Raica Oliveira, llena de gracia

Raica Oliveira tiene 26 años, es brasileña y es una más de las chicas de su país que han conquistado las pasarelas internacionales de la moda. Es heredera de un legado que inició Gisele Bündchen, la top model mejor pagada en 2009, quien hizo que los cazadores de talentos de las agencias norteamericanas y europeas pusieran sus ojos en las pequeñas provincias del sur de Brasil.

De esas tierras han salido Alessandra Ambrosio y Caroline Trentini, Adriana Lima, Laís Ribeiro y Gracie Carvalho. También Raica Oliveira, quien nació en Niteroi, un pequeño pueblo ubicado a sólo 21 km de Río de Janeiro. Su belleza hace alarde de ese fenotipo mestizo, mezcla de genes alemanes, italianos y polacos, negros e indígenas, que convierte a Brasil en una potencia exportando belleza.

Raica llega esta semana a Colombia para estar en la pasarela de la diseñadora Beatriz Camacho, en el marco del Congreso Ixel Moda, que del 27 al 29 de septiembre se llevará a cabo en Cartagena. “Ixel Moda quiso invitar a una personalidad del mundo del modelaje para celebrar el programa ‘Cartagena destino de moda’, que busca posicionar a La Heroica como un centro de producción de la moda nacional”, explica Erika Rohenes, directora del congreso, quien asegura que eligió a Raica Oliveira no sólo por su belleza, sino por sus reconocidos trabajos en Arte Solidaria, una fundación de ayuda en Brasil.

En 1999, un agente de modelos que la vio en la calle la convenció para que se postulara como candidata al concurso Elite Model Look. Se convertiría luego en la imagen de la marca Christian Dior y su cara inundó las revistas Vogue y Vanity Fair. Sus honorarios se treparon en minutos y es la hora que cobra US$20.000 por aparición. Se consagra definitivamente en el mundo del modelaje con su aparición en 2007 en la revista Sport Illustrated, que, como bien se sabe en el mundo de la belleza, es la bendición para poder conquistar las pasarelas de vestidos de baño y ropa interior en las semanas de la moda más importantes del mundo, como Nueva York, París y Milán.

Para la mayoría de las modelos brasileñas, las relaciones amorosas con estrellas de las ligas mundiales de fútbol se han convertido en una estrategia efectiva para ganar visibilidad pública. Raica Oliveira no escapó a la regla. La bella morena fue por unos años la novia oficial de Ronaldo y fue, de hecho, la que lo apoyó en sus preparaciones para bajar de peso y lograr entrar en el seleccionado brasileño para la Copa Mundial de Sudáfrica. El romance, que parecía serio a pesar de la poca seriedad que le es atribuía al futbolista, terminó a raíz de que la supermodelo descubrió que Ronaldo se la jugaba con su odontóloga Erika Abreu. Claro, con sólo echarle un vistazo a sus dientes es de suponerse que el jugador pasaba más tiempo con la odontóloga que entre los brazos de su novia, que por estos días se ha convertido en la protagonista de la nueva campaña publicitaria de la marca de lencería Victoria’s Secret.

Raica Oliveira tiene 26 años, es brasileña y es una más de las chicas de su país que han conquistado las pasarelas internacionales de la moda. Es heredera de un legado que inició Gisele Bündchen, la top model mejor pagada en 2009, quien hizo que los cazadores de talentos de las agencias norteamericanas y europeas pusieran sus ojos en las pequeñas provincias del sur de Brasil.

De esas tierras han salido Alessandra Ambrosio y Caroline Trentini, Adriana Lima, Laís Ribeiro y Gracie Carvalho. También Raica Oliveira, quien nació en Niteroi, un pequeño pueblo ubicado a sólo 21 km de Río de Janeiro. Su belleza hace alarde de ese fenotipo mestizo, mezcla de genes alemanes, italianos y polacos, negros e indígenas, que convierte a Brasil en una potencia exportando belleza.

Raica llega esta semana a Colombia para estar en la pasarela de la diseñadora Beatriz Camacho, en el marco del Congreso Ixel Moda, que del 27 al 29 de septiembre se llevará a cabo en Cartagena. “Ixel Moda quiso invitar a una personalidad del mundo del modelaje para celebrar el programa ‘Cartagena destino de moda’, que busca posicionar a La Heroica como un centro de producción de la moda nacional”, explica Erika Rohenes, directora del congreso, quien asegura que eligió a Raica Oliveira no sólo por su belleza, sino por sus reconocidos trabajos en Arte Solidaria, una fundación de ayuda en Brasil.

En 1999, un agente de modelos que la vio en la calle la convenció para que se postulara como candidata al concurso Elite Model Look. Se convertiría luego en la imagen de la marca Christian Dior y su cara inundó las revistas Vogue y Vanity Fair. Sus honorarios se treparon en minutos y es la hora que cobra US$20.000 por aparición. Se consagra definitivamente en el mundo del modelaje con su aparición en 2007 en la revista Sport Illustrated, que, como bien se sabe en el mundo de la belleza, es la bendición para poder conquistar las pasarelas de vestidos de baño y ropa interior en las semanas de la moda más importantes del mundo, como Nueva York, París y Milán.

Para la mayoría de las modelos brasileñas, las relaciones amorosas con estrellas de las ligas mundiales de fútbol se han convertido en una estrategia efectiva para ganar visibilidad pública. Raica Oliveira no escapó a la regla. La bella morena fue por unos años la novia oficial de Ronaldo y fue, de hecho, la que lo apoyó en sus preparaciones para bajar de peso y lograr entrar en el seleccionado brasileño para la Copa Mundial de Sudáfrica. El romance, que parecía serio a pesar de la poca seriedad que le es atribuía al futbolista, terminó a raíz de que la supermodelo descubrió que Ronaldo se la jugaba con su odontóloga Erika Abreu. Claro, con sólo echarle un vistazo a sus dientes es de suponerse que el jugador pasaba más tiempo con la odontóloga que entre los brazos de su novia, que por estos días se ha convertido en la protagonista de la nueva campaña publicitaria de la marca de lencería Victoria’s Secret.