“Me fascina cantar”
La fiesta que más recuerda Liliana Rendón es la celebración de sus 15 años. La representante a la Cámara por Antioquia, del partido Alas Equipo Colombia, dice que quiere ser la primera mujer alcaldesa de la ciudad de Medellín.
El Espectador
¿Qué le dice el espejo?
Que hoy es mi día.
¿Es vanidosa?
Claro. Como toda mujer... y un poquito más.
Una película.
Mi vida sin mí (historia de una joven paciente terminal de cáncer).
¿Qué está leyendo ahora?
El olvido que seremos, de Héctor Abad Faciolince.
¿En qué es extravagante?
No me considero una mujer extravagante.
¿Cómo se desempeñan las mujeres en la política?
Son comprometidas y honestas, reconociendo que podemos tener mayor participación.
¿Con qué se dejaría tentar?
Una buena cena, música y vino en compañía de mi esposo. Solitos…
¿Qué recuerda de su infancia?
La participación permanente en todos los eventos cívicos de mi pueblo, Santa Rita de Ituango.
Un compromiso.
Trabajar por la gente, especialmente por los niños y los adultos mayores.
Lo mejor de la tierrita paisa.
El empuje y la calidez de su gente.
Una fiesta memorable.
Mis 15 años. Estuve rodeada de mucho amor y calor familiar. Fue un día que recordaré toda mi vida.
Su color favorito.
El verde, porque representa la exuberancia vegetal de nuestro país.
¿Y su fruta predilecta?
El banano.
Un sonido.
El canto de los pájaros y una guitarra en la noche.
¿Qué prefiere, la política o la sicología?
Ambas. Son totalmente complementarias.
Un desafío.
Ser la primera mujer alcaldesa de la ciudad de Medellín.
¿Canta, baila o cocina?
Las tres mientras estoy en la cocina.
Un talento que poco le conozca la gente.
La música. En especial, me gusta cantar. Lo hago cuando estoy en fiestas con personas allegadas.
¿Qué aficiones tiene?
La lectura y la música.
La decisión más controversial que ha tomado en su vida.
Cuando renuncié al concejo de Medellín para lanzarme a la Cámara de Representantes.
¿De qué está arrepentida?
Absolutamente de nada.
¿Qué la pone fuera de casillas?
La deslealtad y la deshonestidad.
¿El mejor piropo que le han echado?
Me lo dijo un señor en Abejorral: “Sí estoy de acuerdo con la clonación, pues me gustaría que me clonaran a una igualita”.
¿Se ha hecho alguna cirugía?
No. Pero no descarto esa posibilidad.
¿Cuál no se haría?
En mi rostro, pues considero que conlleva un alto riesgo de un cambio brusco en la apariencia.
Un lugar paradisíaco.
Siria (suroeste antioqueño).
¿Es consentida o manipuladora?
Consentida en un 100%.
¿Sobre qué no le gusta opinar?
Sobre las creencias de las personas. Hay que respetar las diferencias individuales.
¿Con qué se distrae fácilmente?
Con el llamado de mis hijas.
El aroma de Liliana Rendón…
La simpatía y la sensibilidad.
Una motivación...
Mi familia.
¿Quién es su mentor?
Los doctores Bernardo Posada y Jorge León Sánchez.
¿Qué le dice el espejo?
Que hoy es mi día.
¿Es vanidosa?
Claro. Como toda mujer... y un poquito más.
Una película.
Mi vida sin mí (historia de una joven paciente terminal de cáncer).
¿Qué está leyendo ahora?
El olvido que seremos, de Héctor Abad Faciolince.
¿En qué es extravagante?
No me considero una mujer extravagante.
¿Cómo se desempeñan las mujeres en la política?
Son comprometidas y honestas, reconociendo que podemos tener mayor participación.
¿Con qué se dejaría tentar?
Una buena cena, música y vino en compañía de mi esposo. Solitos…
¿Qué recuerda de su infancia?
La participación permanente en todos los eventos cívicos de mi pueblo, Santa Rita de Ituango.
Un compromiso.
Trabajar por la gente, especialmente por los niños y los adultos mayores.
Lo mejor de la tierrita paisa.
El empuje y la calidez de su gente.
Una fiesta memorable.
Mis 15 años. Estuve rodeada de mucho amor y calor familiar. Fue un día que recordaré toda mi vida.
Su color favorito.
El verde, porque representa la exuberancia vegetal de nuestro país.
¿Y su fruta predilecta?
El banano.
Un sonido.
El canto de los pájaros y una guitarra en la noche.
¿Qué prefiere, la política o la sicología?
Ambas. Son totalmente complementarias.
Un desafío.
Ser la primera mujer alcaldesa de la ciudad de Medellín.
¿Canta, baila o cocina?
Las tres mientras estoy en la cocina.
Un talento que poco le conozca la gente.
La música. En especial, me gusta cantar. Lo hago cuando estoy en fiestas con personas allegadas.
¿Qué aficiones tiene?
La lectura y la música.
La decisión más controversial que ha tomado en su vida.
Cuando renuncié al concejo de Medellín para lanzarme a la Cámara de Representantes.
¿De qué está arrepentida?
Absolutamente de nada.
¿Qué la pone fuera de casillas?
La deslealtad y la deshonestidad.
¿El mejor piropo que le han echado?
Me lo dijo un señor en Abejorral: “Sí estoy de acuerdo con la clonación, pues me gustaría que me clonaran a una igualita”.
¿Se ha hecho alguna cirugía?
No. Pero no descarto esa posibilidad.
¿Cuál no se haría?
En mi rostro, pues considero que conlleva un alto riesgo de un cambio brusco en la apariencia.
Un lugar paradisíaco.
Siria (suroeste antioqueño).
¿Es consentida o manipuladora?
Consentida en un 100%.
¿Sobre qué no le gusta opinar?
Sobre las creencias de las personas. Hay que respetar las diferencias individuales.
¿Con qué se distrae fácilmente?
Con el llamado de mis hijas.
El aroma de Liliana Rendón…
La simpatía y la sensibilidad.
Una motivación...
Mi familia.
¿Quién es su mentor?
Los doctores Bernardo Posada y Jorge León Sánchez.