Édgar Negret y su legado desconocido
La muestra, que celebra los 100 años de su natalicio, sorprende al público con facetas poco exploradas del artista, como su dominio de lo figurativo.
Édgar Negret es uno de los artistas colombianos más importantes del siglo XX.
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Édgar Negret es uno de los artistas colombianos más importantes del siglo XX.
Al revisar la historiografía sobre él se lee que su obra plástica estuvo enfocada en la abstracción y la escultura y que en los años 60 ganó el premio David E. Bright a la escultura en la Bienal de Venecia.
De este payanés se ha dicho casi todo desde que Marta Traba consolidó la crítica de arte en Colombia, pero la Casa Museo Luis Eduardo Ayerbe, de la mano de la Fundación Universitaria de Popayán y el historiador Óscar Esteban Hernández, presentan al público un lado desconocido del artista.
“Negret como persona tuvo muchas facetas que de pronto no fueron exploradas ante el boom de su imagen como artista moderno”, dice Hernández, curador de la exposición virtual Negret, legado desconocido. (Aquí puede acceder a ella: https://casamuseoayerbe.co/negret-legado-desconocido/)
Esta muestra se trabaja desde 2019, pues este 2020 se celebran cien años del natalicio de Negret.
Luis Eduardo Ayerbe, fundador del Museo, y el historiador encontraron en la colección de la familia del artista unas acuarelas que pintó en los años 40, cuando estudiaba en la Academia de Bellas Artes de Cali.
De esa época se conocen los modelos del cuerpo humano que trabajó, pero no tanto estas piezas en las que plasmó temas figurativos y costumbristas que le permitieron explorar el color, la forma y la composición.
“Es curioso que a través de una temática como la costumbrista un artista moderno haya logrado esa revolución estética que todos le reconocemos y atribuimos”, reflexiona Hernández.
De estas obras de la colección familiar, que por primera vez son presentadas al público, los organizadores de la muestra presentan otras facetas no muy conocidas del escultor, como su religiosidad y su vínculo permanente con Popayán.
Édgar Negret perteneció a la generación de artistas que durante los años 60 se caracterizaron por estar en contra de las instituciones y de la religión. Sin embargo, su espiritualidad influenció su búsqueda estética. (Puede leer: “Guerreros Siglo XXI”, la primera exposición digital del Meta)
“Las columnas salomónicas y los altares barrocos de las iglesias de Popayán, en particular del Templo del Carmen, se ven reflejados en sus obras”, enfatiza el historiador.
Otro aspecto de la revisión historiográfica que propone Negret, legado desconocido es la relación del artista con su ciudad natal.
Según Óscar Hernández, los catálogos artísticos lo asocian con lo non plus ultra de la vanguardia internacional, pero él asegura que para entender la obra de Negret es necesario tener “el texto de Popayán abierto”.
Por eso, esta exposición virtual va en contra de lo que generalmente recomienda la museología y, en vez de presentar pequeñas fichas técnicas y uno que otro texto (porque se dice que la gente no lee), ofrecen una lección histórica, social y política que presentan por medio de largos pasajes, pocas imágenes y ningún video ni formato 3D.
La escasa publicación de imágenes y el pequeño formato de estas se debe, principalmente, a temas de derechos de autor y al interés de presentar obras no conocidas o, por lo menos, no las que circulan en las publicaciones tradicionales de historia del arte.
El largo despliegue textual es importante porque muchas veces pasan de generación en generación los conceptos de la historia del arte que se escribió el siglo pasado y porque, con frecuencia, un artista es leído desligado de su contexto. (Lea: El arte vivo de Negret)
Pero no hay que olvidar que el historiador debe ser un profesional crítico que, ahora más que nunca, debe enfocar sus esfuerzos en revaluar esos discursos hegemónicos sobre el arte en Colombia.
Es así como Hernández, sin quitarle méritos ni faltarle al respeto a Traba, propone una nueva lectura honesta, seria y estudiada de Édgar Negret partiendo del archivo familiar, para mostrar a un artista que, a pesar de ser considerado moderno, “fue un moderno bastante aislado, un moderno que estuvo en el exterior y volvió a conectarse con Colombia, que nunca se desligó de Popayán y por eso fundó en esa ciudad un museo (Museo Negret e Iberoamericano de Arte Moderno de Popayán) en 1985”.
Negret, legado desconocido fue pensada para presentarla físicamente en el Museo Luis Eduardo Ayerbe, cuya sede es la casa que fue de Julio Arboleda Pombo, conocido como el “poeta soldado”; y aunque la pandemia los obligó a cerrar puertas, encontraron la solución en el formato digital, que les ha permitido exponer cómo Édgar Negret, por medio del manejo de manejo de la forma y el color, logró convertirse en uno de los más importantes artistas abstractos.