Marcela Sarmiento, una periodista con mil historias
La barranquillera, que trabaja para Univisión y la cadena radial española SER, asegura que el periodismo ha cambiado en los últimos años con la era digital. “No todo el mundo está en la capacidad de contar cosas, así lo crea”, afirma.
Son más de diez años los que lleva trabajando fuera del país. ¿El bagaje que adquirió en Colombia le sirvió en el exterior?
Claro que sí. Colombia es una escuela increíble, se prepara muy bien a la gente. Tenemos una manera muy profesional y humana de hacer las cosas. Además, cuando me fui del país seguí trabajando para Caracol Radio en Hoy por Hoy, y luego sí empecé en otros medios como El País, de España, el Huffington Post y la cadena radial española SER, donde sigo trabajando.
Es periodista de la cadena Univisión y hace parte de “Despierta América” y “Aquí y Ahora Show”, que son programas en los que presenta reportajes sobre historias humanas de latinos con éxitos dentro y fuera de los Estados Unidos. ¿Cómo hace para llegar a estas historias?
Son historias que la verdad uno va encontrando por la vida, unas llegan por casualidad, suerte y otras tienes que salir a la calle a buscarlas. Son historias humanas de personajes que hacen cosas increíbles, extraordinarias y que por esa razón merecen ser contadas. Los latinos tenemos mucho por contar y estos son espacios que me permiten hacerlo.
En todo este tiempo, ¿cuál es la historia que más le ha gustado contar?
Muy difícil decirte una. Hay diferentes historias que tienen un carácter humano y de superación muy lindo, pero la de Ruven Afanador fue una experiencia única e irrepetible. Un hombre culto, interesante, parece muy tímido pero es divertido y cuando me encontré con él en uno de sus estudios, empezamos a hablar de su trabajo y de todo lo que había hecho. No me quería parar de la silla, me daba pena, porque fue fascinante estar con él. Fue un reto editar la historia y contarla, porque tenía que hacerle justicia a este artista.
¿Desde cuándo se apasionó por contar este tipo de historias?
Cuento historias porque me gustan. Eso me apasiona, siempre lo he hecho. Cuando las historias merecen ser contadas es muy bonito ver cómo se transforman en una experiencia que sirva para alguien más.
Aparte de trabajar en Univisión, también tiene un pódcast llamado “La Scout”. ¿En qué consiste y cómo nació este proyecto?
Tengo el vicio y hábito de compartir los artículos de prensa que a mí me gustan y me parecen interesantes, siempre se los pasaba a mis familiares, amigos y colegas para que los leyeran. Así que ahí empecé con el pódcast y en este espacio comparto mis opiniones sobre los artículos de prensas publicados en diferentes medios escritos. Se puede escuchar por Spotify y en www.revolucionnetwork.com
Ha trabajado en los medios de comunicación que siempre ha querido, ¿qué le falta por cumplir?
Me gustaría seguir haciendo y contar las historias que a mí me gustan y de la manera que me gusta, ese es el privilegio más grande, ¿sabes? Cuando te dan la oportunidad de contar lo que quieres y con tu propio estilo, es lo más grande que puedes lograr, porque te respetan a ti como profesional. Si sigues órdenes y no defiendes tu estilo es muy complicado, pero, eso sí, uno tiene que trabajar bastante para lograr todo esto.
La manera de hacer periodismo cambió con la pandemia. ¿Cómo se adaptó a estos cambios?
Ha cambiado todo. Yo como reportera siempre estaba buscando la historias por fuera, en la calle, estaba en el sitio con la persona para empaparme de su realidad. Ahora toca todo por medio de Skype, Zoom, llamadas telefónicas... Se volvió un poco diferente el hecho de no estar allá con ellos, pero eso no quiere decir que no pueda ser igual de calidad y humana a través de la pantalla. Hay que sacar el mejor partido de lo que está pasando.
Teniendo en cuenta su experiencia, ¿qué consejos les daría a los futuros periodistas en formación?
La están teniendo dura y difícil. Todo este tema digital ha abierto la esfera de toda la gente que quiere estar escribiendo y quiere tener un oportunidad, pero hay que ser muy consecuentes con las cosas que uno cuenta y ser responsables con la información; eso es una cosa que se ha perdido muchísimo y es muy lamentable. No todo el mundo está en la capacidad de contar cosas, así lo crea.
Son más de diez años los que lleva trabajando fuera del país. ¿El bagaje que adquirió en Colombia le sirvió en el exterior?
Claro que sí. Colombia es una escuela increíble, se prepara muy bien a la gente. Tenemos una manera muy profesional y humana de hacer las cosas. Además, cuando me fui del país seguí trabajando para Caracol Radio en Hoy por Hoy, y luego sí empecé en otros medios como El País, de España, el Huffington Post y la cadena radial española SER, donde sigo trabajando.
Es periodista de la cadena Univisión y hace parte de “Despierta América” y “Aquí y Ahora Show”, que son programas en los que presenta reportajes sobre historias humanas de latinos con éxitos dentro y fuera de los Estados Unidos. ¿Cómo hace para llegar a estas historias?
Son historias que la verdad uno va encontrando por la vida, unas llegan por casualidad, suerte y otras tienes que salir a la calle a buscarlas. Son historias humanas de personajes que hacen cosas increíbles, extraordinarias y que por esa razón merecen ser contadas. Los latinos tenemos mucho por contar y estos son espacios que me permiten hacerlo.
En todo este tiempo, ¿cuál es la historia que más le ha gustado contar?
Muy difícil decirte una. Hay diferentes historias que tienen un carácter humano y de superación muy lindo, pero la de Ruven Afanador fue una experiencia única e irrepetible. Un hombre culto, interesante, parece muy tímido pero es divertido y cuando me encontré con él en uno de sus estudios, empezamos a hablar de su trabajo y de todo lo que había hecho. No me quería parar de la silla, me daba pena, porque fue fascinante estar con él. Fue un reto editar la historia y contarla, porque tenía que hacerle justicia a este artista.
¿Desde cuándo se apasionó por contar este tipo de historias?
Cuento historias porque me gustan. Eso me apasiona, siempre lo he hecho. Cuando las historias merecen ser contadas es muy bonito ver cómo se transforman en una experiencia que sirva para alguien más.
Aparte de trabajar en Univisión, también tiene un pódcast llamado “La Scout”. ¿En qué consiste y cómo nació este proyecto?
Tengo el vicio y hábito de compartir los artículos de prensa que a mí me gustan y me parecen interesantes, siempre se los pasaba a mis familiares, amigos y colegas para que los leyeran. Así que ahí empecé con el pódcast y en este espacio comparto mis opiniones sobre los artículos de prensas publicados en diferentes medios escritos. Se puede escuchar por Spotify y en www.revolucionnetwork.com
Ha trabajado en los medios de comunicación que siempre ha querido, ¿qué le falta por cumplir?
Me gustaría seguir haciendo y contar las historias que a mí me gustan y de la manera que me gusta, ese es el privilegio más grande, ¿sabes? Cuando te dan la oportunidad de contar lo que quieres y con tu propio estilo, es lo más grande que puedes lograr, porque te respetan a ti como profesional. Si sigues órdenes y no defiendes tu estilo es muy complicado, pero, eso sí, uno tiene que trabajar bastante para lograr todo esto.
La manera de hacer periodismo cambió con la pandemia. ¿Cómo se adaptó a estos cambios?
Ha cambiado todo. Yo como reportera siempre estaba buscando la historias por fuera, en la calle, estaba en el sitio con la persona para empaparme de su realidad. Ahora toca todo por medio de Skype, Zoom, llamadas telefónicas... Se volvió un poco diferente el hecho de no estar allá con ellos, pero eso no quiere decir que no pueda ser igual de calidad y humana a través de la pantalla. Hay que sacar el mejor partido de lo que está pasando.
Teniendo en cuenta su experiencia, ¿qué consejos les daría a los futuros periodistas en formación?
La están teniendo dura y difícil. Todo este tema digital ha abierto la esfera de toda la gente que quiere estar escribiendo y quiere tener un oportunidad, pero hay que ser muy consecuentes con las cosas que uno cuenta y ser responsables con la información; eso es una cosa que se ha perdido muchísimo y es muy lamentable. No todo el mundo está en la capacidad de contar cosas, así lo crea.