virus y una guerra”, relató Evans.
Siguiendo a personajes, cuyas historias transcienden más allá de las fronteras, esta crisis global se examina a través de relatos muy personales de trabajadores de la salud, rabinos, empresarios y otros afectados mientras navegaban la complejidad de los cierres y las restricciones, divisiones comunitarias y conflictos violentos en Jerusalén. Así, los televidentes descubrirán la historia de la campaña de vacunación israelí y los obstáculos que enfrentó antes, durante y después de su lanzamiento.
“Nuestras cámaras siguieron a personas de diferentes ámbitos de la sociedad: un rabino ortodoxo, una enfermera árabe-israelí, el propietario de un club nocturno y el propio Zar del Coronavirus de Israel, el doctor Ronni Gamzu. Fue fascinante ver cómo todos los aspectos de la sociedad israelí reaccionaban de diferentes maneras a la pandemia”, reveló Evans.
“El rabino tiene ocho hijos, muchos de los cuales tenían miedo tanto del virus como de los ataques con cohetes. La enfermera, como musulmana y árabe, se enfrenta a sus propios problemas, al mismo tiempo que intenta mantener con vida a las personas en su hospital. Pero lo mejor es que este filme tiene un final feliz: vemos cómo una nación vuelve a la normalidad: a las bodas, a las reuniones familiares y a las salidas nocturnas en la ciudad. Es un final muy optimista que espero que el resto del mundo pronto comience a experimentar”, argumentó el productor.
Tim Evans aseguró que gran parte del éxito que tuvo Israel al lidiar con la pandemia se debe a quien él llama el Zar del Coronavirus, el doctor Ronni Gamzu. Su equipo de trabajo lo siguió durante todo el período del virus mientras la nación comenzaba a abrirse. El doctor Gamzu creía que la clave para poner fin a la pandemia no eran los tapabocas o las cuarentenas, sino las vacunas. Incluso, estaba dispuesto a tomar algunos de los primeros envíos de los biológicos experimentales para acelerar el proceso y, para ello, Evans contó que el doctor tuvo el respaldo y los recursos del gobierno para que esto sucediera.
Aunque la situación de Israel es un gran ejemplo a seguir, el productor de la serie cree que las demás naciones deberían tomar el conocimiento y tener la certeza de que las vacunas funcionan. “Espero que los espectadores tengan la oportunidad de ver cómo las personas manejaron el costo emocional de la pandemia y cómo encontraron recursos para seguir adelante”, agregó Evans.
Sin duda, Naciones vacunadas dará una perspectiva diferente sobre la vacunación y la lucha individual de las personas no solo en Israel, sino en el mundo entero, para tratar de superar la crisis sanitaria que sigue vigente, y ese es uno de los objetivos que tiene el documental. “A estas alturas todos conocen los hechos y la ciencia detrás de la pandemia del coronavirus. Este programa realmente no se trata de eso. El punto clave para mí fue ver a seres humanos individuales luchando contra los desafíos de esta pandemia”.
Finalmente, Tim Evans recalcó la efectividad de la vacunación y la plantea, a través de este documental, como una solución eficaz y fundamental para ir acabando poco a poco con el virus. “Están las decisiones de vida o muerte que todos hemos estado tomando, ya sea usar una máscara, cuándo vacunarnos, así como las luchas más pequeñas de hablar con la familia y hacer nuestro trabajo durante el confinamiento. Y espero que estas historias tan humanas en una sociedad muy específica reflejen las luchas que todos hemos estado enfrentando en todo el mundo”, concluyó.
Más de cuatro millones de personas han muerto a causa de la pandemia provocada por el COVID-19, un poco más de un año y medio ha pasado desde que empezó esta emergencia sanitaria y cada país ha lidiado con sus consecuencias de manera diferente. La vacuna, que al principio se veía como una solución lejana, terminó siendo la luz al final del túnel para todo el planeta, y ahora, gracias a ella, el número de fallecidos al día por esta enfermedad ha disminuido de manera significativa.
Desde el primer brote hasta el inicio del período de confinamiento, Israel quiso enfocarse en la reducción rápida de la curva de contagios, inspirando al resto del mundo a seguir su ejemplo. Nación vacunada, el documental original de Smithsonian Channel, presenta una mirada cercana y profunda sobre cómo Israel, a pesar de sus conflictos sociales y económicos, además de su fuerte división interna, se convirtió en líder mundial en vacunación contra el COVID-19.
En entrevista con El Espectador, el productor del documental, Tim Evans, habló sobre cómo llegó a formar parte de este proyecto y manifestó que la propuesta lo tomó por sorpresa. “La idea nos la presentó una productora israelí, Ananey Studios. Tenían conocimiento de primera mano de la situación, por supuesto, pero su enfoque era que Israel fue la primera nación en vacunar a toda su población adulta. Fue una sorpresa para mí, y parecía que este documental podría darle al resto del mundo un vistazo a cómo sería la vida después del COVID-19”, comentó.
En el caso específico de Israel, el país protagonizó uno de los primeros, más rápidos y exitosos lanzamientos de la vacuna en el mundo, lo que brindó a otras naciones un modelo de plan a seguir y una visión optimista del futuro. Y es que en un artículo publicado por la BBC en febrero de este año, Israel estaba dando comienzo a una flexibilización importante a las medidas del confinamiento, después de que la efectividad de la vacuna Pfizer llegara a un 95,8 %. “Israel tiene la tasa de vacunación más alta del mundo. Más del 49 % de la población ya ha recibido al menos una dosis. El país había iniciado su tercer confinamiento el 27 de diciembre, después de que aumentara el número de contagios”, sentencia el artículo.
Evans al principio pensó que los problemas internos del país afectarían de manera directa el manejo de la pandemia, pero no fue así. “Israel tiene mucha división interna, pero hay algunas razones por las que el país se convirtió en el líder mundial en vacunas. Es una nación pequeña, tanto en población como en tamaño físico, por lo que esto facilitó los esfuerzos de vacunación”, señaló.
El productor también habló sobre el programa, según él, centralizado y coordinado que creó el gobierno israelí para combatir el virus. “Cerraron todos los negocios y exigieron legalmente que las personas se pusieran en cuarentena en sus hogares. También instituyeron un sistema de “Tarjeta Verde”, que permitía a las personas vacunadas viajar y reanudar sus actividades normales. Todo el gobierno fue riguroso en el esfuerzo, y funcionó”, agregó Evans.
Con acceso privilegiado, las cámaras de Smithsonian Channel revelan los dramáticos acontecimientos que estremecieron al país el año pasado, desde la primera ola de la pandemia a los confinamientos y restricciones que siguieron hasta la agresiva campaña de vacunación que hizo posible la reapertura de la economía y el estallido de violencia entre palestinos y fuerzas israelíes que vino después.
“Producir durante una pandemia no es fácil, incluso en un país que ha vacunado a la mayoría de sus ciudadanos. Comenzaron a aparecer nuevas variantes mientras el equipo estaba filmando, lo que puso a todos nerviosos. Y casi inmediatamente después de que el programa de vacunación tuvo éxito, estalló una guerra entre Hamás e Israel. El equipo se enfrentaba a ataques con cohetes y a cuarentenas. Afortunadamente el conflicto terminó rápido, pero pudimos capturar este drama en el programa y ver cómo la gente enfrentaba los problemas de un virus y una guerra”, relató Evans.
Siguiendo a personajes, cuyas historias transcienden más allá de las fronteras, esta crisis global se examina a través de relatos muy personales de trabajadores de la salud, rabinos, empresarios y otros afectados mientras navegaban la complejidad de los cierres y las restricciones, divisiones comunitarias y conflictos violentos en Jerusalén. Así, los televidentes descubrirán la historia de la campaña de vacunación israelí y los obstáculos que enfrentó antes, durante y después de su lanzamiento.
“Nuestras cámaras siguieron a personas de diferentes ámbitos de la sociedad: un rabino ortodoxo, una enfermera árabe-israelí, el propietario de un club nocturno y el propio Zar del Coronavirus de Israel, el doctor Ronni Gamzu. Fue fascinante ver cómo todos los aspectos de la sociedad israelí reaccionaban de diferentes maneras a la pandemia”, reveló Evans.
“El rabino tiene ocho hijos, muchos de los cuales tenían miedo tanto del virus como de los ataques con cohetes. La enfermera, como musulmana y árabe, se enfrenta a sus propios problemas, al mismo tiempo que intenta mantener con vida a las personas en su hospital. Pero lo mejor es que este filme tiene un final feliz: vemos cómo una nación vuelve a la normalidad: a las bodas, a las reuniones familiares y a las salidas nocturnas en la ciudad. Es un final muy optimista que espero que el resto del mundo pronto comience a experimentar”, argumentó el productor.
Tim Evans aseguró que gran parte del éxito que tuvo Israel al lidiar con la pandemia se debe a quien él llama el Zar del Coronavirus, el doctor Ronni Gamzu. Su equipo de trabajo lo siguió durante todo el período del virus mientras la nación comenzaba a abrirse. El doctor Gamzu creía que la clave para poner fin a la pandemia no eran los tapabocas o las cuarentenas, sino las vacunas. Incluso, estaba dispuesto a tomar algunos de los primeros envíos de los biológicos experimentales para acelerar el proceso y, para ello, Evans contó que el doctor tuvo el respaldo y los recursos del gobierno para que esto sucediera.
Aunque la situación de Israel es un gran ejemplo a seguir, el productor de la serie cree que las demás naciones deberían tomar el conocimiento y tener la certeza de que las vacunas funcionan. “Espero que los espectadores tengan la oportunidad de ver cómo las personas manejaron el costo emocional de la pandemia y cómo encontraron recursos para seguir adelante”, agregó Evans.
Sin duda, Naciones vacunadas dará una perspectiva diferente sobre la vacunación y la lucha individual de las personas no solo en Israel, sino en el mundo entero, para tratar de superar la crisis sanitaria que sigue vigente, y ese es uno de los objetivos que tiene el documental. “A estas alturas todos conocen los hechos y la ciencia detrás de la pandemia del coronavirus. Este programa realmente no se trata de eso. El punto clave para mí fue ver a seres humanos individuales luchando contra los desafíos de esta pandemia”.
Finalmente, Tim Evans recalcó la efectividad de la vacunación y la plantea, a través de este documental, como una solución eficaz y fundamental para ir acabando poco a poco con el virus. “Están las decisiones de vida o muerte que todos hemos estado tomando, ya sea usar una máscara, cuándo vacunarnos, así como las luchas más pequeñas de hablar con la familia y hacer nuestro trabajo durante el confinamiento. Y espero que estas historias tan humanas en una sociedad muy específica reflejen las luchas que todos hemos estado enfrentando en todo el mundo”, concluyó.