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Esta entrevista tiene dos partes. En la primera habla Luis Fernando Arias, quien habla de su paso por Argentina, su gusto por el rap y cómo de a poco fue conociendo el mundo de las drogas y el licor, mundo del que salió con la ayuda de su familia y con terapias a las que aún recurre. Habla, además, de la influencia que el rap tiene en su vida.
Hablemos primero de Luis…
Muchas gracias por la invitación. Yo siempre agradecido de poder expresarme. Expresar lo que hay detrás de Estiwar G y que la gente sepa los trasfondos, a veces vemos lo que hay delante, pero no sabemos la profundidad de los mensajes.
¿Cómo fue su infancia?
Yo tuve una muy buena infancia, pero fue una infancia como muy variada. Nací en Cartagena y a los tres años fui a Buenos Aires con mi mamá. Mi mamá, que médico pediatra, viajó a Argentina a hacer una especialización.
En Argentina hay una crisis en el 2001 y nos vinimos para Bogotá. Entonces tengo como esas mezclas extrañas de ser costeño, de tener una niñez en Buenos Aires y llegar a Bogotá, la mayor parte de mi vida ha sido en Bogotá. Por eso represento a tanto Bogotá, por eso quiero tanto a Bogotá y siempre que puedo la hago quedar bien parada, porque es una ciudad con la que muchos no se sienten identificados, entonces parte de Estiwar G es representar a la ciudad que no muchos quieren representar.
Su gusto por el rap...
Yo escucho rap por un grupo que se llama Gorillaz, que eso no es rap estricto. Fue a los 13 años. Mi mamá me compró un CD pirateado en el puente peatonal del Éxito de la calle 80.
Yo venía de escuchar rock y pop en Argentina, pero escucho hip hop para mí fue impactante. Después empiezo a escuchar rap en español, Tres Coronas; El Mexicano, fue algo brutal y me identifiqué. Y en ese camino empiezo a hacer grafiti.
Me intereso mucho por eso. Compro las latas y empiezo a pintar por ahí a los 14 años. Y empiezo a pintar con parceros del barrio Modelo y San Fernando. Y luego empiezo a grabar rap.
Teníamos un grupo que se llama Drink Team. Sacamos el primer CD con 23 canciones, en ese tiempo y me gusta aprovechar hasta lo último pedazo del CD. Inclusive eso está YouTube. Y cuando empecé a rapear y a grafitear, me hacía llamar Siri Lord.
¿Ha dejado de lado su trabajo en la música?
Se ha apagado un poco por el éxito que ha tenido Estiwar G, pero ese lado musical sigue vivo dentro de mi corazón. Me volqué mucho a la parte de los videos y los guiones y descuidé un poco lo otro, pero voy a retomar ese camino.
Vea la versión en video de esta entrevista con Luis Fernando Arias, quien interpreta a Estiwar G
¿Cuáles son sus influencias musicales?
Tres Coronas, La Etnia, Gotas de rap, Clan Hueso duro, pero siempre me gustó también demasiado el rap español, Violadores del Verso, Nach, SFDK. CPV, el Club de los Poetas violentos.
Pero siempre escuchado otras cosas. No solo me restringió el rap. Tengo familia costeña, fui criado con vallenato, mi mamá es amante, Celia Cruz, con merengue. Siempre fue como esa mezcla
¿Ha sentido que Estiwar G lo invade?
Es complicado porque es mi único personaje. Yo no estudié actuación y no tengo varios personajes, Estiwar es el único y su personalidad es fuerte, estrambótica y yo soy muy reservado, pero no puede existir Luis sin Estiwar, ni Estiwar sin Luis. Es duro porque a veces lo hala a uno.
Si hay algo que lo haló de la calle, fueron sus adiciones al licor y a las drogas. ¿Cómo empezó eso?
Yo siempre estuve en contacto con el trago desde pequeño. Yo pienso que también son algunas cargas genéticas. Yo vengo de familia costeña y en la costa se toma mucho, son muy fiesteros y a mí desde pequeño me gustaba el sabor del trago.
Luego en Argentina probé la Sidra. Antes era como una gaseosita con alcohol, un vino, un espumoso. Yo lo tomaba y me sentí a feliz. Y eso se va escalando y uno no se da ni cuenta.
Luego a los 15 años empecé a probar una amplia gama de sustancias psicoactivas. Hermana, tú no te das cuenta, pero llega un punto en que estas en el fondo y ves el piso y ves tu alrededor y dices: qué ha pasado con mis amigos, qué ha pasado con mi familia, qué ha pasado con mis relaciones, qué ha pasado con mis proyectos de la música, qué ha pasado con muchas cosas que se ven deterioradas.
Hay momentos en la vida en los que es bueno golpearse para darse cuenta y tomar decisiones, y tomar acciones. Los excesos son destructivos.
El mundo de las adicciones es complejo. Yo no te puedo decir: Dios mío, estoy liberado. Esto es una montaña rusa, mi hermano. Hay días buenos y malos. Es una lucha constante contra ti mismo. Yo digo que mis mayores batallas, mis mayores guerras, son conmigo en la cabeza.
¿Cómo lucha contra esas adicciones?
Yo he visitado a los psicólogos que no imagina, he estado en centros de reeducación, he estado en terapias. Y todo eso me ha servido mucho, pero más que eso se sale adelante con Dios familia. Yo pienso que es eso.
Y este medio es un medio complicadísimo. Yo en este momento trato de evitar que la reunión, que la fiesta, que no sé qué, porque sé que una cosa lleva a la otra. Soy una persona que me gusta estar en mi casa y compartir con m familia. Mi esposa, La Mona, mi hija, Camila, ellas son mi polo a tierra. Y me hacen ir con la mirada hacia adelante.
¿Usted siente que tocó fondo con sus adicciones?
Claro, yo toqué fondo. Y es bueno tocar fondo para darse cuenta de cómo es el piso, es bueno conocer el infierno. El infierno es degradación social, el infierno es vender tu ropa, el infierno es dormir en una banca y amanecer.
Yo siempre he dicho que la cosa más deprimente es salir de un lugar en el que farrió toda la noche y salir y ver el cielo azul. Para mí eso es parte del infierno. Cuando pasó eso algo tocó mi corazón y entendí que algo tenía que cambiar en mi vida.
Su adicción con las drogas
Yo le puedo decir que yo no consumí heroína, no consumí bazuco, sí lo probé, pero yo veía que los pelaos de mi entorno que consumían bazuco estaban fuera de circulación a los dos tres meses. Sucedieron procesos de degradación muy rápido, entonces siempre le tuve respeto a esa droga.
De resto yo probé el trip, queta, tusi, y muchísimas cosas. Lo más fuerte que probé, fue el pegante lo que llamamos el Gal, el pegante es algo que lo vuelve loco y le cambia su percepción del mundo de una forma fuerte y lo deshabilita rápido. Es muy peligroso.
Su adicción al alcohol
Es durísimo luchar con esa droga porque lo estás evitando y el vecino te invita a una fiesta. Estás luchando con el alcohol y entras a una tienda a comprar cualquier cosa están exhibidas las botellas. Las ves de frente. No es como una droga que tienes que ir a buscarla, sino que el alcohol es una droga legalmente aceptada. Luchar con el alcohol es de las cosas más fuertes que existe. Mi mamá ha sido también fundamental para uno mantenerme por la línea. Es también mi polo a tierra.
¿De qué le ha servido la fama?
Yo no soy una persona que guste de la fama como tal. Tiene sus ventajas y sus cosas buenas, pero si una persona tiene problemas y se vuelve famosa, esos problemas van a aumentar,
Si usted es famoso y tiene problemas, no crea que los problemas se le van a solucionar por ser famoso, los problemas antes van a ser más difícil controlarlos porque usted va a ser una persona que está en el lente del público. Lo van a estar juzgando.
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En esta segunda parte hablamos con Estiwar G. Habla de su origen propio, del Toxitour, de su paso por MasterChef y de cómo, a pesar de todo, Estiwy se entromete en la vida de Luis.
¿Cómo nace Estiwar G?
Estiwar G nace en la calle del barrio 7 de agosto. Nace en TikTok en tiempo de pandemia. Le hablo del año 1021, mes de mayo, para ser más preciso. Mi jermu (mujer) me dice: descargue TikTok, que a usted le da a tramar.
Y yo…uy no, es TikTok, puros niños bailando puras bobas ¿Para qué descargo eso? Descargo TikTok y me quedo ahí pegado días. Viendo un video tras otro y descubro que hay pelaos de la calle que tienen ahí su espacio para expresarse y yo dije tengo que aprovechar esto, tengo que aprovechar esto para mostrar la vida de nosotros en la calle, la vida de nosotros los ñeros y representarlos en una plataforma. Así nace Estiwar G.
¿Qué es ser un ñero?
Ser un ñero es una persona que aprendió en la calle, que tiene muchos aprendizajes de la calle. Un ñero es un pana, un compañero, una persona que no lo va a dejar morir, como dice uno en la calle. Un ñero es alguien que sabe aprender de las cosas negativas que le han pasado en la vida y de las circunstancias adversas de la calle, y que le trama expresarse así, con palabras estrambóticas, que se inventa palabras, que tiene creatividad para el rebusque. Eso es un ñero.
¿Cuál es la enseñanza más valiosa que le ha dejado la calle?
La enseñanza más valiosa que me ha dejado la calle es que no importa lo bajo que hayas caído, no importa lo mal que hayas estado, no importa los errores que hayas cometido, siempre hay una oportunidad para salir adelante. Esa es la enseñanza más valiosa de la calle.
Y también que las apariencias engañan, que a veces por ver una persona que se expresa de cierta manera o que se viste de cierta manera, uno juzga, pero detrás de esas personas hay empresarios, hay artistas, hay muchas cosas valiosas.
El origen del Toxitour
Yo he sido una persona que, desde pequeño, desde chinga me tramó comer en la calle. Entonces yo creo que la tripa está entrenada, pero ya de adulto uno es consciente de que debe cuidarse. Y por ejemplo, cuando yo hago un Toxitour, que es el recorrido que yo hago de comida callejera, suelo ir comer poquito. Como un pajarito Porque si me como todo eso se me descontrola el Magdalena.
Sí me he indigestado, sobre todo en los primeros Toxitoures que eso era la fiebre y que me comía todo y al día siguiente paila ‘Liquid Paper’.
Siempre les digo también a las personas tenga mucho cuidado porque eso no debe ser una alimentación diaria, ni debe ser una alimentación de almuerzo, comida, cena. Hay que entender que por necesidad muchas personas que almuerzan una empanada o una papa rellena, un pastel, por necesidad, por afán, pero no debería ser considerado una dieta diaria ni sana.
Su paso por MasterChef Celebrity
MasterChef fue un punto crucial en la vida de Estiwar G porque hace un punto de inflexión. Desde el día que me dieron la oportunidad, me dijeron, ¿quiere participar?
Yo acepté de una. Obviamente uno lo piensa y uno como que lo duda y el miedo sale a flote, pero mi esposa me dijo: toca de ‘One Direction’.
Entonces entro a MasterChef y veo a todas esas famosas y famosos. Gente que uno pilla en la televisión, ahora verlos así de cerca para mí fue muy impactante. Fue como un sueño así muy bacano. La cogía de mis compañeros fue muy grande y fueron muy buenas personas. No tengo quejas de ellos.
A veces en la calle uno se excluye, uno mismo, uno se limita a uno mismo. Entonces parte del pensamiento que yo llevaba era: Estos manes todos riquillos, y estas hembras refinadas, no van a gustar de un man de calle.
Entonces uno no iba con esas preconcepciones de que lo van a tratar uno mal, pero no, todo lo contrario. Me ha ayudado bastante. Tatán Mejía fue de las primeras personas con las que yo hablé y me daba unos buenísimos consejos para yo desempeñarme allá y me dijo: esto es una competencia, pero no haga que la competencia es a que la peor parte de usted. Disfrute esto y enséñele a Colombia que en la calle hay muy buenas cosas. Ahí me doy cuenta de que tengo el peso de la gente de la calle.
Y la mayor enseñanza que tuvimos allá fue lo mismo que uno aprende en la calle lo aprendí en la televisión. A veces las apariencias engañan y no todo es como se ve. A veces se juzga a las personas, pero no conoce el corazón y en MasterChef conocí muy buenas personas, tanto delante de las cámaras, como detrás. Los camarógrafos, el sonidista, la señora de los tintos. A todos los aprecié mucho y fueron hermanos.
¿Cuáles son los barrios que frecuenta o frecuenta?
Yo a Bogotá me la he patinado. Soy una persona que me gusta caminar, me gusta andar en bicicleta, me gusta analizar las calles, estar en contacto con las calles. He vivido en la localidad de Kennedy, lo llevo en el corazón, por allá por Banderas, por allá por El Amparo, por Corabastos, me gusta.
El centro también me lo parcho mucho: El Septimazo, las Pulgas, Barrios Unidos, Siete de Agosto, San Fernando, Modelo. Todo ese sector es el sector es como de mi incidencia.
Yo siempre he dicho hay que equilibrar. Hay que conocer de todo un poco. Uno a veces siendo el sur se limita a su pedazo, no conoce el resto de la ciudad y uno a veces siendo el norte, se limita su pedazo y no conoce las realidades que tiene la ciudad.
Bogotá es el reflejo de Colombia y Colombia es un país que tiene relieves tanto de montañas como en la parte económica. Hay muchos contrastes. Las vías son totalmente diferentes en un punto a otro. Entender las diferencias culturales, sociales, de nuestros barrios nos enseña a también entender la forma de vivir a otros, a ser un poco más comprensivos y a ser personas empáticas que se ponen en el zapato de los otros.
¿De dónde nace el nombre Estiwar G?
Los nombres de los personajes de la calle casi siempre son anglicismos. No sé si lo estoy diciendo bien, pero son adaptados de los anglosajones, de Estados Unidos, de los ingleses, entonces, dije vamos a ponernos un nombre ñanga. Estaba: Esteven, puede ser; Jonathan, tal vez; Esneider, ese estaba re pandilla, ¿no? Y llega Estiwar, y dije, este está Regrosnic, toca usarlo
Pillaba a todos los parceros que se llaman Estiwar en Facebook y unas carátulas que yo dije tengo que representarles a ellos. El G viene de gangster, que es como para creerse uno más malote. Pero yo no hice por eso sino por el apellido, que es Gamboa. Estiwar Gamboa.