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Un tatuaje en el brazo derecho de la actriz Emma Watson despertó recientemente una oleada de críticas en redes sociales debido a un error de ortografía en su redacción. “Times Up”, decía la marca que llevó en su piel la artista el pasado domingo durante la fiesta de Vanity Fair tras los premios Óscar, en vez de “Time’s Up”, lema del movimiento que busca denunciar los abusos sexuales de Hollywood y demás industrias.
Su intención de visibilizar la iniciativa a través de un acto simbólico con un tatuaje temporal se vio opacada por la falta de un apóstrofe en la frase. A pesar de que Watson reaccionó de forma tranquila y cómica ante los reproches, lo cierto es que detrás de su grabado hay un argumento fuerte frente a la inequidad de género sistémica en el gremio del entretenimiento.
“El tiempo se ha acabado para el abuso sexual, para el acoso y para la desigualdad en el lugar de trabajo. Es hora de hacer algo con ello" es el emblema del movimiento, que en español significa “Se acabó el tiempo”. Fundado el primer día de este año, “Time’s Up” nació a propósito de la avalancha de denuncias que recibieron figuras como el productor Harvey Heinstein, el director James Toback y el actor protagonista de House of Cards, Kevin Spacey.
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Más de 300 mujeres que trabajan en el cine, la televisión o el teatro alzaron sus voces para dar inicio al lema que busca empoderar a las mujeres del mundo -no solo de la industria del entretenimiento sino en otros “mercados menos glamorosos y menos valorados"-, a centrar la atención en los casos de abuso en entornos laborales, así como exigir igualdad de beneficios, oportunidades, remuneración y representación.
“Para cada mujer trabajadora en la agricultura que ha tenido que rechazar avances sexuales no deseados de su jefe, cada mucama que ha tratado de escapar de un huésped agresivo (…) estamos con ustedes. Nosotros los apoyamos”, asegura la carta, firmada por Ashley Judd, Gwyneth Paltrow, Salma Hayek. Meryl Streep, Jennifer Lawrence, Natalie Portman, Nicole Kidman, Penelope Cruz, Reese Witherspoon y Scarlett Johansson, entre otras estrellas.
Esta iniciativa se comprometió, además, a impulsar una legislación que fortalezca las leyes sobre acoso y discriminación, así como a “visibilizar historias de mujeres con el objetivo de cambiar la la percepción y el tratamiento de ellas en nuestra sociedad” a través de las plataformas con las que cuentan las artistas para amplificar sus palabras y causas.
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Así mismo, creó un fondo de defensa legal que ha recaudado más de 13,4 millones de dólares para proporcionar apoyo subsidiado a mujeres y hombres que han sido sexualmente hostigados, agredidos o abusados.
En su página web, el movimiento revela datos que evidencian que, más allá de un error ortográfico, "Time's Up" es algo de lo que es necesario hablar: una de cada tres mujeres entre los 18 y 34 años ha sido víctima de acoso sexual en su puesto de trabajo y un 71% de las acosadas no se siente capaz de denunciarlo.
La propuesta llevó a las mujeres de Hollywood a vestirse de negro en la ceremonia de los Globos de Oro. Y, aunque en los premios Óscar los colores adornaron la alfombra roja, fueron muchos los actores y actrices los que cargaron en su pecho un pin con el lema.
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Emma Watson quiso llevarlo más allá y grabarlo en su piel para reafirmar su compromiso con la causa, y, aunque la ausencia de un apóstrofe se llevó la mirada de los medios, no hay por qué dejar atrás el poderoso mensaje que augura que el tiempo del acoso y la violencia de género está a punto de acabar.