Festival Centro, la banda sonora de la estación central
Esta actividad, organizada por la Fundación Gilberto Alzate Avendaño, en Bogotá, tiene una oferta diversa en la que se incluyen más de 50 bandas nacionales y extranjeras en cuatro escenarios del centro de la ciudad.
El Espectador
El Festival Centro es un pretexto para recorrer el eje cultural de Bogotá ambientando el periplo con una banda sonora diversa. El evento surgió hace nueve años, cuando la Fundación Gilberto Alzate Avendaño (FUGA) identificó el número significativos de turistas y bogotanos interesados en pasear por el Centro Histórico de la capital, pero sin la suficiente oferta cultural para mantener su motivación en el sector. Con ese diagnóstico sólido y estructurado se comenzó a diseñar esta propuesta, que busca mover la música durante la primera época del año, meses en los que la actividad artística está, con reducidas excepciones, en receso.
El primer Festival Centro se llevó a cabo en 2010 y en ese entonces las presentaciones de los artistas estaban concentradas en los dos escenarios de la FUGA: el Auditorio, con capacidad para 430 personas, y El Muelle, en el que se alcanzaba a albergar a 120 personas. Durante la tercera edición (2012), se sumaron dos tarimas adicionales: el Centro Colombo Americano (sede centro) y la Biblioteca Luis Ángel Arango, con el fin de darle más impacto a la programación y aumentar la diversidad del certamen, que en ese entonces cautivaba a las audiencias durante las primeras semanas del año.
Para su edición correspondiente al 2013, por ejemplo, los 35 artistas convocados por el encuentro realizaron sus conciertos en estos escenarios, pero además la música también llegó a rotar en el Centro Cultural Gabriel García Márquez y en el Centro Cultural de la Universidad de los Andes. Este crecimiento tan visible como sonoro tiene toda la intención de convertirlo en el primer evento masivo y musical del año para la capital, y de ahí que ese haya sido uno de los lemas más comentados.
Un año más tarde (2014) se diseñó una programación ardua, tal y como si se tratara de una exigente maratón de experiencias musicales. A partir de entonces se estructuraron presentaciones en los diversos escenarios a partir de las 3:00 p.m., con conciertos continuos de una hora de duración por cada artista hasta las 10:00 p.m. Plazas múltiples, propuestas innovadoras, músicos de todas las ramas y asistentes sin estereotipos comenzaron a consolidar este particular encuentro.
Desde su fundación, el certamen reúne artistas nacionales y extranjeros en diferentes géneros, como el rock, el pop, el folclor, la electrónica, el jazz y muchas de las nuevas tendencias sobre las manifestaciones tradicionales del Pacífico y del Caribe en Colombia. La intencionalidad del Festival Centro es hacerle un aporte cultural y artístico a la revitalización del centro de Bogotá, a través de una pluralidad en su oferta musical y con una programación artística para todos los gustos. Por eso, para esta novena edición, que se realizará a partir del 7 de febrero y culminará su programación el 11 del mismo mes, se podrá escuchar desde el indie rock de bandas foráneas, pasando por aires tradicionales de Colombia, hasta la apropiación pertinente de llevar a cabo espectáculos musicales.
“La Fundación Gilberto Alzate Avendaño quiere apostar por el festival como un escenario de inclusión de todos los públicos y géneros, buscando hacer de este una propuesta artística no sólo innovadora, sino viable, en el cual recree un espacio donde se respeten las diferencias y se construya una identidad propia”, comentaron los voceros de la entidad organizadora de este encuentro cultural, que por varios años estructuró su programación en franjas.
De ese experimento, que dividía el cartel de invitados en segmentos como Franja Familiar, Franja Central y Franja Infantil, tan sólo permanece la última para la novena edición del Festival Centro. La denominada Franja Infantil está compuesta por diversos grupos musicales entre nacionales y extranjeros con propuestas dirigidas a niños y adolescentes. Estos conciertos, distribuidos a lo largo de los cinco años de duración de la actividad, se caracterizan por estar pensados para complacer a la denominada primera infancia, con actividades de carácter musical diseñadas para madres gestantes, lactantes y bebes.
Además de la oferta musical, el evento incluye una atractiva programación académica llamada Hablemos de música, en la que brillarán las ideas de personajes como Julio Ernesto Estrada, de Fruko y sus Tesos y Latin Brothers.
Los asistentes este 2018 tendrán a su disposición espacios como el Teatro La Candelaria, el Centro Cultural Gabriel García Márquez, el auditorio de la FUGA y La Milla, en el antiguo Bronx, lo que representa una de las novedades más importantes.
Aunque ha sido tradicional en el Festival no repetir artistas, este año habrá excepciones. El tercer día está dedicado a los clásicos, así que tres bandas colombianas tendrán suficientes razones para festejar. La primera de ellas es Velandia y la Tigra, que aprovechará su paso por el auditorio de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño para celebrar los 10 años de su primer disco, Once rasqas, que motivó la creación de personajes fantásticos interpretados por la banda y un burro que hacía de cantante.
Los siguientes son dos clásicos rockeros que han sobrevivido y revivido al pasar de los años. Morfonia y Estados Alterados, que cumplen 25 y 30 años respectivamente, estarán en el Teatro La Candelaria. El primero, presentando el nuevo video de Rinoceronte, uno de los temas que han estrenado tras su regreso en 2014. El segundo, conmemorando tres décadas de historia, con un concierto que le dedicarán completamente a su primer disco, Estados Alterados.
Más de 50 bandas colombianas y extranjeras, entre las que se incluyen Bolena Prada, Jacana Jacana, Son Palenque, Las Malas Amistades, Systema Solar y Sonido Gallo Negro, hacen parte del Festival Centro, un evento que propone un recorrido con sonidos diversos y una banda sonora muy especial.
El Festival Centro es un pretexto para recorrer el eje cultural de Bogotá ambientando el periplo con una banda sonora diversa. El evento surgió hace nueve años, cuando la Fundación Gilberto Alzate Avendaño (FUGA) identificó el número significativos de turistas y bogotanos interesados en pasear por el Centro Histórico de la capital, pero sin la suficiente oferta cultural para mantener su motivación en el sector. Con ese diagnóstico sólido y estructurado se comenzó a diseñar esta propuesta, que busca mover la música durante la primera época del año, meses en los que la actividad artística está, con reducidas excepciones, en receso.
El primer Festival Centro se llevó a cabo en 2010 y en ese entonces las presentaciones de los artistas estaban concentradas en los dos escenarios de la FUGA: el Auditorio, con capacidad para 430 personas, y El Muelle, en el que se alcanzaba a albergar a 120 personas. Durante la tercera edición (2012), se sumaron dos tarimas adicionales: el Centro Colombo Americano (sede centro) y la Biblioteca Luis Ángel Arango, con el fin de darle más impacto a la programación y aumentar la diversidad del certamen, que en ese entonces cautivaba a las audiencias durante las primeras semanas del año.
Para su edición correspondiente al 2013, por ejemplo, los 35 artistas convocados por el encuentro realizaron sus conciertos en estos escenarios, pero además la música también llegó a rotar en el Centro Cultural Gabriel García Márquez y en el Centro Cultural de la Universidad de los Andes. Este crecimiento tan visible como sonoro tiene toda la intención de convertirlo en el primer evento masivo y musical del año para la capital, y de ahí que ese haya sido uno de los lemas más comentados.
Un año más tarde (2014) se diseñó una programación ardua, tal y como si se tratara de una exigente maratón de experiencias musicales. A partir de entonces se estructuraron presentaciones en los diversos escenarios a partir de las 3:00 p.m., con conciertos continuos de una hora de duración por cada artista hasta las 10:00 p.m. Plazas múltiples, propuestas innovadoras, músicos de todas las ramas y asistentes sin estereotipos comenzaron a consolidar este particular encuentro.
Desde su fundación, el certamen reúne artistas nacionales y extranjeros en diferentes géneros, como el rock, el pop, el folclor, la electrónica, el jazz y muchas de las nuevas tendencias sobre las manifestaciones tradicionales del Pacífico y del Caribe en Colombia. La intencionalidad del Festival Centro es hacerle un aporte cultural y artístico a la revitalización del centro de Bogotá, a través de una pluralidad en su oferta musical y con una programación artística para todos los gustos. Por eso, para esta novena edición, que se realizará a partir del 7 de febrero y culminará su programación el 11 del mismo mes, se podrá escuchar desde el indie rock de bandas foráneas, pasando por aires tradicionales de Colombia, hasta la apropiación pertinente de llevar a cabo espectáculos musicales.
“La Fundación Gilberto Alzate Avendaño quiere apostar por el festival como un escenario de inclusión de todos los públicos y géneros, buscando hacer de este una propuesta artística no sólo innovadora, sino viable, en el cual recree un espacio donde se respeten las diferencias y se construya una identidad propia”, comentaron los voceros de la entidad organizadora de este encuentro cultural, que por varios años estructuró su programación en franjas.
De ese experimento, que dividía el cartel de invitados en segmentos como Franja Familiar, Franja Central y Franja Infantil, tan sólo permanece la última para la novena edición del Festival Centro. La denominada Franja Infantil está compuesta por diversos grupos musicales entre nacionales y extranjeros con propuestas dirigidas a niños y adolescentes. Estos conciertos, distribuidos a lo largo de los cinco años de duración de la actividad, se caracterizan por estar pensados para complacer a la denominada primera infancia, con actividades de carácter musical diseñadas para madres gestantes, lactantes y bebes.
Además de la oferta musical, el evento incluye una atractiva programación académica llamada Hablemos de música, en la que brillarán las ideas de personajes como Julio Ernesto Estrada, de Fruko y sus Tesos y Latin Brothers.
Los asistentes este 2018 tendrán a su disposición espacios como el Teatro La Candelaria, el Centro Cultural Gabriel García Márquez, el auditorio de la FUGA y La Milla, en el antiguo Bronx, lo que representa una de las novedades más importantes.
Aunque ha sido tradicional en el Festival no repetir artistas, este año habrá excepciones. El tercer día está dedicado a los clásicos, así que tres bandas colombianas tendrán suficientes razones para festejar. La primera de ellas es Velandia y la Tigra, que aprovechará su paso por el auditorio de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño para celebrar los 10 años de su primer disco, Once rasqas, que motivó la creación de personajes fantásticos interpretados por la banda y un burro que hacía de cantante.
Los siguientes son dos clásicos rockeros que han sobrevivido y revivido al pasar de los años. Morfonia y Estados Alterados, que cumplen 25 y 30 años respectivamente, estarán en el Teatro La Candelaria. El primero, presentando el nuevo video de Rinoceronte, uno de los temas que han estrenado tras su regreso en 2014. El segundo, conmemorando tres décadas de historia, con un concierto que le dedicarán completamente a su primer disco, Estados Alterados.
Más de 50 bandas colombianas y extranjeras, entre las que se incluyen Bolena Prada, Jacana Jacana, Son Palenque, Las Malas Amistades, Systema Solar y Sonido Gallo Negro, hacen parte del Festival Centro, un evento que propone un recorrido con sonidos diversos y una banda sonora muy especial.