La historia del mayordomo que traicionó a Diana de Gales
Paul Burrell, mayordomo de la mujer más fotografiada del mundo, supo, antes que todo el mundo, del sufrimiento que padeció Diana Spencer. La familia real lo llamó "traicionero".
Redacción gente
El documental, "Diana en primera persona", logra contar la historia de Diana Spenser desde una perspectiva inédita. Sorprendente. Si se quiere, perturbadora.
Muchas de las cosas que allí se cuentan, ya se habían esbozado en libros y otros documentales que se han presentado durante los últimos 20 años; sin embargo, jamás se había escuchado a la propia Diana hablar de, entre otras cosas, la crisis de su matrimonio con el Príncipe de Gales, la relación que este sostuvo con Camila Parker o de la bulimia que padeció ante la total indiferencia de Carlos.
El documental, que fue presentado en Colombia por National Geographic, fue elaborado a partir de cintas que la princesa grabó entre 1992 y 1993, durante unas sesiones privadas para mejorar su oratoria.
Las conversaciones grabadas por su profesor de oratoria, Peter Settelen, revelan secretos del entorno de la familia real. Esas grabaciones fueron objeto de una dura batalla legal.
Después del trágico choque en el puente del Alma de la capital francesa que acabó con la vida de Lady Di en 1997, su mayordomo, Paul Burrell, se quedó con las delicadas cintas y con las confidencias de la princesa. No pasó mucho tiempo para que esos secretos dejaran de serlo.
El hermano de Diana, Charles Spencer, inició una batalla legal para recuperarlas, pero al final regresaron a la custodia del hombre que las grabó, Peter Settelen, que las ha vendido a Channel 4 por una cantidad que no ha salido a la luz.
Así las cosas, las grabaciones que son el sustento del documental que fue producido por Tom Jennings, estuvieron durante años en poder del mayordomo de confianza de Diana de Gales. Como Diana, Carlos o los principes William y Harry, Paul Burrel también su historia. Era gay. Diana era la única que sabía ese secreto.
En marzo de este año se supo que Burrel, quien trabajó diez años como mayordomo de Diana, se separó de su esposa (llevaba 32 años de matrimonio, dos hijos resultaron de esa unión) y se casó con Graham Cooper, su amante durante los últimos diez años.
"En la vida hay que ser fiel a uno mismo y, por primera vez en mi vida, puedo sentirme orgulloso al lado de mi marido y decir: 'Esto es lo que soy'", afirmó el exmayordomo, de 58 años, tras el matrimonio, celebrado en el Distrito de los Lagos, en el noroeste de Inglaterra.
Después de la muerte de Diana, Burrel se enfrentó con un sector de la familia Real. "Mi roca", como llamaba Diana a Paul, fue acusado de haberse robado 310 objetos que pertenecieron al Lady Di. Luego fue exonerado por intervención de la Reina Isabel. Siempre sostuvo que su objetivo fue "cuidar" de esos objetos históricos.
Burrel aprovechó la cercanía que tuvo con Diana para convertirse en una especie de ventilador real. Su testimonio sirvió para hablar de una de las tesis que rodea la muerte de muerte de la princesa. ¿Tuvo la monarquía algo que ver con el accidente de Diana?
En su libro, A Royal Dut, Paul reveló una carta que se convirtió en la comidilla de los medios sensacionalistas del Reino Unido. "Están planeando un 'accidente' en mi carro, con fallas de los frenos, para que Carlos pueda casarse", dice la misiva escrita en octubre de 1996, diez meses antes del accidente.
El autor explica las escapadas de Carlos para encontrarse con Camilla Parker-Bowles. "Voy a cenar temprano hoy, Paul", era la clave que le daba el príncipe cuando tenía una cita romántica. Burrell relata que una noche Diana, que estaba de viaje, llamó a su esposo. "Lo siento su alteza, él no está", le respondió. "¿A dónde fue?", preguntó la princesa. "Por favor, su alteza, no me pregunte", respondió el mayordomo. Al otro día Carlos enfurecido, le dijo: "¿Por qué no le dijo que no pudo encontrarme?". "¿Me está pidiendo que mienta, su alteza?", preguntó el sirviente. "Sí, sí. Yo soy el príncipe de Gales y voy a ser rey", respondió Carlos según el libro.
Paul Burrel fue uno de los primeros en referirse a las infidelidades de Diana. En ese libro, habló de un romance de la princesa con el oficial de la marina británica, James Hewitt. Su misión era llevarlo al palacio de Kensington en el baúl del carro.
Esta revelación despertó la furia de William y Harry, hijos de Diana de Gales. En su momento, llamaron al mayordomo "traidor".
En el documental que acaba de estrenarse, Diana habló de otro encuentro amoroso. Se enamoró con 24 años de un hombre que trabajaba en su "entorno", al que los medios británicos han identificado con el guardaespaldas Barry Mannakee.
Aunque Channel 4 dejó fuera del documental emitido algunas de las declaraciones de Diana alrededor de ese asunto, según la transcripción de las cintas publicada por el tabloide "The Sun" la princesa asegura que estuvo "profundamente enamorada" de ese hombre.
Mannakee fue apartado del servicio en el palacio de Kensington en 1986 y murió meses después en un accidente de motocicleta.
"Carlos me dijo: 'Se ha matado en un accidente de moto'. Debo decir que ese fue el mayor golpe de mi vida", relata Diana, según la transcripción de unas cintas que ya se habían visto en Estados Unidos, aunque no en el Reino Unido.
El documental, "Diana en primera persona", logra contar la historia de Diana Spenser desde una perspectiva inédita. Sorprendente. Si se quiere, perturbadora.
Muchas de las cosas que allí se cuentan, ya se habían esbozado en libros y otros documentales que se han presentado durante los últimos 20 años; sin embargo, jamás se había escuchado a la propia Diana hablar de, entre otras cosas, la crisis de su matrimonio con el Príncipe de Gales, la relación que este sostuvo con Camila Parker o de la bulimia que padeció ante la total indiferencia de Carlos.
El documental, que fue presentado en Colombia por National Geographic, fue elaborado a partir de cintas que la princesa grabó entre 1992 y 1993, durante unas sesiones privadas para mejorar su oratoria.
Las conversaciones grabadas por su profesor de oratoria, Peter Settelen, revelan secretos del entorno de la familia real. Esas grabaciones fueron objeto de una dura batalla legal.
Después del trágico choque en el puente del Alma de la capital francesa que acabó con la vida de Lady Di en 1997, su mayordomo, Paul Burrell, se quedó con las delicadas cintas y con las confidencias de la princesa. No pasó mucho tiempo para que esos secretos dejaran de serlo.
El hermano de Diana, Charles Spencer, inició una batalla legal para recuperarlas, pero al final regresaron a la custodia del hombre que las grabó, Peter Settelen, que las ha vendido a Channel 4 por una cantidad que no ha salido a la luz.
Así las cosas, las grabaciones que son el sustento del documental que fue producido por Tom Jennings, estuvieron durante años en poder del mayordomo de confianza de Diana de Gales. Como Diana, Carlos o los principes William y Harry, Paul Burrel también su historia. Era gay. Diana era la única que sabía ese secreto.
En marzo de este año se supo que Burrel, quien trabajó diez años como mayordomo de Diana, se separó de su esposa (llevaba 32 años de matrimonio, dos hijos resultaron de esa unión) y se casó con Graham Cooper, su amante durante los últimos diez años.
"En la vida hay que ser fiel a uno mismo y, por primera vez en mi vida, puedo sentirme orgulloso al lado de mi marido y decir: 'Esto es lo que soy'", afirmó el exmayordomo, de 58 años, tras el matrimonio, celebrado en el Distrito de los Lagos, en el noroeste de Inglaterra.
Después de la muerte de Diana, Burrel se enfrentó con un sector de la familia Real. "Mi roca", como llamaba Diana a Paul, fue acusado de haberse robado 310 objetos que pertenecieron al Lady Di. Luego fue exonerado por intervención de la Reina Isabel. Siempre sostuvo que su objetivo fue "cuidar" de esos objetos históricos.
Burrel aprovechó la cercanía que tuvo con Diana para convertirse en una especie de ventilador real. Su testimonio sirvió para hablar de una de las tesis que rodea la muerte de muerte de la princesa. ¿Tuvo la monarquía algo que ver con el accidente de Diana?
En su libro, A Royal Dut, Paul reveló una carta que se convirtió en la comidilla de los medios sensacionalistas del Reino Unido. "Están planeando un 'accidente' en mi carro, con fallas de los frenos, para que Carlos pueda casarse", dice la misiva escrita en octubre de 1996, diez meses antes del accidente.
El autor explica las escapadas de Carlos para encontrarse con Camilla Parker-Bowles. "Voy a cenar temprano hoy, Paul", era la clave que le daba el príncipe cuando tenía una cita romántica. Burrell relata que una noche Diana, que estaba de viaje, llamó a su esposo. "Lo siento su alteza, él no está", le respondió. "¿A dónde fue?", preguntó la princesa. "Por favor, su alteza, no me pregunte", respondió el mayordomo. Al otro día Carlos enfurecido, le dijo: "¿Por qué no le dijo que no pudo encontrarme?". "¿Me está pidiendo que mienta, su alteza?", preguntó el sirviente. "Sí, sí. Yo soy el príncipe de Gales y voy a ser rey", respondió Carlos según el libro.
Paul Burrel fue uno de los primeros en referirse a las infidelidades de Diana. En ese libro, habló de un romance de la princesa con el oficial de la marina británica, James Hewitt. Su misión era llevarlo al palacio de Kensington en el baúl del carro.
Esta revelación despertó la furia de William y Harry, hijos de Diana de Gales. En su momento, llamaron al mayordomo "traidor".
En el documental que acaba de estrenarse, Diana habló de otro encuentro amoroso. Se enamoró con 24 años de un hombre que trabajaba en su "entorno", al que los medios británicos han identificado con el guardaespaldas Barry Mannakee.
Aunque Channel 4 dejó fuera del documental emitido algunas de las declaraciones de Diana alrededor de ese asunto, según la transcripción de las cintas publicada por el tabloide "The Sun" la princesa asegura que estuvo "profundamente enamorada" de ese hombre.
Mannakee fue apartado del servicio en el palacio de Kensington en 1986 y murió meses después en un accidente de motocicleta.
"Carlos me dijo: 'Se ha matado en un accidente de moto'. Debo decir que ese fue el mayor golpe de mi vida", relata Diana, según la transcripción de unas cintas que ya se habían visto en Estados Unidos, aunque no en el Reino Unido.