¿Cuál es su referente musical?
A mí me encantan las rancheras desde niño; mi influencia estuvo por el lado de lo romántico de José Alfredo Jiménez y la interpretación de Vicente Fernández. Creo que ha sido una construcción de sentires musicales, porque también el pop de Diego Torres me tocó.
¿Con qué sueña?
Sueño impactar los corazones de muchas personas y transcender en diferentes lugares del mundo.
¿Qué ha sido lo más complejo de lograr un posicionamiento musical?
Lo más complejo es la espera, esa sensación que generan las carreras que son artísticas, porque tú no sabes qué va a suceder. No es como cuando uno decide ser médico y solo es tener un trabajo como independiente y consultar o ser empleado, creo que allí vas a la fija. Pero en la música es difícil, porque te llenas de sueños, que te traen caídas, y las emociones suben y bajan. Eso es lo complejo.
Defínase en tres palabras.
Perseverante, creyente y fiel.
¿Cuáles son sus grandes puntos a favor para ser una celebridad de la música popular?
Más que ser una celebridad de la música, quiero entender el sentir de la gente y proyectarlo en mis letras e interpretación. Tengo a favor que canto con el alma y todo lo hago con amor.
¿Qué es lo más difícil que ha tenido que vivir en el ámbito personal?
A los quince años me dispararon en una pierna por tratar de defender a una señora que la iban a robar, pero gracias a Dios pude salir de esa situación.
Dejando a un lado su carrera, ¿cómo se define?
Un amante de la vida.
¿Con quién sueña grabar una colaboración?
Me gustaría con varios… con Espinoza Paz o Alzate, entre otros.
¿Por qué alguien debería enamorarse de su música?
Porque tengo letras que hablan de la vida, de todo lo que nos puede pasar a diario en nuestras relaciones sentimentales. Quiero que la gente disfrute de una producción hecha con mucho cariño.