Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Cromos

                          Vea

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Suscriptores

                                      Beneficios

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Descuentos

                                                                                                    Idiomas

                                                                                                    EE ADS

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Blogs

                                                                                                          Especiales

                                                                                                            Descarga la App

                                                                                                              Edición Impresa

                                                                                                                Suscripción

                                                                                                                  Eventos

                                                                                                                    Foros El Espectador

                                                                                                                      Pauta con nosotros en EE

                                                                                                                        Pauta con nosotros en Cromos

                                                                                                                          Pauta con nosotros en Vea

                                                                                                                            Avisos judiciales

                                                                                                                              Preguntas Frecuentes

                                                                                                                                Contenido Patrocinado
                                                                                                                                22 de diciembre de 2023 - 05:16 p. m.

                                                                                                                                Cuando Diomedes Díaz predijo lo que pasaría luego de su muerte

                                                                                                                                Su muerte, hace 10 años, produjo cuatro días de duelo y un movimiento multitudinario en Valledupar.

                                                                                                                                Alberto González Martínez

                                                                                                                                Periodista de Sección Entretenimiento
                                                                                                                                Diomedes Díaz le concedió una entrevista al periodista barranquillero Ernesto McCausland en 1961.
                                                                                                                                Foto: Youtube Fundación Ernesto McCausland
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                A Diomedes Díaz no le gustaba la idea de su muerte, aunque ya había pronosticado lo que sucedería los días posteriores a este suceso, que finalmente le llegó el 22 de diciembre del 2013. No solo fue un natural visionario con su música, sino que sus reflexiones jocosas y particulares le dieron el mérito de la sabiduría popular. Como filósofo costumbrista fue nombrado por sus seguidores.

                                                                                                                                Quizá le pueda interesar: Horóscopo para hoy 22 de diciembre del 2023: ¿Qué te deparan los signos zodiacales?

                                                                                                                                El día que murió Valledupar se quiso detener. Los comercios del centro de la ciudad estaban vacíos y solo se escuchaba su música, que por momentos se interrumpía para anunciar promociones. Se decretaron cuatro días de duelo por los cuatro días de velorio en la plaza central de la ciudad. En la Plaza Alfonso López, donde se han coronado reyes vallenatos, había todo un ritual por la muerte del Cacique.

                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                El desfile hasta el cementerio recogió a más de 30 mil personas y en los barrios, populares o exclusivos, se escuchaba tan reiterativas sus canciones que el cantante parecía más vivo que muerto. “Fue una Navidad rara”, sentenció el escritor Alonso Sánchez Baute, quién días después publicó una reseña con los pormenores del suceso, llamada “Se fue el Cacique Diomedes Díaz”.

                                                                                                                                A sus familiares los registraban las cámaras de noticias con las caras adoloridas y otras personas que nunca lo habían visto en su vida, lloraban desenfrenadamente como si se tratara de su propio papá. En el texto de Sánchez Baute aparecen algunas voces de esas personas mientras se quejaban: “¿Por qué nos abandonaste?”, “¡Mi vida ya no tiene sentido!”, “Ya tengo algo importante para contarles a mis nietos”, decían.

                                                                                                                                En el periódico de la ciudad, El Pilón, también se registraron personas que llegaron de varias partes del país solo a ver su tumba. Era rodeada por visitantes, curiosos y vendedores vendedores ambulantes ofreciendo lo que tuvieran a mano. Sánchez asegura que, luego de su entierro en Jardines Del Ecce Homo, la tumba tuvo que ser protegida por la cuatro agentes de la Policía.

                                                                                                                                Su familia había denunciado que se estaban robando la tierra donde descansaba para venderla en bolsas de plástico por $10.000 y que alguien quiso profanar la tumba para arrancar uno de sus mechones de cabello que tenían supuestos efectos milagrosos. Algo que parecería increíble, si Gabo no hubiese demostrado que por esos lares cualquier cosa podía pasar.

                                                                                                                                La entrevista en la que Diomedes Díaz habló de su muerte

                                                                                                                                Ya todas estos sucesos pasaban por la cabeza de Diomedes veinte años antes de su muerte. El calor que debía haber tenido bajo tierra, los venteros ambulantes, las personas que lloraban, la multitud y más. Se lo dijo en una entrevista al periodista Ernesto McCausland y un fragmento de sus jocosas respuestas se volvió un meme que ha trascendido hasta estos días: “No sé, Ernesto, no sé”.

                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                —Usted piensa en al muerte —le había preguntado el periodista barranquillero.

                                                                                                                                —Todos los días. A diario. Si fuera que yo supiera que uno sirviera más muerte que vivo te lo juro que sí. Pero imagínate uno enterra’o debajo de la tierra y con esos calores que hacen ahora —respondía mientras se escuchaban pequeñas risas en el fondo del video— Pero no sé, Ernesto, no sé.

                                                                                                                                —¿Cómo le gustaría morirse? —preguntó después.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                —No me gustaría ni de viejo. La esperanza mía es que cuando llegue a viejo ya la ciencia esté avanzada. Claro que sí pinto mi entierro. Bonito. El cajón allá en el medio, los gamines vendiendo chicle, los otros vendiendo gaseosa o pastelito, la viuda con pastilla pa’ que no llore porque ya tiene plata, pero no hablemos de eso.

                                                                                                                                —¿La viuda y cuántas más? —insistió McCausland.

                                                                                                                                —Póngale una docena.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                La fama también pasaba por haberse acostado con cerca de 400 mujeres, según lo dice Sánchez Baute en su texto. Hoy en día siguen saliendo personas que aseveran ser sus hijos, pero él solo reconoció a 18, los que le heredaron el lunar detrás de la oreja. Aún, diez años después de muerto, le adjudican poderes misteriosos. Su fecha de nacimiento en el chanche que algunas casas de apuestas han preferido vetar o su estatua en Valledupar que supuestamente tiene el poder de devolver la fertilidad a las mujeres. Diomedes es cacique, artista y mito, a la vez.

                                                                                                                                Diomedes y La Muerte (versión restaurada y extendida)

                                                                                                                                Puede leer también: “De por vida”, un álbum de relatos de Doble Porción

                                                                                                                                Diomedes Díaz le concedió una entrevista al periodista barranquillero Ernesto McCausland en 1961.
                                                                                                                                Foto: Youtube Fundación Ernesto McCausland
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                A Diomedes Díaz no le gustaba la idea de su muerte, aunque ya había pronosticado lo que sucedería los días posteriores a este suceso, que finalmente le llegó el 22 de diciembre del 2013. No solo fue un natural visionario con su música, sino que sus reflexiones jocosas y particulares le dieron el mérito de la sabiduría popular. Como filósofo costumbrista fue nombrado por sus seguidores.

                                                                                                                                Quizá le pueda interesar: Horóscopo para hoy 22 de diciembre del 2023: ¿Qué te deparan los signos zodiacales?

                                                                                                                                El día que murió Valledupar se quiso detener. Los comercios del centro de la ciudad estaban vacíos y solo se escuchaba su música, que por momentos se interrumpía para anunciar promociones. Se decretaron cuatro días de duelo por los cuatro días de velorio en la plaza central de la ciudad. En la Plaza Alfonso López, donde se han coronado reyes vallenatos, había todo un ritual por la muerte del Cacique.

                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                El desfile hasta el cementerio recogió a más de 30 mil personas y en los barrios, populares o exclusivos, se escuchaba tan reiterativas sus canciones que el cantante parecía más vivo que muerto. “Fue una Navidad rara”, sentenció el escritor Alonso Sánchez Baute, quién días después publicó una reseña con los pormenores del suceso, llamada “Se fue el Cacique Diomedes Díaz”.

                                                                                                                                A sus familiares los registraban las cámaras de noticias con las caras adoloridas y otras personas que nunca lo habían visto en su vida, lloraban desenfrenadamente como si se tratara de su propio papá. En el texto de Sánchez Baute aparecen algunas voces de esas personas mientras se quejaban: “¿Por qué nos abandonaste?”, “¡Mi vida ya no tiene sentido!”, “Ya tengo algo importante para contarles a mis nietos”, decían.

                                                                                                                                En el periódico de la ciudad, El Pilón, también se registraron personas que llegaron de varias partes del país solo a ver su tumba. Era rodeada por visitantes, curiosos y vendedores vendedores ambulantes ofreciendo lo que tuvieran a mano. Sánchez asegura que, luego de su entierro en Jardines Del Ecce Homo, la tumba tuvo que ser protegida por la cuatro agentes de la Policía.

                                                                                                                                Su familia había denunciado que se estaban robando la tierra donde descansaba para venderla en bolsas de plástico por $10.000 y que alguien quiso profanar la tumba para arrancar uno de sus mechones de cabello que tenían supuestos efectos milagrosos. Algo que parecería increíble, si Gabo no hubiese demostrado que por esos lares cualquier cosa podía pasar.

                                                                                                                                La entrevista en la que Diomedes Díaz habló de su muerte

                                                                                                                                Ya todas estos sucesos pasaban por la cabeza de Diomedes veinte años antes de su muerte. El calor que debía haber tenido bajo tierra, los venteros ambulantes, las personas que lloraban, la multitud y más. Se lo dijo en una entrevista al periodista Ernesto McCausland y un fragmento de sus jocosas respuestas se volvió un meme que ha trascendido hasta estos días: “No sé, Ernesto, no sé”.

                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                —Usted piensa en al muerte —le había preguntado el periodista barranquillero.

                                                                                                                                —Todos los días. A diario. Si fuera que yo supiera que uno sirviera más muerte que vivo te lo juro que sí. Pero imagínate uno enterra’o debajo de la tierra y con esos calores que hacen ahora —respondía mientras se escuchaban pequeñas risas en el fondo del video— Pero no sé, Ernesto, no sé.

                                                                                                                                —¿Cómo le gustaría morirse? —preguntó después.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                —No me gustaría ni de viejo. La esperanza mía es que cuando llegue a viejo ya la ciencia esté avanzada. Claro que sí pinto mi entierro. Bonito. El cajón allá en el medio, los gamines vendiendo chicle, los otros vendiendo gaseosa o pastelito, la viuda con pastilla pa’ que no llore porque ya tiene plata, pero no hablemos de eso.

                                                                                                                                —¿La viuda y cuántas más? —insistió McCausland.

                                                                                                                                —Póngale una docena.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                La fama también pasaba por haberse acostado con cerca de 400 mujeres, según lo dice Sánchez Baute en su texto. Hoy en día siguen saliendo personas que aseveran ser sus hijos, pero él solo reconoció a 18, los que le heredaron el lunar detrás de la oreja. Aún, diez años después de muerto, le adjudican poderes misteriosos. Su fecha de nacimiento en el chanche que algunas casas de apuestas han preferido vetar o su estatua en Valledupar que supuestamente tiene el poder de devolver la fertilidad a las mujeres. Diomedes es cacique, artista y mito, a la vez.

                                                                                                                                Diomedes y La Muerte (versión restaurada y extendida)

                                                                                                                                Puede leer también: “De por vida”, un álbum de relatos de Doble Porción

                                                                                                                                Por Alberto González Martínez

                                                                                                                                Vallenato formado en la Universidad de Antioquia. Escribe sobre música, cine y demás temas culturales.albertosartreagonzalez@elespectador.com
                                                                                                                                Ver todas las noticias
                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
                                                                                                                                Aceptar