'Reconstruyo la historia de los músicos'
Una de las locutoras más recordadas de la radio juvenil colombiana, y actualmente presentadora de 'Espacios Musicales' de señal Radio Colombia, se define como amante de los micrófonos, de la música y de su oficio como periodista.
El Espectador
¿Con qué se siente más a gusto, con las cámaras o con los micrófonos?
Con los micrófonos, sin lugar a dudas. Soy tímida y detrás de los micrófonos puedo expresarme con mayor libertad, la voz y la creatividad son las únicas herramientas. La televisión, en cambio, maneja otro lenguaje, el de las imágenes, y por ello tiene otras exigencias; el maquillaje, el peinado, las luces, un bonito set.
Estoy en ese aprendizaje, tratando de mezclar la naturalidad que da la radio para incorporarla a la estética televisiva.
Siendo abogada y de familia de músicos, ¿cómo terminó en los medios?
El derecho es una carrera que deberíamos estudiar todos los que estamos en los medios, porque da un panorama de la sociedad y de las leyes que nos rigen. Pero el punto de unión de mi carrera con los medios de comunicación, en mi caso, llegó gracias a mi papá, el compositor Marco Rayo, que siempre me decía que los abogados deben aprender a hablar en público y, como yo era tan tímida, pues me pareció una buena idea. A partir de allí me enamoré de la radio, que ha sido el puente que me une a la música.
Ha pasado por programas de música, de familia, informativos, ¿cuál cree que es su especialidad o punto fuerte?
La música, definitivamente. Precisamente por venir de una familia de músicos (papá compositor y hermanos pianista y bajista), mi sensibilidad es mucho mayor en este campo.
En la música, ¿con cuál género se despierta y con cuál termina el día?
Me despierto con rock y dependiendo del día me acuesto con salsa.
Uno que definitivamente no está en su reproductor…
La música de carrilera.
Un compositor, aparte de su padre, que admire…
El Joe Arroyo es el maestro de maestros.
Una canción…
Cartagena de Indias, de Marco Rayo.
Lo que le falta a la música en Colombia para ser una gran industria.
Ser conscientes de la diversidad de ritmos, de la riqueza musical que poseemos en nuestro país para ir en su búsqueda, tomar la música como una profesión y prepararnos como empresarios musicales para salir a difundirla.
El mejor invitado que ha tenido en su programa del Canal Capital, ‘Deysa Rayo entrevista’.
Carlos Vives, pues tiene el Caribe a flor de piel.
El menos charlatán…
Fonseca es un hombre bastante reservado.
El más complicado…
Ninguno, pero estoy buscando desesperadamente a Jorge Velosa, no es fácil de conseguir.
De sus metas, ¿qué no ha hecho?
Viajar por muchas partes del mundo entrevistando a músicos de todas las latitudes.
¿Qué no haría otra vez?
Definitivamente no retirarme de mis clases de piano.
¿Qué es lo que más le gusta a la gente de su programa?
No sé a la gente. A mí me gusta reconstruir la historia de nuestros músicos, dejar un testimonio visual y sonoro que sirva de memoria a las futuras generaciones sobre el gran aporte de nuestros artistas.
¿Con qué se siente más a gusto, con las cámaras o con los micrófonos?
Con los micrófonos, sin lugar a dudas. Soy tímida y detrás de los micrófonos puedo expresarme con mayor libertad, la voz y la creatividad son las únicas herramientas. La televisión, en cambio, maneja otro lenguaje, el de las imágenes, y por ello tiene otras exigencias; el maquillaje, el peinado, las luces, un bonito set.
Estoy en ese aprendizaje, tratando de mezclar la naturalidad que da la radio para incorporarla a la estética televisiva.
Siendo abogada y de familia de músicos, ¿cómo terminó en los medios?
El derecho es una carrera que deberíamos estudiar todos los que estamos en los medios, porque da un panorama de la sociedad y de las leyes que nos rigen. Pero el punto de unión de mi carrera con los medios de comunicación, en mi caso, llegó gracias a mi papá, el compositor Marco Rayo, que siempre me decía que los abogados deben aprender a hablar en público y, como yo era tan tímida, pues me pareció una buena idea. A partir de allí me enamoré de la radio, que ha sido el puente que me une a la música.
Ha pasado por programas de música, de familia, informativos, ¿cuál cree que es su especialidad o punto fuerte?
La música, definitivamente. Precisamente por venir de una familia de músicos (papá compositor y hermanos pianista y bajista), mi sensibilidad es mucho mayor en este campo.
En la música, ¿con cuál género se despierta y con cuál termina el día?
Me despierto con rock y dependiendo del día me acuesto con salsa.
Uno que definitivamente no está en su reproductor…
La música de carrilera.
Un compositor, aparte de su padre, que admire…
El Joe Arroyo es el maestro de maestros.
Una canción…
Cartagena de Indias, de Marco Rayo.
Lo que le falta a la música en Colombia para ser una gran industria.
Ser conscientes de la diversidad de ritmos, de la riqueza musical que poseemos en nuestro país para ir en su búsqueda, tomar la música como una profesión y prepararnos como empresarios musicales para salir a difundirla.
El mejor invitado que ha tenido en su programa del Canal Capital, ‘Deysa Rayo entrevista’.
Carlos Vives, pues tiene el Caribe a flor de piel.
El menos charlatán…
Fonseca es un hombre bastante reservado.
El más complicado…
Ninguno, pero estoy buscando desesperadamente a Jorge Velosa, no es fácil de conseguir.
De sus metas, ¿qué no ha hecho?
Viajar por muchas partes del mundo entrevistando a músicos de todas las latitudes.
¿Qué no haría otra vez?
Definitivamente no retirarme de mis clases de piano.
¿Qué es lo que más le gusta a la gente de su programa?
No sé a la gente. A mí me gusta reconstruir la historia de nuestros músicos, dejar un testimonio visual y sonoro que sirva de memoria a las futuras generaciones sobre el gran aporte de nuestros artistas.