Gustavo Cerati cumple 55 años
El exlíder de Soda Stereo sigue hospitalizado tras el accidente cardiovascular que sufrió en 2010.
David Villafranca / Efe
El 11 de agosto, el músico argentino Gustavo Cerati cumple 55 años, todavía en coma tras el accidente cardiovascular que sufrió en 2010 y que tiene a los fans del exlíder de Soda Stereo en vilo y ansiando su pronta recuperación.
"Supongo que tienen sed", dijo Gustavo Cerati, mientras miraba con malicia al público de Buenos Aires, como si se tuviera que contener para no comerse el escenario a bocados. Era 20 de septiembre de 1997, y Soda Stereo, el grupo que lideraba, decía adiós a sus fans, aunque volvería fugazmente diez años más tarde. Bajaba el telón así una de las bandas más importantes de Argentina y del rock en castellano, y, al mismo tiempo, el talento de Cerati cobraba entonces un nuevo impulso en su esperanzadora carrera en solitario.
Pero la luz se apagó el 15 de mayo de 2010. Tras un concierto en Caracas, Cerati sufrió un accidente cerebro vascular que le dejó en coma. "Son cuatro años de cama, él está muy bien. Si Gustavo sufriera, sería insoportable, pero él realmente está como dormido", contaba su madre Lilian Clark el pasado mayo a la emisora Rock and Pop. (Ver galería Gustavo Cerati: cuarto aniversario del accidente que lo dejó en coma).
"El Sr. D. Gustavo Cerati continúa internado, encontrándose clínica y hemodinámicamente estable, sin complicaciones agudas, manteniendo un buen estado nutricional y sin presentar lesiones por decúbito", decía el frío lenguaje médico del parte difundido por la Clínica Alcla en Buenos Aires, donde se encuentra ingresado desde entonces.
A esa estabilidad se aferran con fe los numerosos fans del cantante de pelo rizado y con voz que "nos advierte la verdad", según el poema que le dedicó otro mito del rock argentino como Luis Alberto Spinetta. El 11 de agosto Cerati cumple 55 años, y la esperanza de que se recupere sigue intacta.
Pasión por Soda
Hace tres décadas, un grupo formado por el bajista Héctor Zeta Bosio, el batería Charly Alberti y el cantante y guitarrista Gustavo Cerati lanzaban su primer disco. Era un 14 de diciembre de 1984, y ese LP homónimo sólo era el primer paso para construir la pasión por Soda Stereo.
Porque el grupo liderado por Cerati fue toda una sensación no sólo en Argentina sino en toda Latinoamérica. Su estilo cercano al post-punk y la "new-wave" e influido por la música anglosajona, con grupos como The Cure o The Police, ensanchó la veta siempre creativa del rock argentino comandado por artistas como Charly García o el mencionado Spinetta.
Abrazado a las sinuosas letras de Cerati, Soda Stereo desprendía un aire de modernidad, de estilo personal, de elegancia. Temas como "Canción animal", "En la ciudad de la furia" o "De música ligera" llevaron a Soda Stereo de gira por países como México, Venezuela, Chile o Colombia.
El "sueño stereo" terminó en 1997, cuando un texto de Cerati titulado "La carta del adiós" anunciaba la separación del grupo. "Cualquiera sabe que es imposible llevar una banda sin cierto nivel de conflicto. Es un frágil equilibrio en la pugna de ideas que muy pocos consiguen mantener por quince años, como nosotros orgullosamente hicimos", aseguraba el cantante.
Desavenencias personales y musicales ponían punto y final a siete discos de estudio como a Soda Stereo, antes de que Cerati continuara con sus proyectos en solitario que ya había iniciado en 1993 con su primer LP "Amor amarillo".
Solo Cerati
"La verdad es que no siento que soy todo lo abierto que debería ser; siento que mi mejor disco todavía no lo he hecho y en esa búsqueda trato de no ponerme zanahorias muy lejanas". Así de inconformista pero sensato se expresaba Cerati en 2006, en medio de la gira de promoción de su cuarto disco sin acompañantes, "Ahí vamos".
Abierto siempre a nuevos desafíos, la trayectoria en solitario del músico se caracterizó por la experimentación y el acercamiento a sonidos quizá alejados de los característicos de Soda Stereo. De los matices hipnóticos de canciones como "Raíz" a los giros electrónicos de canciones como "Karaoke", el músico desplegó toda su creatividad a lo largo de cinco discos. Tanto es así que incluso se atrevió en el álbum "11 episodios sinfónicos" a barnizar con arreglos orquestales algunas de sus canciones más conocidas.
Pero la "sodamanía" quería más, y el grupo se reunió finalmente en 2007, para celebrar diez años de su último concierto. Cerati dijo que era "una suma de situaciones" la que hacían que fuera un "buen momento" para volver a tocar juntos, incluido que a él le gustaría que sus "hijos vieran a Soda Stereo alguna vez".
La gira fue un éxito enorme, con hasta cuatro conciertos en Buenos Aires, además de recitales en México, Estados Unidos o Perú. Después, Cerati todavía publicó en 2009 el disco "Fuerza natural", en cuya gira de presentación sufrió el trágico accidente.
Desde entonces, sus seguidores continúan en vela, esperando su recuperación y demostrándole su incondicional cariño. Recientemente, fue nombrado Ciudadano Ilustre de Buenos Aires, el máximo reconocimiento que otorga la capital argentina. Han pasado más de cuatro años desde su accidente, pero nadie olvida a Cerati, tampoco en Chile, donde 26 músicos del país andino preparan un álbum tributo que llevará por título una frase que más bien parece un deseo: "Me verás volver".
El 11 de agosto, el músico argentino Gustavo Cerati cumple 55 años, todavía en coma tras el accidente cardiovascular que sufrió en 2010 y que tiene a los fans del exlíder de Soda Stereo en vilo y ansiando su pronta recuperación.
"Supongo que tienen sed", dijo Gustavo Cerati, mientras miraba con malicia al público de Buenos Aires, como si se tuviera que contener para no comerse el escenario a bocados. Era 20 de septiembre de 1997, y Soda Stereo, el grupo que lideraba, decía adiós a sus fans, aunque volvería fugazmente diez años más tarde. Bajaba el telón así una de las bandas más importantes de Argentina y del rock en castellano, y, al mismo tiempo, el talento de Cerati cobraba entonces un nuevo impulso en su esperanzadora carrera en solitario.
Pero la luz se apagó el 15 de mayo de 2010. Tras un concierto en Caracas, Cerati sufrió un accidente cerebro vascular que le dejó en coma. "Son cuatro años de cama, él está muy bien. Si Gustavo sufriera, sería insoportable, pero él realmente está como dormido", contaba su madre Lilian Clark el pasado mayo a la emisora Rock and Pop. (Ver galería Gustavo Cerati: cuarto aniversario del accidente que lo dejó en coma).
"El Sr. D. Gustavo Cerati continúa internado, encontrándose clínica y hemodinámicamente estable, sin complicaciones agudas, manteniendo un buen estado nutricional y sin presentar lesiones por decúbito", decía el frío lenguaje médico del parte difundido por la Clínica Alcla en Buenos Aires, donde se encuentra ingresado desde entonces.
A esa estabilidad se aferran con fe los numerosos fans del cantante de pelo rizado y con voz que "nos advierte la verdad", según el poema que le dedicó otro mito del rock argentino como Luis Alberto Spinetta. El 11 de agosto Cerati cumple 55 años, y la esperanza de que se recupere sigue intacta.
Pasión por Soda
Hace tres décadas, un grupo formado por el bajista Héctor Zeta Bosio, el batería Charly Alberti y el cantante y guitarrista Gustavo Cerati lanzaban su primer disco. Era un 14 de diciembre de 1984, y ese LP homónimo sólo era el primer paso para construir la pasión por Soda Stereo.
Porque el grupo liderado por Cerati fue toda una sensación no sólo en Argentina sino en toda Latinoamérica. Su estilo cercano al post-punk y la "new-wave" e influido por la música anglosajona, con grupos como The Cure o The Police, ensanchó la veta siempre creativa del rock argentino comandado por artistas como Charly García o el mencionado Spinetta.
Abrazado a las sinuosas letras de Cerati, Soda Stereo desprendía un aire de modernidad, de estilo personal, de elegancia. Temas como "Canción animal", "En la ciudad de la furia" o "De música ligera" llevaron a Soda Stereo de gira por países como México, Venezuela, Chile o Colombia.
El "sueño stereo" terminó en 1997, cuando un texto de Cerati titulado "La carta del adiós" anunciaba la separación del grupo. "Cualquiera sabe que es imposible llevar una banda sin cierto nivel de conflicto. Es un frágil equilibrio en la pugna de ideas que muy pocos consiguen mantener por quince años, como nosotros orgullosamente hicimos", aseguraba el cantante.
Desavenencias personales y musicales ponían punto y final a siete discos de estudio como a Soda Stereo, antes de que Cerati continuara con sus proyectos en solitario que ya había iniciado en 1993 con su primer LP "Amor amarillo".
Solo Cerati
"La verdad es que no siento que soy todo lo abierto que debería ser; siento que mi mejor disco todavía no lo he hecho y en esa búsqueda trato de no ponerme zanahorias muy lejanas". Así de inconformista pero sensato se expresaba Cerati en 2006, en medio de la gira de promoción de su cuarto disco sin acompañantes, "Ahí vamos".
Abierto siempre a nuevos desafíos, la trayectoria en solitario del músico se caracterizó por la experimentación y el acercamiento a sonidos quizá alejados de los característicos de Soda Stereo. De los matices hipnóticos de canciones como "Raíz" a los giros electrónicos de canciones como "Karaoke", el músico desplegó toda su creatividad a lo largo de cinco discos. Tanto es así que incluso se atrevió en el álbum "11 episodios sinfónicos" a barnizar con arreglos orquestales algunas de sus canciones más conocidas.
Pero la "sodamanía" quería más, y el grupo se reunió finalmente en 2007, para celebrar diez años de su último concierto. Cerati dijo que era "una suma de situaciones" la que hacían que fuera un "buen momento" para volver a tocar juntos, incluido que a él le gustaría que sus "hijos vieran a Soda Stereo alguna vez".
La gira fue un éxito enorme, con hasta cuatro conciertos en Buenos Aires, además de recitales en México, Estados Unidos o Perú. Después, Cerati todavía publicó en 2009 el disco "Fuerza natural", en cuya gira de presentación sufrió el trágico accidente.
Desde entonces, sus seguidores continúan en vela, esperando su recuperación y demostrándole su incondicional cariño. Recientemente, fue nombrado Ciudadano Ilustre de Buenos Aires, el máximo reconocimiento que otorga la capital argentina. Han pasado más de cuatro años desde su accidente, pero nadie olvida a Cerati, tampoco en Chile, donde 26 músicos del país andino preparan un álbum tributo que llevará por título una frase que más bien parece un deseo: "Me verás volver".