Lisa Brennan-Jobs revela secretos de su padre en “Small Fry”
La hija, al comienzo no reconocida, del genio tecnológico afirma en las páginas de su libro que Steve Jobs no era generoso con el dinero, ni con las comidas… ni con las palabras.
Redacción Gente
Small Fry es mucho más que un libro para su autora, Lisa Brennan-Jobs, hija del genio de la tecnología Steve Jobs. Sus páginas son una catarsis y una manera, tranquila y sobria, de saldar muchas cuentas con el pasado. A través de este relato, establece una realidad dolorosa para ella y empieza a solucionar una incógnita para los millones de seguidores del cofundador de Apple.
Desde el título Small Fry, cuya traducción al español es Niña mocosa o Insignificante, Lisa Brennan-Jobs deja claro que no tomó la decisión de escribir este libro para incrementar el mito, más bien, todo lo contrario. Al comienzo no fue reconocida por Steve Jobs, de ahí que durante muchos años a su mamá (Chrishann Brennan) le tocó echarse encima el peso de su manutención.
El comentario de Steve Jobs, según lo que aparece en Small Fry, libro que será publicado el 4 de septiembre y que Vanity Fair adelantó un fragmento importante hace unas horas, es que era estéril. Por eso, tanto al padre como a la hija les tocó someterse a una prueba de ADN.
Muy pronto se comprobó la paternidad del genio de la tecnología y a él le tocó destinar todos los meses una porción monetaria, insignificante de acuerdo con la narración de Lisa Brennan-Jobs.
“Hasta mis 2 años, mi madre complementaba lo que recibía de prestaciones sociales con trabajos de limpieza o de camarera. Mi padre no ayudaba mucho”, dice esta mujer que nació el 17 de mayo de 1978.
Al parecer, la relación entre Steve Jobs y su hija fue mejorando con el paso de los años. Sin embargo, ella nunca ha compartido muchos de los comentarios positivos que siempre han rondado a quien es considerado como el inventor del computador portátil o personal.
“Entendí que a lo mejor no era verdad el mito de los arañazos. Para entonces ya sabía que no era generoso con el dinero, la comida o las palabras; la idea de los Porsche parecía una divina excepción”, manifiesta Lisa Brennan-Jobs en su libro Small Fry.
Sobre el nombre, que comparten hija y una de las creaciones tecnológicas de Jobs y que resulta ser el aparato precursor del Mac, la autora dice que una vez le preguntó a su padre que si había bautizado así a la máquina en su honor. La respuesta fue tan negativa como inmediata. Algunos años después, durante un almuerzo, fue Bono de U2 quien formuló el mismo interrogante. En esa oportunidad, Steve Jobs dijo otra cosa.
Padre e hija estuvieron más unidos durante los últimos años de Jobs, quien murió el 5 de octubre a causa de un cáncer en el páncreas.
Falta poco tiempo para que Lisa Brennan-Jobs publique oficialmente su libro, que podría convertirse en uno de los fenómenos editoriales del año.
Small Fry es mucho más que un libro para su autora, Lisa Brennan-Jobs, hija del genio de la tecnología Steve Jobs. Sus páginas son una catarsis y una manera, tranquila y sobria, de saldar muchas cuentas con el pasado. A través de este relato, establece una realidad dolorosa para ella y empieza a solucionar una incógnita para los millones de seguidores del cofundador de Apple.
Desde el título Small Fry, cuya traducción al español es Niña mocosa o Insignificante, Lisa Brennan-Jobs deja claro que no tomó la decisión de escribir este libro para incrementar el mito, más bien, todo lo contrario. Al comienzo no fue reconocida por Steve Jobs, de ahí que durante muchos años a su mamá (Chrishann Brennan) le tocó echarse encima el peso de su manutención.
El comentario de Steve Jobs, según lo que aparece en Small Fry, libro que será publicado el 4 de septiembre y que Vanity Fair adelantó un fragmento importante hace unas horas, es que era estéril. Por eso, tanto al padre como a la hija les tocó someterse a una prueba de ADN.
Muy pronto se comprobó la paternidad del genio de la tecnología y a él le tocó destinar todos los meses una porción monetaria, insignificante de acuerdo con la narración de Lisa Brennan-Jobs.
“Hasta mis 2 años, mi madre complementaba lo que recibía de prestaciones sociales con trabajos de limpieza o de camarera. Mi padre no ayudaba mucho”, dice esta mujer que nació el 17 de mayo de 1978.
Al parecer, la relación entre Steve Jobs y su hija fue mejorando con el paso de los años. Sin embargo, ella nunca ha compartido muchos de los comentarios positivos que siempre han rondado a quien es considerado como el inventor del computador portátil o personal.
“Entendí que a lo mejor no era verdad el mito de los arañazos. Para entonces ya sabía que no era generoso con el dinero, la comida o las palabras; la idea de los Porsche parecía una divina excepción”, manifiesta Lisa Brennan-Jobs en su libro Small Fry.
Sobre el nombre, que comparten hija y una de las creaciones tecnológicas de Jobs y que resulta ser el aparato precursor del Mac, la autora dice que una vez le preguntó a su padre que si había bautizado así a la máquina en su honor. La respuesta fue tan negativa como inmediata. Algunos años después, durante un almuerzo, fue Bono de U2 quien formuló el mismo interrogante. En esa oportunidad, Steve Jobs dijo otra cosa.
Padre e hija estuvieron más unidos durante los últimos años de Jobs, quien murió el 5 de octubre a causa de un cáncer en el páncreas.
Falta poco tiempo para que Lisa Brennan-Jobs publique oficialmente su libro, que podría convertirse en uno de los fenómenos editoriales del año.