La firma Schiaparelli abrió este lunes la pasarela de la Semana de la Moda de París 2023 con una colección llena de vestidos con figuras falsas de taxidermia con cabezas de lobo o de león, lucidas entre otras por las modelos Naomi Campbell e Irina Shayk.
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Las figuras fueron fabricadas a mano a partir de espuma y resina, principalmente, y prometen convertirse en una silueta muy viral después de que la empresaria e influenciadora Kylie Jenner, invitada al desfile, acudiera con el vestido con cabeza de león, adelantándose incluso a la pasarela.
“LA BELLA Y LA BESTIA. Gracias @danielroseberry y @schiaparelli por una mañana tan especial”, escribió Kylie Jenner en su cuenta de Instagram. “Me encantó usar esta creación de arte falso construida a mano con materiales hechos por el hombre. Hermoso”.
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En esta temporada, el diseñador se ha centrado menos en la espectacular bisutería de la marca y ha puesto el foco en el surrealismo en las prendas y la fina barrera que separa la realidad de la ficción.
¿Es realmente una cabeza de león?
Muchas organizaciones en pro de los derechos de los animales, se cuestionaron si esta era en realidad era una cabeza de león. La respuesta es no. Lo mismo ocurre con los adornos que componen una falda, que parecen lentejuelas y son piezas de madera. El terciopelo cambia de color según la luz con la que se mire, como si fueran las alas de una mariposa.
En el desfile, se destacó además la silueta elegida por el creador, que despoja lo rectilíneo y aboga por una cintura estrecha y una cadera muy marcada y redondeada, como en un rígido traje de chaqueta que parece más bien un vestido de noche.